Solo faltaban días para que saltaran a escena los artistas más esperados de los primeros meses del año. El retorno de Guns N’ Roses, el ‘show’ de Andrés Calamaro y Kiss. La resaca de los multitudinarios conciertos de Soda Stereo (en homenaje a Gustavo Cerati) a inicios de marzo, y el Alternativo Music Festival, unos días antes, nos daban señales de que este sería un buen año para los megaeventos. O eso parecía.
Las luces se apagaron para la industria el 15 de marzo, cuando se decretó la cuarentena en el país por el incesante avance del coronavirus. Y se ensombreció aún más cuando el Ejecutivo anunció que los eventos masivos quedaban suspendidos hasta fin de año. Una medida necesaria, pero también dura (para ellos). No obstante, nueve meses después, se prenderán nuevamente los reflectores: Alejandro Neyra, ministro de Cultura, anunció que conciertos de todo género se permitirán en esta fase 4, con aforos limitados y sin venta de alcohol.
“No hay ninguna restricción por ningún tipo de género musical, pero lo importante es que puedan ser realizados en un ambiente libre o no con el distanciamiento corporal. Más allá del género, se fiscalizará la cantidad de personas que puedan ingresar a un lugar”, comentó hoy el ministro a Radio Exitosa.
¿Cuál era el escenario que dejó la pandemia en las productoras de conciertos, shows paralizados, consumidores y a las más de 250 mil personas vinculadas a estos grandes eventos tras el ‘stand by’ producto de la pandemia? En esta nota, publicada en mayo, hicimos un análisis de la situación del sector.
PARA SUSCRIPTORES: Salas de cine reabren en el Perú: ¿cómo será su retorno y cuánto cambiará la cartelera?
“De marzo a junio, 50 conciertos (de todo tamaño) han sido afectados, casi todos pasaron para el primer cuatrimestre del 2021. Según los contratos firmados con los artistas, hay una cláusula de fuerza mayor que obliga a reprogramarlos, mas no a cancelarlos, porque sino se pierde el dinero pagado a los artistas”, explica Jorge Fernández, presidente del Sector de Espectáculos Artísticos, Culturales y Afines (ARENA) de la Cámara de Comercio de Lima. De todos los grandes shows (alrededor de 36), solo seis lograron ver los reflectores hasta marzo, reporta Apdayc.
Con la llegada del estado de emergencia, la venta de entradas quedó paralizada, dejando así a las productoras de conciertos con cero ingresos, proveedores por pagar y con clientes que buscaban la devolución de su dinero ante la incertidumbre.
Fernández calcula que las pérdidas por conciertos reprogramados superan los US$10 millones.
ESCENARIO PANDÉMICO
En el caso de Guns N’ Roses (24 de marzo), la productora ya estaba armando el escenario en el estadio, ya que el recinto se entrega unos 10 días antes. Este concierto, a cargo de One Entertainment, ha sido reprogramado para noviembre.
“Las bandas, como todos, afrontan el COVID-19. Pero la obligación de hacer el concierto está porque ya se pagó todo. Entonces, si no se pudiera en noviembre será en marzo del 2021, pero el ‘show’ se va a dar”, asegura Ramón Larrea, director de One Entertainment.
Para organizar un concierto, comenta Alejandro González, CEO de Kandavu, no están solo el empresario y el artista, se tiene que tener una campaña grande de publicidad, además de contactar proveedores con anticipación. Según los entrevistados para este informe, son unas 250 mil personas vinculadas a toda esta cadena, que hoy están sin trabajo. “La industria hoy está en crisis”, sentencia el ejecutivo.
¿Las productoras podrán resistir? Para Iván Cock, productor musical y director de Apromas, solo quedarán parados los grandes y los que ya afrontaron otras crisis.
Fernández, por su parte, avizora que sobrevivirán las más fuertes y las que están reprogramando, que son 15 a 20 empresas, “pero hay muchas chiquitas que van a desaparecer”. En ello coincide Larrea, quien señala que resistirán las más formales, pero quedarán muy golpeadas.
