Como vamos a compartir algunos minutos de nuestras vidas, me gustaría contarles cómo es que el Mindfulness llegó a mi vida. Me llamo Meli y para resumirte mis primeros 28 años, fui una buena alumna en el cole y decidí estudiar Ingeniería Industrial, especializándome luego en finanzas corporativas. Empecé a trabajar desde el séptimo ciclo de la Universidad hasta hace 2 años, tengo 30 ahora. Durante todo este tiempo siento que estaba sumergida en la inconsciencia, hacía las cosas porque era lo que “tocaba”. Mi mente me decía que lo siguiente en la lista sería lo que me haría feliz, buscando afuera lo que, ahora sé, está dentro de mí. Silencié mi intuición muchos años, trabajé en grandes empresas trasnacionales, ocupando cargos de confianza. He experimentado en carne propia el mundo corporativo, ¡te entiendo compañer@! A veces es genial, aprendes mucho y haces amigos, pero otras veces puede ser bastante exigente, competitivo y un gran generador de emociones difíciles. