El lado B de Pablo Sabbag, El ‘Jeque’ que pudo ser médico, canta y otros secretos sobre su gran momento en Alianza

ENTREVISTA: “El físico importa, pero si quieres ser arquero debes tener una fortaleza mental distinta a la de cualquier jugador”

No fue el héroe como en Sullana, pero Sabbag sigue con la mecha prendida. Volvió a marcar y, con cinco goles en lo que va del año, se pone como el máximo anotador del conjunto victoriano. Bryan Reyna -otro golazo- y Hernán Barcos sellaron la victoria del elenco dirigido por Chicho Salas que ahora se concentra pensando en el partido del jueves ante Libertad en Paraguay por la Copa Libertadores.

Así, Pablo Sabbag ha vuelvo a marcar. Es su quinto tanto en ocho partidos con la blanquiazul. Llegó este año con el peso de suplir a Barcos -el goleador de las últimas dos temporadas que lo aplaude desde el banco de suplentes- y ha pagado con creces su contratación. En La Victoria celebran y aplauden tener un ‘9′ de esas dimensiones.

Los inicios de Pablo Sabbag

Pablo David Sabbag Daccarett tiene 25 años y es hijo del médico ortopedista, Carlos David Sabbag Náder y la administradora de empresas Dinelly Daccarett Daccarett, quienes tuvieron tres hijos: Orlando, médico ortopedista quien vive y trabaja en EE.UU, Debbie y el último es Pablo Sabbag.

El delantero de Alianza Lima viene de una familia de galenos, pues en total hay 17 galenos en la familia, sin embargo, se dedicó de lleno a meter goles. Los otros que no son médicos tienen como profesión la odontología. Casi todos se dedican al rubro de la salud por el lado paterno.

Desde muy pequeño, Pablo, el menor de tres hermanos, demostró sus dotes con el fútbol. En el colegio siempre fue el mejor del equipo, ahí le decían ‘El Huracán’, puesto que era el jugador estrella, metía los goles y corría mucho. A pesar de que era muy desordenado para las clases, para el fútbol era muy aplicado. Las canchas del Country Club y el Colegio Marymount fueron testigos de los primeros goles del ‘Jeque’ en su infancia y adolescencia.

Fue justo en la adolescencia que Orlando, diez años mayor que Pablo, lo visitó y el ‘El Jeque’ le confesó a su hermano que quería ser futbolista. Pese a que era un poco tarde para tomar esa decisión, la familia lo mandó a Argentina para hacer la prueba si podía dedicarse al deporte rey. Estuvo en All Boys y River Plate de Argentina, sin embargo, la familia percibió que había unos intereses raros en el país albiceleste y decidieron que vuelva a Colombia.

Entonces, le hicieron una prueba en Deportivo Cali. El club colombiano se deslumbró por el jugador y su estado físico. Pese a su corta edad era alto, fuerte y veloz. Los directivos decidieron probar durante un mes- Si veían que funcionaba se quedaba. A las dos semanas llamaron a su padre para decirle que ‘El Jeque’ se quedaba en el club y lo ficharon.

El profesional Pablo Sabbag

A raíz de su contratación en Deportivo Cali, su vida dio un cambio. La única condición que le puso su familia para que Pablo se dedique al fútbol fue que a la par estudie una carrera universitaria. No era problema para el joven futbolista, ya que es muy disciplinado. Se matriculó en la Universidad Javeriana de Cali para estudiar Administración de Empresas, pero los horarios no lo ayudaban por lo que se cambió de centro de estudios a la Corporación Universitario de la Costa, donde se graduó el año pasado.

Pablo Sabbag trabaja al pie de la letra las indicaciones que recibe de los técnicos, y a la parte también entrena con un trainner personal, además de tener un coach para la parte emocional. Ambos profesionales son costeados por él mismo, ya que ha encaminado su carrera de la forma más profesional posible.

“Tengo un coach que me pone retos, como caminar sobre fuego, para pasar situaciones difíciles y superarlas”

Pablo Sabbag

Además, tiene una persona encargada de su alimentación para tener una dieta balanceada que le permita estar al 100% siempre. En sus días de descanso suele darse unos gustos, como cuando hace unas semanas fue a un restaurante de comida japonesa llamado Osaka.

El colombiano ha hecho de su departamento un centro de entrenamiento también. Tiene máquinas para hacer trabajos de rehabilitación y trabajos de gimnasio. Además, suele quedarse tras las prácticas a trabajar los disparos de tiros libres y penales o definición por la vía aérea.

Todos estos trabajos personalizados los trabaja Pablo con su cuerpo técnico de manera virtual. Se sabe que de Colombia llegó con una encargada de su alimentación. Su coach psicológico se llama Sergio Díaz y tiene continuas conversaciones con el atacante.

Sabbag ha llevado su carrera a lo más profesional que se pueda. Mientras su familia lo es en el aspecto médico, él lo hace desde el fútbol. No quiere dejar nada al azar por lo que busca fortalecer todo el talento que tiene.

Contrario a las historias de superación de futbolistas que vencieron a la pobreza primero para luego cumplir su sueños, Pablo es una situación distinta. Él ha puesto todos los recuerdos con los que cuenta a disposición de su carrera, para potenciar su juego. Pero también le ha tocado aprender desde la experiencia lo que pasa con la gran mayoría de futbolistas. Vivió en la casa hogar del Deportivo Cali, donde convivió con siete compañeros y no había lujos, ni agua caliente ni transporte privado.

La música en su vida

De su garganta no solo salen los gritos de gol, también ha grabado ocho canciones como parte de su repertorio musical. Vallenatos y reggaetón son parte de los estilos que se ha escuchado de Pablo. Tomó clases de canto, piano, guitarra, acordeón y también tocó la batería.

La música es algo que lo atrae, pero no ha podido dedicarse a ella del todo. Hace varios años que no graba algún clip. “La música es una pasión que tengo y para el futuro tengo como plan ser cantante”, contó en una entrevista con Al Ángulo.

Domina el inglés, portugués y ahora está en clases de francés. Así podría jugar en cualquier parte del mundo sin problemas, o componer canciones para cualquier país.

La selección de Colombia

En una entrevista de El Comercio con el presidente de La Equidad, Carlos Mario Zuluaga contó que parte del comando técnico de Néstor Lorenzo, como es el profesor Amaranto Perea, lo ha venido siguiendo para ser considerado en la selección.

“Pablo Sabbag tiene seguimiento de parte de la selección de Colombia y eso es importante para Alianza”, le dijo a El Comercio el directivo.

Ya desde 2021 se habla de que es potencial convocado, pero la jerarquía que tiene Colombia con atacantes que vienen de Europa no le han dado oportunidad de vestir la camiseta de su país. Todavía.

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