El temor de la industria está en que se tengan que dar devoluciones masivas. Ante un escenario así, González cree que todas quebrarán.
INDUSTRIA BAJO REFLECTORES
Con la llegada de Roger Waters (Pink Floyd) y Soda Stereo, el 2007, se inició el ‘boom’ de los conciertos en el Perú. Antes venían artistas del exterior pero no eran megaeventos, recuerda Cock.
“Desde ahí hubo un crecimiento que se frenó un poco, cuando se atracó la economía. El COVID-19, en cambio, nos regresa a los 70, cuando no venía nadie”, dice con pesar.
En los últimos años llegaron artistas como Katy Perry, Coldplay, Linkin Park y los mismísimos Rolling Stones. Años altos o bajos, en el cartel al menos un gran nombre sorprendía.
Los empresarios, explica Cock, no traen un artista al año, ellos hacen 5 o 6 eventos por año, de distinta magnitud, para manejar sus riesgos.
“Normalmente, cuando el negocio va bien, el empresario gana entre el 20% o 25% del ticket (lo demás va a otros pagos), pero cuando no, se pierde mucho. Todo se juega el día del show”, refiere Fernández. Si la gente no va, no hay cómo recuperar.
A nivel de costos, es difícil determinar cuánto invierten en cada espectáculo. Los conciertos grandes varían según el valor del artista y el montaje. Puede ir de US$500 mil a más. Cuando vino Paul McCartney, solo en montaje del ‘show’ (con todas sus exigencias) en el Estadio Monumental, se gastó casi US$1 millón.
Hoy, en medio de una pandemia y con pocas certezas, González (Kandavu) comenta que es necesario tener lineamientos claros. “Muchos pensamos que mientras no haya vacuna, la industria no se activará”, refiere.
Por el momento, se sabe que entretenimiento figura en la cuarta fase (a partir de agosto) del plan de reactivación económica, sujeto a revisión según se desenvuelva la pandemia, y que el Ejecutivo anunció –de manera informal, en palabras de González– que los eventos no volverían hasta fin de año.
VUELTA AL ESCENARIO
¿Qué pueden hacer las productoras y los artistas? La normalidad a la que estábamos acostumbrados tardará en llegar, de eso son conscientes. Por ello, ensayan alternativas y piensan cómo será el ansiado retorno.
Cuando se reactiven los espectáculos, se tendrá que ver cuáles son las condiciones y aforos en los que podrán realizarse, así como los espacios que lo permitirán, menciona Cock. En la Explanada del Estadio Monumental o el Estadio de Alianza Lima, piensa, se podrían manejar mejor los accesos que en otros recintos.
Por sentido común, dice Larrea de One Entertainment, es imposible pensar en un ‘show’ de 45 mil personas, sería muy costoso, por lo que cree que eventos de este alcance no serían viables por un tiempo.
En tanto eso sucede, los conciertos ‘online’ han hecho, para muchos, más llevadero el tiempo de aislamiento. Disfrutarlos desde el hogar es una experiencia nueva que genera dudas en los empresarios, quienes afirman que tiene poco futuro.
“La gente no va a pagar para ver un concierto en una pantalla, la gente quiere gritar y saludar a su artista, se trata de experiencias”, comenta Fernández.
Cock explica, además, que existen tres limitantes que no permiten que los conciertos ‘online’ funcionen en el Perú: conectividad, tecnología y experiencia.
Alejandro González, de Kandavu y Ramón Larrea, de One Entertainment, descartan esta alternativa y prefieren no dedicarle tiempo ni esfuerzo.
“Faltan años para que la cultura empiece a consumir lo digital en nuestro rubro. Sí está comenzando en otros continentes, pero hoy en el Perú no es una realidad. Tengo mis serias dudas que lo digital reemplace al show en vivo”, sostiene González.
