
Escucha la noticia

¿Qué falta para que opere el tren Lima–Chosica? Solo construir los paraderos podría tomar casi un año, y eso es apenas el comienzo
Resumen generado por Inteligencia Artificial
Accede a esta función exclusiva
Resume las noticias y mantente informado sin interrupciones.
El primer lote de trenes que la empresa estadounidense Caltrain donó a la Municipalidad de Lima por más de 24 millones de dólares cumplió su primera semana en Lima con la promesa de la gestión de Rafael López Aliaga de llevar pasajeros hasta Chosica. El problema es que, mientras el alcalde anuncia una marcha blanca para los próximos días, el Ministro de Transportes, César Sandoval, ha sido enfático en asegurar que no existe ningún paso previo, ni en autorizaciones ni infraestructura, que permita brindar ahora mismo el tan esperado servicio público.

Ayer, la Contraloría General de la República realizó una primera visita de inspección del material rodante que fue trasladado desde el puerto del Callao hasta el centro de Lima. El vicecontralor Marco Argandoña explicó que en la estación Monserrate, administrada por el concesionario Ferrocarril Central Andino S.A. (FCCA), se encuentran 30 coches y una locomotora, mientras que los 13 coches y 10 locomotoras restantes permanecen en un almacén de Aduanas en el Callao.
Newsletter Buenos días

Carlos Salas Abusada desglosa con rigor las noticias clave del día de lunes a viernes.
Si bien el resultado de la diligencia se entregará todavía el 8 de agosto, Argadoña adelantó que detectaron inconsistencias sobre las fechas de mantenimiento. “Las placas de los coches señalan que el overhaul es de 2002; no obstante, la municipalidad nos ha dicho que es del 2020 y nos va a entregar esa información”, declaró a la prensa.

Mientras los coches y locomotora permanecen en Monserrate, la comuna metropolitana ha informado que lo primero que harán es un mantenimiento integral, que incluye limpieza profunda y la reposición de los fluidos, como aceite y petróleo, que fueron retirados antes del traslado desde Estados Unidos. Roxana Rocha, regidora de la municipalidad, añadió que luego habrá una “marcha al vacío” sin pasajeros para “ajustar el funcionamiento de las unidades sobre los rieles”.

Aquí radican las discrepancias. El MTC asegura que, salvo el almacenaje, la gestión de Lopez Aliaga no puede mover los trenes mientras no existan las condiciones técnicas mínimas y no se desarrollen obras clave como la adecuación de la vía férrea, cruces, cerramientos, señalización, pasos seguros, la construcción de paraderos y se defina el costo de la tarifa, de ser necesario, a través de un subsidio. Por ello, ha convocado a una mesa técnica para el martes 22 de julio con participación de la empresa concesionaria del Ferrocarril Central, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), la Contraloría General de la República, el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositrán) y la Municipalidad Metropolitana de Lima.
Paso a paso
Con los trenes ya en Lima y un segundo lote que llegaría en agosto, ¿qué falta? Luis Vilela, vocero de la ATU, explicó a El Comercio que el primer paso es definir el operador del servicio de transporte de pasajeros. Para ello, es necesario “tener claridad respecto al esquema de prestación del servicio y la ejecución de inversiones que tiene previsto implementar la MML”. “Sin ello, no es posible abordar un proceso de adenda, la misma que, de acuerdo al marco legal vigente, requiere la evaluación técnico económica financiera con participación del MEF, Ositrán, ATU y la Contraloría”, indicó.
A esto se suman las autorizaciones y requisitos técnicos establecidos en el Reglamento Nacional de Ferrocarriles, aprobado por el D.S. N° 032-2005-MTC, y el Reglamento Nacional del Sistema Eléctrico de Transporte Eléctrico de pasajeros en vías férreas que formen parte del Sistema Ferroviario Nacional (D.S. N° 039-2010-MTC). En ambas normas el punto de partida para solicitar el permiso de operación es el expediente técnico. De aprobarse, también se necesita una autorización para construir infraestructura ferroviaria, certificado de habilitación ferroviaria, un plan de mantenimiento aprobado, seguros vigentes y procedimientos operativos que cumplan con las disposiciones de seguridad y servicio al pasajero.

En cuanto a tiempos, el ingeniero Erich Villavicencio, docente de la Facultad de Ingeniería Civil de la UNI y experto en infraestructura ferroviaria, explica que desde la licitación hasta la aprobación de un expediente técnico puede tomar entre 8 meses y un año. “Ese es el tiempo que pide el sistema Invierte.pe. Es un tema administrativo, de gestión. Eso asegura una operación segura y responsable. Un proyecto de este tipo amerita la intervención de varios componentes, habilitación de paraderos, segregación de la vía férrea, pasos a nivel”, dijo a El Comercio.
Lo que sigue es el desarrollo de las obras. Según la proyección de la actual concesionaria -que presentó un proyecto de adenda al MTC en marzo pasado- estas tardarían casi un año. La primera etapa del tren Lima - Chosica tendría 9 paraderos, cuatro de los cuales serían terminales (Desamparados y Chosica) y dos de interconexión con el Metro de Lima (Martinete para conectar con la Línea 1 y Vitarte con la Línea 2). La construcción de dichos paraderos se estima en 302 días calendario, de acuerdo con el Plan de Negocios 2025 de la Ferrovías Central Andina (FCCA).


Para Villavicencio, aunque un proyecto de este tipo necesitaría doble vía, si la concesionaria quisiera operar con los rieles actuales, el tren de pasajeros no podría recorrer el tramo a más de 20km/h. “Actualmente, el tren de turistas a a Huancayo va a velocidades lentas, como 15 o 20 km/h. Si el tren Lima -Chosica quiere operar con los actuales rieles podría ir a esa misma velocidad, que es bastante restringida. Pero si quiere ir a una velocidad mayor, se necesitan obras que puedan segregar la vía”, añadió.

Según la regidora Rocha, la Municipalidad de Lima convocará a un concurso público, que durará un plazo aproximado de 50 días, para definir al operador del servicio de pasajeros. Este obtendrá la buena pro y el título habilitante para operar los trenes donados por la empresa Caltrain. La agencia Andina citó: “una vez elegido el operador, este deberá suscribir un contrato con la empresa Ferrovías Central Andino (FCA), actual responsable de la infraestructura ferroviaria. FCA es la encargada de instalar los servicios esenciales para el funcionamiento del tren, como las estaciones, la seguridad ferroviaria, los guardavías y la señalización en los cruces de paso. Se estima que estos servicios complementarios podrían instalarse en un plazo de tres meses”. Sin embargo, este plazo difiere de las proyecciones presentadas por la misma empresa en el Plan de Negocios 2025.
El Comercio solicitó información a la MML sobre los pasos necesarios para la futura puesta en operación del proyecto de tren, pero no respondieron hasta el cierre de esta nota.










