Edison Cavani y Cristiano Ronaldo demostraron compañerismo; lo que es un ejemplo para los hinchas. (Foto: Reuters)
Edison Cavani y Cristiano Ronaldo demostraron compañerismo; lo que es un ejemplo para los hinchas. (Foto: Reuters)

Toda fiesta tiene un idiota dispuesto a arruinarla. Y el fútbol no se salva. Que lo digan los vecinos de Marsella que padecieron tres días de salvajismo entre hooligans y ultras rusos durante la última Eurocopa. O la policía de Bilbao que vio llegar en febrero a 500 radicales del Spartak de Moscú y uno de sus agentes murió de infarto por el susto. Días antes, esas mismas bestias se habían grabado practicando batallas campales en un bosque anunciando que ya estaban listos para el Mundial.

Pero, en vez de militarizar las calles durante esta , los rusos optaron por un inédito método de control: el Fan ID. Cada hincha que compró una entrada tuvo que tramitar este documento que contiene los datos del pasaporte, funciona como visa y es obligatorio para ingresar a los estadios y registrarse en hoteles. En la práctica, rastrea los antecedentes y los movimientos de cada espectador. Su uso permitió identificar y deportar a decenas de violentos como los argentinos que molieron a golpes a croatas y también a acosadores de mujeres.

Si bien este antídoto contra energúmenos ha sido exitoso, no está exento de polémica. El Fan ID es un identificador otorgado por el Gobierno Ruso que no está bajo la supervisión de la . Los datos personales de miles de personas de todo el mundo están ahora en manos del Gobierno y nadie sabe qué uso le darán a esa data, aunque la organización asegura que solo la almacenarán hasta el 25 de julio.

Todo parece indicar que este modelo llegó para quedarse y en los se espera un sistema similar que incluirá el reconocimiento facial. Todo sea por una fiesta en paz.

Contenido Sugerido

Contenido GEC