El Gobierno de Estados Unidos solicitó al Noveno Circuito de la Corte de Apelaciones de dicho país, a cargo de la jueza Laurel Beller, que rechace el pedido del expresidente Alejandro Toledo a fin de suspender su proceso de extradición hasta que se resuelva en última instancia el hábeas corpus contra su repatriación.
En un documento de 17 páginas al que accedió El Comercio, el Gobierno recordó que dos jueces del Distrito Norte de California ya rechazaron rotundamente las impugnaciones de Toledo sobre la certificación de la extradición.
MIRA: Vizcatán del Ene: un año después, matanza en el Vraem sigue impune
“Los Estados Unidos de América, por y a través de su abogado abajo firmante, por la presente responde en oposición al recurso interpuesto por Alejandro Toledo Manrique solicitando la suspensión de su extradición a Perú en espera de su apelación de la orden de esta Corte”, señala la Fiscalía Federal.
En septiembre del 2021, el juez Thomas Hixson concluyó que el expresidente podía ser extraditado al considerar que existían pruebas suficientes para que sea juzgado por la justicia peruana.
Perú solicitó la extradición de Toledo -quien fugó a dicho país en febrero del 2017- para que sea juzgado por presunta colusión y lavado de dinero derivados de un esquema de soborno orquestado junto a la empresa Odebrecht a la que habría solicitado US$35 millones a cambio de licitarse las obras de “La Carretera Interoceánica Tramos 2 y 3″.
Toledo no ha probado que salga exitoso
La fiscalía federal de EE.UU. señala que si bien la emisión de una suspensión de extradición se encuentra sujeta a la discreción de un tribunal, la decisión “debe guiarse por principios legales sólidos”.
No obstante, indica, Toledo no ha demostrado que podría tener éxito en la apelación presentada sobre el fondo del proceso de extradición. Por el contrario, alega la fiscalía, el fugitivo presentó los mismos argumentos -cuestionando la acusación y la causa probable- que ya fueron rechazados por el Noveno Circuito de la Corte de Apelaciones de EE.UU. que ya denegó un primer hábeas corpus.
“Este Tribunal debería denegar la moción de Toledo por la razón fundamental de que no ha demostrado que es probable que obtenga una revocación de la decisión de este Tribunal en el Noveno Circuito”, enfatiza.
Toledo, agrega, no explica sus cuestionamientos a las decisiones y la acusación fiscal y tampoco fundamenta de qué manera puede sufrir un daño irreparable si es entregado a Perú.
Los representantes del Estado norteamericano señalan que, incluso, aún se encuentra pendiente la autorización del secretario de Estado Anthony Blinken, para que se pueda proceder a la extradición de Toledo. Y que, incluso, de autorizarse su repatriación, podría utilizar métodos diplomáticos para solicitar un trato justo.
Finalmente, los fiscales señalan ante la juez que, suspender la extradición de Toledo causaría un daño a los Estados Unidos pues países socios como el Perú, resolvieron sin demora diversos procesos similares.
Además, recordaron que Perú cumplió con presentar dentro del plazo su solicitud de extradición a poco más de un año de formalizar la investigación.
“Perú ha hecho todo lo que el Tratado y EE.UU. exige la ley para la certificación de Toledo como extraditable, y los intereses nacionales significativos se verán perjudicados si se le permite retrasar el proceso al presentar reclamos sin mérito”, subrayan.
Por tanto, advierten que una suspensión que provoque un retraso injustificado en el cumplimiento por parte de Estados Unidos de sus obligaciones con el Perú - cuando es poco probable que Toledo triunfe- puede dañar su credibilidad en el ámbito internacional y menoscabar su capacidad para obtener la cooperación de naciones extranjeras para llevar a los fugitivos estadounidenses ante la justicia.
LEA AQUÍ LA RESPUESTA COMPLETA DE LA FISCALÍA FEDERAL DE EE.UU.
Rechazos sucesivos
Los fiscales federales recordaron que Toledo ha tratado por diversos medios interrumpir su proceso de extradición desde que este se inició.
En primer lugar, el 10 de julio de 2020 el expresidente presentó un recurso de sobreseimiento. En ese momento argumentó que: no fue imputado por los delitos de que se solicita su extradición, como lo requiere el Tratado, y que el Perú no proporcionó una copia del documento de la acusación.
El 8 de julio de 2021, Toledo interpuso un segundo recurso de sobreseimiento presentando su alegato de que debe denegarse la extradición por falta de causa probable.
El tribunal de extradición denegó ambas mociones de Toledo en órdenes separadas emitidas el 4 de septiembre de 2020 y 28 de septiembre de 2021, respectivamente; y certificó que Toledo es extraditable al Perú por los dos cargos solicitados.
No obstante, el 28 de octubre de 2021, Toledo interpuso un recurso de hábeas corpus impugnando la certificación, que fue denegado el 22 de abril 2022. Una semana después, pidió suspender su extradición, que se encuentra pendiente de apelación.
“Por las razones expuestas, el Gobierno solicita respetuosamente que este Tribunal niegue la moción para suspender la extradición”, requirieron.
El documento lo firma la fiscal federal de EEUU para el Distrito Norte de California Stephanie M. Hinds, la fiscal federal adjunta Kyle F. Waldinger y la directora adjunta interina Oficina de Asuntos Internacionales, fiscal Rebecca A. Haciski.
LEA AQUÍ LA RESPUESTA DE ALEJANDRO TOLEDO