“El contador 2”: la secuela que se retó a ser mejor que la primera parte… y lo logró

La secuela de “El contador” es una historia casi completamente nueva. Por lo menos esa es la sensación que deja tras un primer vistazo. Los casi diez años que han transcurrido entre el estreno de la primera película y esta segunda parte sirvieron para que Gavin O’Connor, su director, afilara junto al guionista Bill Dubuque varios detalles de la trama que ya no se sostiene solo en la performance de Ben Affleck de un contador con un TEA de alto funcionamiento, sino en otros ‘lobos solitarios’ que se le unen para desentrañar a una organización criminal.

Así, Christian Wolff (Ben Affleck), ya no está solo contra el mundo, tiene a su lado a su poco ortodoxo hermano Braxton (Jon Bernthal) y a la agente Marybeth Medina (Cynthia Addai-Robinson) empecinada en seguir las reglas muy a pesar de sus dos aliados.

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La sinopsis

"El contador 2"

La secuela de "El contador" comienza con la muerte de Ray King (J.K. Simmons) y un mensaje que se deja en la escena mortal: "busca al contador". Cuando nos reencontramos con el personaje a cargo de Ben Affleck, este continúa con sus hábitos de siempre. Tiene una vida parametrada al milímetro, pero también se ha autoimpuesto mejorar su vida social. Así se producen escenas muy divertidas, como aquella en la que intenta hackear las apps de citas y termina en una reunión para buscar pareja que tiene un final predecible, pero no por ello menos cómico. Esta nueva entrega está marcada por el gran sentido del humor de su guion y por momentos de emoción que se generan por la nueva dupla protagónica. Y es que no tardara en regresar a escena Brax, el hermano del contador interpretado por Jon Bernthal. ¿El resultado? Una secuela que logra algo que todas quieren pero pocas consiguen: superar a su predecesora.

Una década dibujando el camino

Esta nueva historia funciona muy bien gracias a la buena química de su elenco protagónico y a un guión que es consecuente con lo planteado en la primera película. Como nos dice Gavin O’Connor en una comunicación vía Zoom de cara al estreno de “El contador 2” en América Latina, siempre tuvo claro el camino que seguiría esta secuela y por ello los elementos para el desarrollo de los personajes se cimentaron desde un primer momento.

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“Siempre quise llevar a Braxton a la vida de Christian: explorar esa relación y arreglar lo que era una historia rota en su pasado. Esa fue siempre la intención al escribir el guión de la segunda película”, explica el cineasta, quien para ello no dudó en dejar fuera a personajes que tuvieron un rol protagónico en la primera parte: como Ray King (rol a cargo de J.K. Simmons) y Dana (interpretada por Anna Kendrick).

“Tuve una conversación dolorosa con J.K. porque Bill y yo decidimos involucrar a Christian y Marybeth en una trama más personal, así que sentimos que teníamos que eliminar a Ray King”, explica el director sobre la muerte que se ha anunciado ya en los tráilers oficiales, así que no se preocupen por los spoilers.

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Personajes más maduros

Para Cynthia Addai-Robinson, la salida de Ray, significó un mayor protagonismo para la agente Medina, quien estuvo bajo su mando en la primera entrega y que por ello en los primeros minutos de la secuela se enfrenta a una especie de síndrome del impostor que, para su intérprete, hacen de su historia mucho más identificable con la audiencia.

“Siento que el personaje tiene muchos momentos en los que la gente se puede sentir identificada con ella, como este síndrome del impostor que siente porque tiene este nuevo puesto de subdirectora y se pregunta si se lo ganó por su inteligencia y esfuerzo o porque Ray King y el contador la pusieron allí. Es un sentimiento muy honesto y cercano, porque mucha gente se pregunta si está donde está por sus propios méritos”, nos contó Cynthia Addai-Robinson en otra videollamada por Zoom en la que estuvo acompañada por Daniella Pineda, uno de los nuevos rostros de esta secuela.

La mala de la película

Al igual que Addai-Robinson, Daniella Pineda fue parte del elenco de “The Vampire Diaries”, y en “El contador 2” asume el rol de Anaïs, una villana con una compleja historia detrás y que tiene un reto muy particular para su intérprete: juega un rol clave en la historia, pero casi no tiene diálogo.

“Creo que tengo cinco líneas en toda la película”, dice Pineda con una sonrisa sobre el personaje para el que se inspiró en el trabajo de actores como Isabelle Huppert en “La profesora de piano” y Javier Bardem en “No es país para viejos”.

“Ha sido un rol muy diferente a otros que he interpretado, pero fue muy divertido interpretar a un depredador supremo como Anaïs”, describe Pineda sobre el personaje que tiene algunas escenas de acción memorables en esta secuela, como aquella que involucra su primer cara a cara con la agente Medina.

“Una secuencia de lucha es muy estresante y si no te llevas bien con tu colega de reparto, puede ser un poco desagradable. Pero Cynthia es una persona muy tranquila y agradable y congeniamos muy bien, eso hizo del proceso algo más placentero”, explicó la artista de ascendencia latina. “Además, se requiere mucha confianza para las escenas de acción. Es importante confiar en tu director y también en tus compañeros actores, especialmente en algo tan intenso como la coreografía de una pelea. Le confías tu seguridad, tu salud. Solo funciona si confían el uno en el otro”, agregó Addai-Robinson.

Retrato de la neurodiversidad

Los personajes femeninos de “El contador 2” tienen varias aristas interesantes, pero quizás quien más llama la atención en esta película es Justine, un rol de menor desarrollo en la primera cinta que crece en esta secuela.

Aunque en la actualidad cuando una persona se asiste de un teléfono para resolver dudas de todo tipo pensamos en la inteligencia artificial, en esta historia la inteligencia es humana en todos los sentidos. Así, Justine (interpretada en esta ocasión por Allison Robertson y también por Alison Wright) es la aliada más poderosa de Christian Wolff.

Mediante un teléfono, el contador se conecta con ella y un grupo de pacientes del Centro de tratamiento Harbor Neuroscience para niños neurodivergentes, personajes que son interpretados por niños y adolescentes con TEA.

Y es que aunque el personaje central de “El contador 2” no deja de ser un retrato muy superficial y estereotipado de la neurodiversidad, sus realizadores se han preocupado en esta ocasión de sumar diversidad desde el elenco. “Todos los niños del elenco que elegimos son neurodiversos, eso era importante para nosotros”, explicó Gavin O’Connor.

Para el cineasta lo que ocurre con Justine y su equipo en el Harber Neuroscience se presta para una trama aparte porque en su mente: “Justine no solo hace ese tipo de trabajo para Christian. En mi mente, hay otros contadores en el mundo y estos niños están allí todos los días haciendo algo para cada una de esas cuentas que ella maneja. Quién sabe, tal vez eso se convierta en algo más”, revela O’Connor, cuya mente está ya maquinando una siguiente película, pues no es un secreto que siempre imaginó “El contador” como una trilogía. De momento, la expectativa con la segunda parte es alta. Las predicciones ya estiman una recaudación del doble de lo que logró la primera en el 2016 y un interés mayor por la historia que se ha ido convirtiendo en un clásico de acción gracias al streaming.