A un paso de la gloria. Rafael Nadal se situó a una sola victoria del récord masculino de 21 Grand Slams al superar este viernes a Matteo Berrettini para acceder por sexta vez a la final del Abierto de Australia. El tenista español se sobrepuso a la reacción del tenista italiano en el tercer set, al imponerse por un ajustado 6-3, 6-2, 3-6 y 6-3 en un duelo que duro 2 horas y 55 minutos.
Después de meses apartado del circuito por lesión, en los que tuvo dudas de si podría volver, Nadal puede batir el récord de Grand Slams ganados por un tenista masculino y romper el triple empate actual que comparte con el suizo Roger Federer y el serbio Novak Djokovic.
Festejó con la misma ilusión con la que celebró aquel triunfo ante Roger Federer en las semifinales de Roland Garros de 2005 con 18 años al obtener su primera clasificación para una final de ‘slam’, pero esta vez tendrá la oportunidad de consagrarse como el tenista más laureado de todos los tiempos.
Preguntado por la posible hazaña en declaraciones sobre la pista al terminar el partido, Nadal aseguró que para él lo importante es el Abierto de Australia, el único grande que ha levantado solo una vez: “Me siento muy afortunado de haberlo ganado una vez en mi carrera en 2009, pero nunca pensé que tendría otra oportunidad en 2022″.
Durante los dos primeros sets, Nadal percutió repetidamente con su izquierda el revés de Berrettini y contrarrestó con solvencia su saque y su diestra. En menos de hora y media ya se había situado con dos sets de ventaja y había roto el servicio en tres ocasiones a su desesperado rival, finalista en Melbourne el año pasado.
Pero en la tercera manga llegó la reacción del italiano, que aprovechó un momento de mayor imprecisión en el saque de Nadal para romperle el servicio y forzar un cuarto set. El español de 35 años se mostró más acertado en los puntos decisivos y aprovechó la primera bola de partido para asegurar el pase a la final.