"Wi:k": cinco razones para ver la película peruana

Tras el éxito de “Av. Larco”, el próximo estreno nacional en la cartelera es una película de mucho menos presupuesto, pero de tantas o más ganas. “Wi:k”, ópera primera de Rodrigo Moreno, se ha abierto paso con no pocas dificultades para encontrar un espacio en una cartelera copada por “Rápidos y furiosos 8”. Y es una cinta que merece atención.

Aquí algunas razones:

1. PORQUE LE DA LA VUELTA A UN ESQUEMA

“Wi:k” no es una película para nada tradicional. Se trata de una producción independiente y obviamente austera, pero que apuesta por una narrativa que pretende sacudir los convencionalismos clásicos (que no están mal, pero que la historia del cine, particularmente la de Hollywood, nos ha hecho creer que son la única fórmula). La película acierta en ese retrato de escenas mínimas, de “historia sin historia”, porque la vida es también así, una sucesión de hechos irrelevantes que, cuando uno menos imagina, nos explotan en la cara.

2. POR LA VEROSIMILITUD DE LOS PERSONAJES

Centrada básicamente en los tres amigos protagonistas (interpretados por JeanPhil Arrieta, Pedro Pablo Corpancho y Piera Del Campo), la historia discurre entre diálogos absurdos, muchas veces sin rumbo, circulares. Pero esa modorra de una juventud aburrida y desalentada es en realidad un reflejo de una generación muy actual. Aquella que se ha desprendido del discurso sociopolítico (no necesariamente por ignorancia, sino tal vez por hartazgo) y que gira en torno a la tecnología, a la interconexión virtual. Facebook, Youtube y la tiranía de las imágenes en video flotan sobre estos muchachos que parecen carecer de un futuro claro y sin embargo viven el presente con su propio ritmo e intensidad.

3. PORQUE PRESENTA UNA CIUDAD EN INCERTIDUMBRE

Entre paseos por puentes peatonales y por la playa, entre viajes en bus y taxis, entre incursiones en hostales y chifas, “Wi:k” es una interesantísima aproximación a una clase media limeña que desde hace años parece no tener forma clara. ¿Es aquella de los barrios tradicionales como Lince, Jesús María o Magdalena? ¿Es la de los vecindarios más alejados, como los de Lima Norte o Lima Este? ¿O es acaso la más moderna, que crece verticalmente ocupando departamentos cada vez más compactos? Sin subrayar ninguna de esas características claramente, Moreno del Valle dibuja una Lima borrosa y grisácea, una capital que aún está en busca de definición.

4. POR SU DIRECCIÓN CON ESTILO

El muy joven elenco de “Wi:k” está capitaneado por el también joven Rodrigo Moreno, quien deja ver un estilo bastante claro. La película posee comprensibles falencias, pero se le agradece no caer en clichés impostados, en poses o excesos poéticas. Es más bien una cinta con frescura, con sentido del humor, y con un tacto especial para acercarse a sus personajes. Moreno estará presentando esta semana en el cineclub Médium algunas de sus películas referentes (por aquí más información), con las que se entiende mejor la esencia que persigue: las películas de Jim Jarmusch, de Richard Linklater, del argentino Ezequiel Acuña son influencias que saltan a la vista.

5. POR LA BANDA SONORA

La musicalización de la película estuvo a cargo de Rafo Ráez –con cameo incluido como vendedor de discos–, quien hizo un trabajo bastante justo para otorgarle una atmósfera desencantada, pero que se va adaptando a los distintos momentos y estados emocionales durante el metraje. Por eso se nota que hay un resultado elaborado, un trabajo minucioso, más que solo una acumulación de tonadas cómodas y fácilmente reconocibles para el oído. Otro punto a favor.

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