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Corredor Miraflores - Barranco ya funciona: de la ciclovía que no se puede usar en bicicleta hasta el cacerolazo que opacó la ceremonia
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Tres días antes de su inauguración, el corredor turístico Miraflores - Barranco fue renombrado oficialmente como el “Puente de la Paz”. Anoche, sin embargo, mientras el alcalde Carlos Canales celebraba la apertura de una de sus obras más emblemáticas, vecinos del distrito protestaban con un estruendoso cacerolazo por, precisamente, la pérdida de su tranquilidad.

De acuerdo con la Municipalidad de Miraflores, la infraestructura peatonal de 112 metros de longitud que conecta los malecones de la Reserva (Miraflores) y Paul Harris (Barranco) busca convertirse en un nuevo atractivo turístico frente al mar. El corredor turístico incluye un circuito peatonal a lo largo de la costa y ciclovías desde el parque Alfredo Salazar hasta la avenida Sáenz Peña.
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Con una inversión de 30 millones de soles financiados por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), a través de Plan Copesco, la obra se caracteriza por un color celeste que contrasta con el verde de los acantilados, los laterales con capas de vidrio transparente, una franja de vidrio en el piso que permitirá al peatón “una experiencia extrema pues tendrá la sensación de caminar casi en el aire sobre el tráfico de la bajada de Armendáriz”–en palabras de la municipalidad– y una intensa iluminación con sistemas LED.

La fuerte luz que emite el puente es uno de los principales cuestionamientos. Varios edificios de ambos distritos lucieron letreros denunciando contaminación lumínica por la obra. Además, durante toda la ceremonia de inauguración, el sonido de un fuerte cacerolazo realizado por vecinos agrupados en el malecón Paul Harris de Barranco -que incluyó pancartas contra la gestión de la alcaldesa de dicho distrito- se escuchó hasta el estrado principal ubicado en el extremo miraflorino del puente peatonal. En esta zona, la gestión de Canales cerró los accesos del malecón varias horas antes. Al área del puente solo se pudo ingresar con invitación.


“Este proyecto une dos distritos maravillosos [...] Este puente refleja los colores símbolo del distrito: el amarillo que tenemos en verano, ese sol maravilloso; el verde de nuestra Costa Verde y el celeste que representa a nuestro océano Pacífico, las nueve playas que tiene Miraflores. El color no representa a un partido político”, destacó Canales. Sobre las manifestaciones vecinales, el burgomaestre distrital añadió que “los miraflorimos somos silenciosos. Los otros utilizan cacerolas, hacen bulla”.

El alcalde de Lima Metropolitana, Rafael Lopez Aliaga, presente en la ceremonia, añadió que el nuevo puente “marca y antes y después en la historia de Miraflores y Barranco unidos en la paz y el amor”. De igual forma, la alcaldesa de Barranco, Jessica Vargas, destacó que la nueva estructura “es un ícono que permitirá a vecinos y visitantes vivir una experiencia única”.

Una ciclovía para ir a pie
Aunque el puente cuenta con una ciclovía delimitada con pintura de color rojo, el municipio informó previamente que “los ciclistas deberán bajar de su bicicleta como medida de prevención ante posibles accidentes personales debido a la velocidad que alcanzan algunos conductores”.

“Las personas que transiten en bicicleta o scooter van a tener que bajarse. Entonces, la gran interrogante es cuál es el sentido de tener una ciclovía segregada como parte del puente y mencionar que los ciclistas y deportistas iban a ahorrar tiempo si van a tener que bajar para trasladarse. Esperemos que eso en el tiempo cambie. Siempre quedará la gran pregunta de cuál era la necesidad de realizar este puente con la cantidad de luz cuando la prioridad de los vecinos es la seguridad. La semana pasada hubo un atentado y obviamente los vecinos se preocupan por qué no poner prioridad en ese tema”, dijo a El Comercio el regidor Renato Otiniano.

OBRA TRAS SUSPENSIÓN
“La obra que se pensaba que no se iba a hacer o que iba a estar paralizada por muchos años yo la hice en 100 días. Somos la única gestión municipal y del gobierno central que pudo levantar una obra que se paralizó, se suspendió, se resolvió, haciendo un inventario, saldo de obras, un concurso público y adjudicación”, dijo la noche del martes el alcalde Carlos Canales en referencia a la polémica por la intempestiva suspensión de los trabajos que mantuvieron restringida la bajada de Armendáriz por varias semanas.
Aunque la primera piedra fue colocada el 28 de noviembre del 2023 con un plazo de trabajos de nueve meses, la construcción quedó paralizada en diciembre del año pasado luego de que la Municipalidad de Miraflores resolviera el contrato Incot S.A.C. debido a incumplimientos y retrasos injustificados por parte de la empresa.


La obra fue reactivada en marzo de este año a través de la contratación directa con Consorcio Costa Verde para culminar el saldo de obra pendiente. Antes de su paralización y retiro de Incot, los trabajos estaban al 80%.
No ha sido el único cuestionamiento. Un informe emitido el 9 de julio por el Órgano de Control Institucional (OCI) de la Municipalidad de Miraflores —que forma parte del Sistema Nacional de Control, liderado por la Contraloría General de la República (CGR)— reveló problemas técnicos y administrativos en la ejecución de los trabajos del saldo de obra, incluyendo la no conformidad con las especificaciones técnicas y la posible afectación de la calidad y durabilidad de la infraestructura. Desde vidrios defectuosos hasta retrasos injustificados.

Por ejemplo, durante la visita de inspección física realizada el 25 de junio, el OCI advirtió que el canal de telecomunicaciones metálico del puente no se encontraba al mismo nivel del piso terminado de losa de concreto. Además, verificó que existían diferencias de nivel mayor a 8 cm en el lado este y 4 cm en el lado oeste. Sobre estas dudas, Canales aseguró que todas las observaciones fueron subsanadas a tiempo. Además, la prueba de carga estructural tuvo resultados satisfactorios. Se utilizó cuatro camiones, que en su totalidad pesan 60 toneladas. “Controlaría hizo observaciones que no son deficiencias y las corregimos a fines de julio. Y ya tenemos este puente maravilloso que es un ejemplo de Latinoamérica. Este es el único puente tubular peatonal ciclovía que une 112 metros cuadrados para el disfrute de las familias. Estamos dando dos vistas instangrameables maravillosas de Barranco hacia la Costa Verde”, añadió Canales.
El acto protocolar culminó con la develación de una placa recordatoria, un show de luces y fuegos artificiales, y un concierto de música con el trío de tenores Ancora en el nuevo puente. Afuera, los vecinos continuaron expresándose con cacerolas hasta el final de la ceremonia.











