
¡Buenos días, querido lector! Espero que estés teniendo una buena jornada. Te cuento que esta semana conversé con mi mejor amiga sobre las acciones que podemos tomar para mejorar nuestros hábitos. A veces nos planteamos varios cambios pero no sabemos cómo concretarlos.
Uno de los hábitos que mi amiga quiere instaurar es despertar a las 6 am pero no lo consigue. Y rápidamente sabe por qué:

Yo llevo ya dos semanas despertando consistentemente a las 6 am y el truco que me está permitiendo lograrlo es muy sencillo, así que se lo compartí: la regla del 5-4-3-2-1, explicado por la escritora y conferencista Mel Robbins.
El concepto es sencillo: cuando sabes que debes hacer algo pero sientes que la pereza, el miedo o la duda te están frenando, en lugar de pensarlo demasiado, cuentas regresivamente de 5 a 1 y te mueves. Así de simple.
¿Por qué funciona? Porque corta el diálogo interno que nos lleva a postergar las cosas. Ese diálogo que mi amiga, por ejemplo, está viviendo. Según Robbins, si le damos a nuestro cerebro más de cinco segundos para pensarlo, empezará a buscar excusas para no actuar. La clave está en tomar acción antes de que entren en juego la duda o la procrastinación.

Y la ciencia respalda esto. Un estudio publicado en American Psychologist encontró que tomar decisiones rápidas y concretas reduce la procrastinación y mejora la capacidad de completar tareas. Además, la técnica de la cuenta regresiva activa la corteza prefrontal, la parte del cerebro encargada de la toma de decisiones y la acción.
Cómo aplicar la regla de los 5 segundos en tu día a día
✨ Cuando suene tu alarma en la mañana, cuenta 5-4-3-2-1 y levántate. Sin pensarlo demasiado, sin negociar con la almohada.
✨ Si tienes que empezar una tarea y te sientes bloqueado, cuenta 5-4-3-2-1 y haz el primer movimiento. Abre el documento, manda ese mensaje, pon un pie fuera de casa.
✨ Cuando sientas miedo de hacer algo, usa la cuenta regresiva para empujarte a actuar. Hacer una llamada difícil, hablar en público, empezar algo nuevo. A mi me gusta verlo como tirarse a la piscina.
La magia de este método es que nos saca de la mente y nos lleva a la acción. Y al final del día, lo que cambia nuestra vida no son nuestras intenciones, sino lo que realmente hacemos.
¿Te animas a probarlo? Escríbeme a samanta.alva@comercio.com.pe y dime si te funcionó. ¡Nos leemos la próxima semana!