Miriam Schenone (flanqueada por los ministros Gustavo Caillaux y Alberto Pandolfi) fue la primera ministra de la Mujer en 1996, un año después de la visita de Fujimori a Beijing. (Foto: Archivo Histórico El Comercio)
Miriam Schenone (flanqueada por los ministros Gustavo Caillaux y Alberto Pandolfi) fue la primera ministra de la Mujer en 1996, un año después de la visita de Fujimori a Beijing. (Foto: Archivo Histórico El Comercio)
Josefina Miró Quesada

Cierto sector de la opinión pública cree que el enfoque de género en el currículo escolar lo introdujo este gobierno o que es una invención de los nuevos tiempos. Por ejemplo, Christian Rosas, vocero de -e hijo del legislador Julio Rosas-, . Sin embargo, el enfoque de género ya estaba incorporado en la legislación desde el 2015: la  lo recoge como medida para abordar la violencia contra la mujer y está incluido en la discusión política desde mucho antes.

Para sorpresa de varios, el estuvo presente como discurso y política pública desde el siglo pasado. La polémica generada por el uso de de mandiles rosa por parte de miembros del Ejército, en apoyo al programa ‘’ del Ministerio de la Mujer, ha llevado a parlamentarios fujimoristas como Héctor Becerril, Carlos Tubino, Karina Beteta, Tamar Arimbongo a rechazar el acto, atribuyéndolo, además, a una llamada ideología de género, sin saber tal vez cómo la política de género fue tratada por los orígenes de su partido.

Montenegró restó importancia a las críticas en redes sociales por el hecho de que los miembros lucieran mandiles de color rosado en el lanzamiento de la campaña (Foto: Andina)
Montenegró restó importancia a las críticas en redes sociales por el hecho de que los miembros lucieran mandiles de color rosado en el lanzamiento de la campaña (Foto: Andina)

Beijing, 1995
“El 50% de la población no debe seguir siendo excluida en el mundo”. Con esas palabras, anunciaba en Beijing la postura del gobierno en defensa de los derechos de la mujer. Era el 13 de setiembre de 1995. La noticia del único presidente hombre en asistir a la Cuarta Conferencia Mundial de la Mujer de las Naciones Unidas en China daba la vuelta al mundo. "El País" titulaba la nota: “”. Y El Comercio reseñaba que el ex presidente iba para “dar su respaldo al movimiento de mujeres que se ha generado a nivel mundial”.

Diario El comercio
Diario El comercio

Como señala la ONU mujeres, la conferencia marcó un importante punto de inflexión para la agenda mundial de igualdad de género. La , aprobada de manera unánime por 189 países, fue un programa a “favor del empoderamiento de la mujer”. La palabra 'género' aparece 191 veces en el texto de 143 páginas.

, directora de la Maestría en Estudios de Género de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), sostiene que en esta conferencia “se estableció la transversalidad de género como una estrategia y se especificó como compromiso para garantizar la igualdad de acceso y la igualdad de trato de hombres y mujeres en la educación”. La inclusión del concepto ‘género’ suscitó, sin embargo, una fuerte discusión promovida por sectores conservadores que hizo que varios países adoptaran la definición que más les conviniera. En el caso del Perú, se estableció que ‘género’ debía leerse a partir de una base heterosexual.

La visita de Fujimori a Beijing no fue casualidad. Un día antes, modificó la Ley de Política Nacional de Población que introdujo, entre otros métodos de planificación familiar, la esterilización. Esto le ocasionó una pelea con la Iglesia Católica. “El gobierno hará su propuesta, la Iglesia que haga la suya y que sean las mujeres las que decidan”, respondió. “Estoy convencido de que en América Latina y en otras partes del mundo ha llegado el momento de abandonar, de una vez por todas, los esquemas mentales anticuados que impiden el pleno desarrollo de la mujer y, por tanto, de la humanidad”, dijo en la conferencia.

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“Estoy convencido de que en América Latina y en otras partes del mundo ha llegado el momento de abandonar, de una vez por todas, los esquemas mentales anticuados que impiden el pleno desarrollo de la mujer y, por tanto, de la humanidad. Esto no significa que nuestro objetivo sea atacar a ninguna institución, sino que debe promoverse un debate de los más altos estándares éticos y humanos”, dijo Fujimori en la conferencia.

Controversia con la Iglesia Católica.
Controversia con la Iglesia Católica.

La decisión fue aplaudida en ese entonces por sectores progresistas que no imaginaban que años después esta medida derivaría en las hoy judicializadas esterilizaciones forzosas llevadas a cabo al amparo de la nueva Ley de Política Nacional de Población. El sistema de metas ahí instaurado llevó a que muchas mujeres fueran obligadas a someterse a esta intervención. En 2003, el Estado reconoció en una Solución Amistosa con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) su responsabilidad internacional por la múltiple violación de derechos que cometió contra mujeres, principalmente, campesinas.

