El médico hematólogo Christian Omar Ramos-Peñafiel comentó, en el seminario “Educar para vivir” de la Asociación Mexicana de la lucha contra el cáncer, que “la sangre es como un vagón de tren que llega a diferente estaciones del cuerpo humano”.
La leucemia es un cáncer hematológico que se desarrolla en la médula ósea, esta es el vagón primario y los ganglios son los secundarios. Para cuando la sangre se enferma, la estación primaria presenta leucemia, mientras en las secundarias ocasionan un linfoma.
De dicho modo, el especialista explicó de modo didáctico cómo se producen los cánceres en la sangre.
¿Cómo se clasifica la leucemia?
Hay varias maneras de clasificar la leucemia, primero se le conoce como hematológico o líquidos.
“Hay cánceres que se llaman sólidos, quiere decir que están afectando alguna estructura específica, y otros cánceres que son líquidos. Estos últimos indirectamente implican todos los sitios en donde cruza la sangre. De ahí que lo que llamamos leucemias son cánceres líquidos”, comentó a la revista Reporte Índigo.
En pacientes con esta enfermedad, la producción de glóbulos blancos (leucocitos) aumenta de manera significativa en el cuerpo. Esto porque son los encargados de combatir infecciones en el cuerpo.
Además, la leucemia se clasifica como leucemias agudas o crónicas, lo que no quiere decir que se convierta una en la otra. “Son distintas enfermedades pero su comportamiento de inicio súbito o lento”, añadió.
Otra clasificación de la leucemia se da por la célula cuyo interior está alterado, pues se debe recordar que esta no forma tumores.
Por ejemplo, cuando el cáncer se presenta en aquellas que formarán linfocitos, se le llama linfocítica o linfoblástica; pero si ocurre en las células que serán glóbulos rojos, algunos tipos de glóbulos blancos o plaquetas, se le llama mielógena o mieloide.