Empieza el año y nos hacemos propósitos de todo tipo: hacer más ejercicio, comer mejor, pasar más tiempo con la familia, etc. Pocos hacen planes claros para desarrollar su perfil profesional y dejan su futuro profesional en manos de la suerte, del destino o, peor aún, de su jefe. ¿Cómo lo sé? Me toca apoyar a muchísimas personas cada año a continuar con éxito sus carreras luego de salir (muchas veces involuntariamente) de sus últimos trabajos. ¿Qué dice la mayoría? “Sí, sí sabía que tenía que ponerle foco a mi perfil, pero estaba con otros temas en la cabeza”, “No sabía por dónde empezar”.
¿Qué valoran quienes viven la experiencia de tener que recolocarse o empezar a emprender? La oportunidad de hacer un alto –quizá por primera vez– para reflexionar sobre su futuro profesional, extendiendo su horizonte a tres, cinco, 10 e incluso a 20 años por delante. Y así, desde una perspectiva más amplia, avanzar en la dirección correcta en el desarrollo de su perfil.
Mi propuesta hoy: no espere a estar sin trabajo –o a estar muy descontento con el que tiene– para hacer un plan claro de desarrollo profesional. Saque la cabeza del agua de la rutina que consume y agota, retome sus sueños o construya nuevos y hágalo sin demora.
Empiece por lo más importante: defina y decida qué quiere hacer y hasta dónde quiere llegar. Reescriba sus sueños a la altura del destino que quisiera alcanzar. Hágalo sin miedo, visualice que vuela alto, no deje que sus circunstancias actuales le corten las alas a sus sueños. Recuerde las ambiciones que pudo haber dejado de lado por las realidades que le tocó enfrentar.
Ahora, diseñe su plan del año, de tres, de cinco o 10 años y no se detenga, decida qué debe hacer y aprender para destacar, vencer desafíos, obtener logros y construir el éxito que ha definido como suyo. Escriba lo que debe seguir haciendo, lo que debe dejar de hacer, lo que debe empezar a hacer y lo que debe evitar.
Prepárese y empiece por investigar esos sectores o mercados donde está o donde quisiera llegar. Lea, pregunte, tome cursos, vaya a eventos o convenciones donde pueda conocer más personas que puedan iluminar su camino con ejemplo cercano, siga a los líderes. Sea un experto en aquello que le interesa llegar a ser, interactúe mucho con inteligencia artificial generativa.
Tómese la foto de hoy, haga un análisis de brechas entre dónde está hoy y dónde tiene que estar. Haga una evaluación seria de su perfil profesional y sepa si sigue vigente, relevante o no, en qué necesita cambiar o mejorar según el objetivo que se planteó. Sepa cómo se compara con los demás y actualice sus conocimientos y experiencias. Invierta en su perfil.
Revise el valor de su marca personal y traiga a valor presente su reputación extendiendo su red de confianza. Haga auditoría a sus redes y a sus valores. Actualice su currículo –le sirve para monitorear el avance su carrera y registrar sus logros y resultados– y hágalo por lo menos una vez al trimestre. Así verá si crece el valor que aporta o si se está quedando.
Sea productivo, no se descuide y ¡póngale foco a su perfil este 2025!