El cardenal Vargas Alzamora fue uno de los principales críticos de la Ley de Esterilizaciones promulgada por Fujimori. Fuente: El Comercio, 1995.
El cardenal Vargas Alzamora fue uno de los principales críticos de la Ley de Esterilizaciones promulgada por Fujimori. Fuente: El Comercio, 1995.

En abril de 1998, el obispo auxiliar de Lima, Óscar Alzamora, en su calidad de Presidente de la Comisión ad hoc de la mujer de la Comisión Episcopal de Apostolado Laical, publicó un ensayo titulado “. En ese entonces, advertía que la Conferencia de la ONU -a donde había asistido el presidente Fujimori- había sido el escenario elegido “por los promotores de la nueva perspectiva [de género] para lanzar una fuerte campaña de persuasión y difusión”.

En setiembre de 1995, el ex presidente Alberto Fujimori viajó a la Cuarta Conferencia Mundial de la ONU en Beijing.
En setiembre de 1995, el ex presidente Alberto Fujimori viajó a la Cuarta Conferencia Mundial de la ONU en Beijing.

Eso no fue todo
Lo que pasó en Beijing 24 años atrás fue el punto de quiebre de una serie de iniciativas del Legislativo -de mayoría fujimorista- y el Ejecutivo en defensa de la mujer. “Fue un momento de cambio”, señala Beatriz Merino, quien viajó con la delegación oficial como parlamentaria de oposición. Con ella, viajaron las congresistas oficialistas Carmen Lozada, Martha Hildebrandt, Luz Salgado y Martha Chávez. Cuenta Diana Miloslavic, feminista representante de Flora Tristán, que mucho de estas iniciativas [que promovieron las parlamentarias fujimoristas] “venía direccionado de Fujimori, que no quería parecer un retrógrada”.

“Al volver de Beijing hubo una pasión por la agenda mujer. Éramos un grupo que nos juntábamos fuera del Congreso y conversábamos por encima de la ideología de los partidos. Cuando regresamos, todas decidimos impulsar la creación del Ministerio de la Mujer”, sostiene la ex primera ministra. Y así fue. En 1996, se creó el primer Ministerio de la Mujer (Promudeh) a cargo de Miriam Schenone y aparece, en ese momento, también la primera Comisión de la Mujer en el Congreso, presidida por Merino.

Ese año también se discutió y modificó la Ley de Violencia Doméstica de 1993 y un año después, se aprobó la Ley de Cuotas para garantizar la participación de las mujeres en las listas de candidatos en la política. En 1997, por su parte, se publicó una ley -impulsada por Merino- que eliminó una disposición del Código Penal que exoneraba al agresor acusado de violación si se casaba con la víctima y, si era una agresión colectiva, eximía a todos los denunciados si solo uno contraía matrimonio. Merino también logró que se modificara el delito de violación sexual para que dijera que el acto vulneraba la libertad sexual, y no el honor.

En el tema de las cuotas, la ex premier explica que inicialmente Martha Hildebrandt se opuso a esta medida, pero cambió de parecer tras un viaje a la India en 1997, post Beijing. “Martha Hildebrandt viajó junto con la vicepresidenta Luz Salgado y el congresista Breña a la reunión de la UIP en Nueva Delhi, India, y volvieron entusiasmados con este tema de las cuotas. Ellas le llevan la propuesta a Fujimori y él acepta y alinea a la bancada del gobierno”, cuenta Lourdes Flores, autora de uno de los primeros proyectos de la Ley de Cuotas, en una entrevista a Anel Townsend en 2006.

“Fue una sinergia bien interesante. [El fujimorismo] tenía una mayoría aplastante en el 95, estábamos tocando un tema que no era considerado popular o importante, mi ley [sobre la violación sexual] la mandaron al archivo al inicio; nosotros hicimos fuerza con la sociedad civil, con las manuelas y floras, pero fue la voluntad de mujeres fujimoristas y un Fujimori que simpatizaba con la causa y no vetaba las leyes, lo que generó una fórmula que funcionó”, cuenta Merino.

Según cuenta la abogada feminista Violeta Bermúdez, la postura de Fujimori se explica en parte por la influencia de mujeres empoderadas que le rodeaban y estaban comprometidas con los derechos de la mujer, como Beatriz Boza, o parlamentarias como Martha Hildebrandt y Luz Salgado que se compraron el pleito de emprender estas iniciativas.

