La mujer que fue condenada por la muerte de cuatro hombres.
La mujer que fue condenada por la muerte de cuatro hombres.
/ Facebook

Tras haberse declarado culpable de distribuir la poderosa droga fentanilo a varios hombres, en un plan para robar a clientes incapacitados, una prostituta de  fue sentenciada a 30 años de prisión. La sustancia mató a cuatro hombres, entre ellos, el jefe de cocina de Cipriani Dolci, Andrea Zamperoni.

La mujer condenada es Angelina Barini, de 43 años, quien se declaró culpable el último mes de agosto.

Mira: EE.UU. “no permitirá que Rusia intimide” a Europa con cortes de energía, dice Biden

El juez federal Brian Cogan dictó la sentencia en el tribunal federal de Brooklyn. Allí, el magistrado dijo que los impactantes crímenes de la mujer “piden un castigo” a pesar de su historia familiar problemática y su furioso hábito de consumo de drogas, que “le robaron algo de libre albedrío”, según declaraciones publicadas en New York Post.

“No hay nada que pueda mitigar lo que hiciste aquí… adicción a las drogas o no adicción a las drogas”, dijo Cogan.

Durante la sentencia, Barini -de largo cabello castaño y mechones rubios- lloró varias veces. La mujer vestía el uniforme de la prisión, un mono azul.

Una prima de una de las víctimas habló antes de la sentencia y dijo que no simpatizaba con Barini. “Entiendo que no tiene un buen historial”, dijo, y remarcó: “Pero no es excusa. Mató a cuatro personas… Se merece lo que le pasa ahora”.

Los fiscales alegaron que Barini había entregado dosis de drogas mezcladas con fentanilo a las víctimas varias veces, en el verano de 2019. El esquema de robo se volvió mortal en tres ocasiones, en julio y agosto, en Astoria, Woodside y College Point.

Además, Barini fue acusada de darle fentanilo en una cita a Zamperoni, quien murió en un motel de Elmhurst el 18 de agosto.

La trabajadora sexual había tratado de deshacerse del cuerpo envolviéndolo en sábanas manchadas de lavandina y metiéndolo en un tacho de basura, según testimonios de oficiales de la policía.

Por su parte, la hermana mayor de Barini, que se identificó como Sally, dijo que creía que la sentencia era “un poco dura” y planeaba apelar.

“Creo que lo que no se tuvo en cuenta fue que, por supuesto, lo que sucedió estuvo mal, pero las víctimas se pusieron allí”, dijo Sally. “No eran santos”, enfatizó, y siguió: “Se fueron con ella. Querían ir de fiesta y querían drogarse con ella y tener sexo. No fue como si les hubiera puesto una pistola en la cabeza y los obligara a ir con ella”.

La hermana mayor dijo que Barini es una drogadicta que se mezcló con las personas equivocadas.

Contenido sugerido

Contenido GEC