La historia se repite en todo el mundo, trátese de Lima, Madre de Dios o Roma: siempre hay una ciudad donde menores de edad son víctimas de la explotación sexual. “Baby” de Netflix es una serie cruda, pues expone cómo niñas son tratadas como objetos, vidas cuyo prometedor futuro puede hacerse añicos sin importar a qué sector socioeconómico pertenezcan. La segunda temporada de esta ficción, basada en un caso de prostitución de Italia que vinculaba a menores con hombres de las altas esferas del poder, está disponible en Netflix desde el viernes 25 de octubre.
“Baby” narra la vida de Chiara (Benedetta Porcaroli) y Ludovica (Alice Pagani), dos adolescentes de 16 años de un barrio rico de Roma que aparentemente llevan una vida tranquila y que asisten a uno de los mejores colegios de esa ciudad, sin embargo, ambas son víctimas de explotación sexual.
Ludovica es una joven que tiene problemas para relacionarse con su entorno. Gracias a que un video en el que se ve haciéndole sexo oral a uno de sus compañeros es divulgado, ella es tachada como una joven “fácil”, y es rechazada por sus compañeros de colegio. Chiara, en cambio, pertenece a las jóvenes populares del colegio, pero esto cambia cuando empieza a juntarse con Ludovica, y el alumno nuevo Damiano (Riccardo Mandolini).
En la primera temporada se narra cómo una vida de lujo, las drogas y una mala relación con los padres, lleva a estar jóvenes a caer en manos de explotadores infantiles. La segunda temporada, de también seis capítulos, se centra en lo que ocurre al regresas a clases.
Al volver al colegio algunas cosas no han cambiado: Ludovica continúa siendo víctima de la prostitución y, si bien Chiara ya no está envuelta en ese mundo, aún lo tiene cerca de ella pues quiere ayudar a Ludovica y a Damiano a salir del círculo de explotación. Este último joven está metido de lleno en este mundo por culpa de Fiore (Guiseppe Maggio), un proxeneta.
Otra historia fuerte de la serie "Baby”, es la de Brando (Mirko Trovato), un abusador sin escrúpulos, que siempre ha tratado con crueldad a Fabio (Brando Pacitto) por ser homosexual. Entre estos adolescentes surgirá una relación inesperada que no parece tener ni pies ni cabeza. La segunda temporada también continúa con la relación entre Mónica (Claudia Pandolfi), una mujer de más de 40 años, vinculada sexualmente con Niccoló (Lorenzo Zurzolo), un menor de edad.
“La historia que presentan los guionistas de “Baby” en esta segunda temporada es más fuerte que en la primera, porque muestran las consecuencias que puede traer a una mujer entrar a este estilo de vida.”
BASADO EN HECHOS REALES
El caso real y que produjo un gran escándalo en Italia se dio entre los años 2013 y 2014. Esta investigación llamada Baby Squillo se centró en dos chicas, cuyos nombres nunca fueron revelados, pero se las llamó Angela (15 años) y Agnese (14 años). Ellas eran alumnas en un colegio de lujo en Parioli, Roma, y estaban involucradas en la explotación sexual comercial. Según informaron medios italianos, la mayor era explotada por dinero para lujos, mientras que la menor era explotada para poder pagar las cuentas de su madre.
Más de veinte hombres entre empresarios, policías y políticos italianos fueron acusados de haber tenido relaciones sexuales con adolescentes, que se prostituían para financiar viajes, lujos y pagar cuentas. Uno de los casos involucraban al empresario Mauro Floriani, esposo de Alessandra Mussolini, la nieta del dictador Benito Mussolini.
En las grabaciones divulgadas por la policía italiana evidenciaron que la madre de la más joven le pedía que regresa a trabajar para poder tener más dinero, incluso cuando esta niña se sentía mal o que no le daba tiempo para estudiar. La madre pidió que compaginara ambas cosas y que continúe siendo explotada. Durísimo.
SERIE POLÉMICA
Cuando se estrenó la primera temporada de la serie de Marco De Angelis a finales del año pasado, muchas voces como el Centro Nacional de Explotación Sexual de Estados Unidos pidieron la paralización del proyecto, pero sin éxito. La vicepresidenta de este organismo, Lisa Thompson, calificó la actitud de Netflix como “hipócrita”, ya que el servicio streaming despidió al actor Kevin Spacey de la serie “House of Cards” cuando se le conoció las denuncias por abuso sexual; sin embargo, financiaba una serie sobre la explotación sexual de menores.
Al igual que con “13 Reasons Why”, Netflix explicó en ese momento que no estaban usando este tema como algo morboso, sino para mostrar una problemática social. La historia que presentan los guionistas de “Baby” en esta segunda temporada es más fuerte que en la primera, porque muestran las consecuencias que puede traer a una mujer entrar a este estilo de vida. Por eso vale la pena ver esta serie, por más dura que sea.