Educación
En materia educativa, el enfoque de género fue incorporado en 1996 en las guías de educación sexual del Ministerio de Educación. Fuentes del Minedu afirmaron a este diario que el contenido se mantuvo a lo largo de los gobiernos. “Después de la conferencia de Beijing, el tema de la educación sexual y enfoque de género entran en la agenda educativa y nunca salió; lo continuó el gobierno de Toledo, de García, Humala y hasta la fecha”, señalaron. Esto, cuenta Jelken Boesten, profesora en King's College London en un artículo publicado , generó un fuerte enfrentamiento con la Iglesia Católica que se opuso a la difusión de este contenido, pero no impidió que el material llegara a manos de los docentes.

La guía de educación sexual trabajada por el Ministerio de Educación llegó a manos de docentes en 1996.
La guía de educación sexual trabajada por el Ministerio de Educación llegó a manos de docentes en 1996.

Si hablamos de inclusión de género en la legislación nacional, por su parte, en 1995 el gobierno ratificó uno de los principales instrumentos jurídicos internacionales de prevención y sanción de la violencia de género: la , adoptado por la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA). Este tratado -que según la Constitución de 1993 tiene rango constitucional-, establece en el artículo 8 que los Estados Parte convienen en modificar “patrones socioculturales de conducta de hombre y mujeres (…) para contrarrestar prejuicios y costumbres y todo otro tipo de prácticas que se basen en la premisa de la inferioridad o superioridad de cualquiera de los géneros”.

Desde 1996, el enfoque de género estaba incluido en el material educativo repartido por el Ministerio de Educación. Desde entonces, se hablaba de estereotipos de género.
Desde 1996, el enfoque de género estaba incluido en el material educativo repartido por el Ministerio de Educación. Desde entonces, se hablaba de estereotipos de género.

“Post Beijing, ya se empieza a introducir el enfoque de género en las políticas públicas porque se ve que el análisis de la mujer requiere una mirada relacional -con la sociedad- que no tenían las políticas ‘exclusivas para la mujer’ de ese entonces”, señala Bermúdez. Agrega que antes de este hito se usaba muy limitadamente esta terminología de género, un discurso que era propio de la cooperación internacional.

Como recoge Cecilia Blondet en su libro "”, el discurso oficial no cesaba de repetir el lema “con el presidente Fujimori las mujeres serán dueñas de su propio destino”. Parecía que, a pesar del autoritarismo imperante, las mujeres peruanas conquistaban su condición de ciudadanas del Perú. La realidad detrás de este discurso y estas políticas, sin embargo, era otra. Y la motivación también.

Motivación política
“Las mujeres fueron para Alberto Fujimori, parte de un juego de ajedrez. Bien sea como alfiles o como peones del rey”, cuenta Blondet. En ellas, señala la autora, el ex presidente vio un apetecible caudal de votos y la posibilidad de “enriquecer su reconocimiento internacional bajo las banderas del anti-machismo y la equidad”. Bermúdez coincide en que este discurso político era una manera de lavarle la cara al gobierno.

La ex parlamentaria Anel Townsend escribió en un artículo titulado “La introducción del enfoque de género en la formulación de leyes nacionales y políticas públicas en el Perú”, que “la estrategia del entonces jefe de Estado fue mejorar su imagen y captar el apoyo político de las mujeres en el Perú en una situación en la que el autoritarismo y las denuncias por corrupción y violación a los derechos humanos ya empezaban a tener eco en los foros internacionales”.

Cuenta Jelke Boesten, por su parte, que Fujimori “desplegó el discurso internacional de los derechos de la mujer e hizo un llamamiento exigiendo igualdad para justificar el programa de planificación familia -o más bien, programa de reducción de la fertilidad- dirigido a las mujeres pobres, rurales y urbano-marginales”. En 1998 empiezan a salir a la luz las denuncias contras las esterilizaciones forzadas cuyo sistema de metas estaba siendo advertido por la Iglesia Católica. Pero esto no fue lo único que confirmó el desfase del discurso político y el real compromiso de Fujimori con la igualdad de género.

Cuenta Bermúdez que también estuvieron las denuncias de violencia familiar presentadas por su ex esposa Susana Higuchi, difundidas a nivel internacional y los temas abordados por el Ministerio de la Mujer que, pese al importante impacto simbólico que tuvo, no demostró ser realmente un promotor de la igualdad de género. “Si ves la primera ley de creación era un enredo total; a este ministerio pasaron los problemas sociales e incluso, [la administración del] parque de las leyendas y las beneficencias”, señala. Algo similar pasó con la Comisión de la Mujer en el Congreso que, aunque existía, inicialmente no tenía facultades dictaminadoras (se convirtió luego en comisión ordinaria).

  • Este diario se comunicó con la ex congresista Martha Chávez, quien no quiso opinar sobre el tema, aunque sí precisó que, en 1995, no se “imaginaban el tema de género en el sentido de que puede haber 32 géneros”, porque se hablaba solo de la igualdad entre hombres y mujeres. 
  • La congresista Luz Salgado, por su parte, tampoco atendió nuestras llamadas.