Tras el caso de la niña de tres años secuestrada y ultrajada por Juan Antonio Enríquez García, en Chiclayo, el presidente Pedro Castillo anunció que el Gobierno evalúa medidas drásticas como la aplicación de la castración química obligatoria para los violadores de menores de edad, adolescentes y mujeres, tal como ya se realiza en otros países del mundo.
“Basta ya de tanta violencia, los crímenes de violencia sexual contra los niños y niñas no serán tolerados por este gobierno, ni quedarán impunes. El dolor de esta familia también es el nuestro, me siento indignado ante tanta crueldad”, afirmó el jefe del Estado, según señala un comunicado de prensa de la Presidencia de la República.
Sin embargo, esta no es la primera vez que se discute en el país el tema de la castración química para los agresores sexuales. En mayo de 2018, el Congreso aprobó, en primera votación, que este tipo de castración formen parte del castigo para los violadores de menores de 14 años. La iniciativa del entonces congresista Yonhy Lescano nunca fue promulgada.
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Castración química: ¿en qué consiste?
El doctor Juan Arones Collantes, urólogo de la Clínica Anglo Americana, nos ofrece a continuación mayores detalles sobre lo que es la castración química, su aplicación en la medicina, los costos que tiene y lo que sienten las personas que se han sometido a este procedimiento médico.
Antes de detallar al respecto, es necesario definir lo que significa castración.
“La castración es eliminar la función que tienen los testículos de producir testosterona. La testosterona se puede eliminar de forma quirúrgica a través de la extracción de los testículos y también con ampollas (castración química) de análogos LHRH (hormona liberadora de hormonaluteinizante). Ambos hacen que la testosterona se erradique”, detalla Arones a El Comercio.
“En medicina, la castración se utiliza generalmente en pacientes con cáncer de próstata en estado avanzado, porque la próstata depende mucho de la testosterona para crecer y por eso se opta por esta solución, para evitar futuras complicaciones”, agrega el especialista.
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—¿En qué consiste la castración química?
Consiste en aplicar la ampolla LHRH de manera intramuscular, dependiendo de las causas, el tiempo que se busque que haga efecto. Es un medicamento medianamente caro, que está en promedio US$250 - US$300 mensuales.
—¿Cuánto dura el proceso?
El proceso es inmediato. Apenas se coloca la ampolla, se disminuye la libido.
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—¿En qué casos lo aplica la medicina?
En casos de cáncer de próstata en varones y tumores de ovario en damas... El análogo LHRH bloquea la testosterona en hombres y en mujeres, los ovarios. Son las causas más comunes.
—¿Cómo es la vida de los pacientes después de la castración en los planos físico y emocional?
Esta castración usualmente no trae consigo un cambio en los hábitos de la persona que se somete a ella. Existen pacientes con disfunción sexual, donde intervienen la libido, la erección y la eyaculación, es decir los tres parámetros. La libido se altera cuando falta la testosterona, que es una consecuencia de la castración química.
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En el plano emocional, en una persona normal, le va a disminuir la libido. En el ámbito físico, puede haber un cambio en la distribución de la grasa del cuerpo y aumenta el peso, hay algunos casos en los que crecen las mamas de los varones.
—¿Es cierto que si se deja de aplicar la medicina todo vuelve a la normalidad?
Absolutamente. Hay ampollas que duran un mes, tres meses, seis meses e incluso un año. También hay implantes que duran cinco años, así como lo usan las mujeres para la anticoncepción. Si se deja de usar estos productos, a veces queda el efecto residual de un mes y posterior a eso, se regresa a la normalidad.