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Cuesta menos de US$15.000, rinde 56 km/g en ciudad y tiene un equipamiento de un SUV más caro: manejamos el Chevrolet Groove de 1,5 litros
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El Groove se ofrece por menos de US$15.000 y es el SUV más barato de Chevrolet en el Perú; incluso su precio está por debajo de algunos competidores de marcas chinas. Este valor le permite acercarse a quienes buscan su primer SUV a un costo asequible. Para conocer mejor esta opción, en Ruedas & Tuercas lo probamos y te contamos sus detalles.
Pero, ¿cómo logra tener un precio tan competitivo considerando que se trata de una marca tradicional? La respuesta está ligada a la asociación que General Motors mantiene con SAIC Motors y Wuling, de donde nacen modelos como el Groove y la Captiva. En ese sentido, el Groove fue desarrollado bajo la plataforma del Baojun 510.
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De hecho, el Groove se produce en la planta de SAIC Motors en China, razón por la que tiene un bajo costo de producción. Como sabemos, la fabricación en ese país no solo es más barata por la mano de obra, sino también por la producción a gran escala.
El Groove no solo es el SUV más barato de la marca, sino también es el más compacto. Mide 4.220 mm de largo, 1.740 mm mm de ancho y 1.615 mm de alto y, con estas dimensiones, pertenece al segmento de los SUV sub-compactos. Compite con modelos como el Hyundai Venue, Kia Sonet, Chery Tiggo 2, Geely GX3 Pro, entre otros.

Visto desde afuera, luce como una “mini” Captiva con proporciones más reducidas. Tiene un diseño generalista, como todos los SUV de su segmento. Al no ser un vehículo desarrollado directamente por General Motors, su diseño no logra distinguirse demasiado del resto. Sin embargo, cuenta con líneas elegantes en los laterales y el capó que le aportan frescura. Tampoco se podría decir que tiene un diseño “plano”.

Entre lo más destacable están los faros principales, similares a los que equipa la nueva Captiva a gasolina. Son alargados y le dan modernidad al frontal. Los faros posteriores también tienen un diseño atractivo, aunque de líneas más universales.

Lo que sí sorprende es el equipamiento exterior. Incluye luz de posicionamiento DRL LED, faros delanteros con proyector LED, espejos laterales abatibles eléctricamente y hasta un sunroof panorámico. Nos parece positivo que estas características ya estén llegando al segmento más económico, pues usualmente se ven en modelos como el Chevrolet Tracker, Kia Seltos o Hyundai Creta. No obstante, en General Motors están disponibles desde su modelo más barato. Eso sí, conviene aclarar que estas funciones se incluyen en la versión Prime MT (full), ya que en la LTZ MT no están presentes.
En el interior, los asientos tapizados en ecocuero con ajuste eléctrico son otra sorpresa. Aunque solo el del conductor cuenta con esta función, se trata de un equipamiento impensado para este rango de precios. Este tipo de funcionalidades propias de modelos más caros es posible gracias a que se fabrica en China. Difícilmente, de haberse producido en Detroit (EE.UU.), el Groove podría mantener un costo tan bajo y con estas características.

El resto del habitáculo se alinea más con su segmento. El clúster es monocromático de 3,5″, mientras que la pantalla táctil es de 8″ con Apple CarPlay y Android Auto mediante conexión por cable. También integra botón de encendido, controles al volante, control crucero, seis parlantes y aire acondicionado con climatizador.
En cuanto a la calidad de materiales, la mayor parte del tablero y consola están recubiertos por plásticos rígidos, mientras que otras zonas incorporan superficies acolchadas y acabados elegantes como piano black. Sobre su ensamble, no detectamos ruidos ni al conducir ni al presionar piezas del interior.

A pesar de ser un SUV pequeño, el espacio interior está bien aprovechado. La posición de manejo ofrece buena visibilidad tanto al horizonte como al frente inmediato, ideal para identificar peatones, niños o animales. En cuanto al espacio para las piernas, el Groove está bien proporcionado: midiendo 1,72 m, tuvimos suficiente comodidad y personas más altas también podrían viajar sin problemas. En la segunda fila, tres pasajeros de contextura promedio pueden acomodarse, aunque si son de contextura gruesa, el espacio ya se vuelve limitado; en ese caso, un Captiva sería más adecuado.

Teniendo sus plazas traseras espaciosas, la capacidad del maletero alcanza los 320 litros. Este valor está en el promedio de sus rivales y, si bien hay algunos que tienen 350 litros, solo es una diferencia de 30 litros, equivalentes al tamaño de una mochila escolar. En otras palabras, la diferencia no es considerable en el segmento.
Respecto a la conducción, el Groove muestra un desempeño ágil en ciudad. Su motor de 1,5 litros y cuatro cilindros es aspirado y entrega 93 hp y 138 Nm. La transmisión es mecánica de seis marchas, un detalle positivo frente a competidores con solo cinco. Aunque parezca menor, tener un cambio extra permite relaciones de marcha más cortas y, por ende, menos revoluciones. Esto no solo cuida el motor, sino también el consumo.

El Groove Prime MT pesa 1.260 kg, con una relación peso-potencia de 13,5 kg/hp. No es la mejor del segmento, pero cumple con solvencia tanto en ciudad como en carretera costera. En rutas de sierra también responde, aunque es lógico que las revoluciones y el consumo aumenten.
No hay que olvidar que el Groove nació como un modelo urbano y la mayor parte del tiempo lo pasará entre semáforos. En esa línea, durante nuestra prueba de manejo, obtuvimos un consumo de 6,7 litros cada 100 km, equivalente a 56 km/galón en ciudad. En carretera alcanza los 70 km/galón, aunque existen reviews que señalan que podría llegar hasta 80 km/galón. Bajo nuestros consumos, podría alcanzar una autonomía de entre 660 y 826 km con su tanque de 45 litros.

En términos de la comodidad en su andar, utiliza una suspensión independiente McPherson en el eje delantero y una barra de torsión en el eje trasero. Al menos en el eje delantero, tiene una configuración que sobresale por su gran capacidad para absorber eficientemente las irregularidades del terreno. La barra de torsión trasera es elástica y tiene mejor durabilidad, aunque al no ser independiente ingresa de forma más irregular a las curvas rápidas. En cualquier caso, siempre es mejor ingresar a las curvas de forma cautelosa.
Por último, es una buena noticia que Chevrolet ofrezca casi las mismas características de seguridad en sus dos versiones: cuatro airbags, frenos ABS más EBD, control de estabilidad, control de tracción, cámara de retroceso, sensores de estacionamiento trasero, anclajes ISOFIX, zona de deformación programada y un asistente de arranque en pendiente para que los conductores poco experimentados no pierdan el control de la unidad.