No obstante, las disqueras sí han empezado a optar por este tipo de shows. Sony Music realizó el festival de música Made in Casa, con gran número de artistas latinos y dos peruanos (We the Lion y Ezio Oliva). Incluso en México están realizando shows en auditorios sin público y se vende una entrada, cuenta César Castro, gerente general de Sony Music Perú. “Estos festivales pueden dar una oportunidad a los artistas para obtener ingresos, con condiciones más profesionales”, explica.
Fernández, por su parte, confía que tarde o temprano la normalidad regresará. Y Cock comenta que, para más adelante, habrá opciones para reactivar la industria vinculándola -quizás- con el turismo, como ocurre en otros países.
Para la reactivación, comentan los empresarios, Reactiva Perú es una buena opción, pero esperan que haya ajustes para que sea más factible el acceso y no involucre los bienes patrimoniales. Asimismo, comentan que una ayuda importante sería revisar los impuestos, dado que –en palabras de González–, el Perú es uno de los países que más impuestos paga por ‘show’.
Si esto no se hiciera, Cock estima que, cuando el sector vuelva, los tickets subirán por las restricciones y controles que deberán incorporar en cada espectáculo.
Pero lo más importante de todo, señalan, será tener claridad de cuándo los artistas podrán volver a escena. Porque el ‘show’, como siempre, tendrá que continuar.
ENTRE NUEVAS FECHAS Y DEVOLUCIONES
Ante las complicaciones de la pandemia, las productoras han intentado reprogramar los shows. En algunos casos los artistas han aceptado mover sus fechas para fin de año, el próximo y, algunos, han cancelado sus giras por todo este año. ARENA, gremio que agrupa a las productoras, ha dicho que se devolverá el importe de las entradas para los eventos que no puedan reprogramarse y se cancelen. En cada caso, el proceso lo comunica cada promotor por redes sociales.
La postura de Kandavu va por reprogramar todas sus fechas, expresa Alejandro González, CEO de la productora a cargo del concierto de Andrés Calamaro. Lo que buscan, precisa, es una conversación con el Gobierno, primero, para hacerlo.
Larrea, director de One Entertainment, comenta que luego de coordinar con las agencias de las bandas y plantear nuevas fechas (para Kiss y Guns N’ Roses), las comunicaron en las redes sociales. “Siempre hay un grupo que se queja o pide devolución, pero hemos tratado de explicarles cuál es la situación”, cuenta.
“Tiene que haber una comunicación con el público, obviamente, pero está amarrada a lo que el Gobierno diga al empresariado. Ahora se mantiene la nebulosa”, asevera Iván Cock, productor musical y director ejecutivo de Apromas.
EN PUNTOS:
1. Festivales
En los últimos años, parte de la fórmula de las productoras han sido los festivales. De distintos géneros, con un mix de artistas locales y extranjeros. Algunos como Vivo x el Rock atraen a más de 50 mil personas.
2. Escena nacional
En el ámbito local, no hay una reprogramación, se cancelan los conciertos porque los artistas están en el país,, comenta Fernández. Para Kandavu, esta situación afectará a los artistas, que podrán subsistir según su bolsillo y creatividad.
VIDEO RECOMENDADO:
TE PUEDE INTERESAR:
- Las aerolíneas que operan en el Perú alistan su retorno, pero ¿dejarán asientos libres por fila?
- Ministra del Ambiente: “Queremos incentivar un descuento sobre los arbitrios (por segregar residuos)”
- Rolando Arellano: “Hay muchas marcas que van a desaparecer” | ENTREVISTA
- Sector inmobiliario: los retos que enfrenta una de las actividades más golpeadas por la cuarentena
- Gimnasios, entre sobrevivir a la crisis (con un protocolo en marcha) y el vuelco hacia lo digital
- Las más leídas
- 1
REVISA, DolarToday y Monitor Dólar hoy, 17 de diciembre: cotización del dólar en Venezuela
- 2
Larcomar: advierten riesgos de terraza gastronómica al borde del acantilado
- 3
Airbnb: congreso a un paso de cambiar las reglas del alquiler de inmuebles y expertos reaccionan
Contenido sugerido
Contenido GEC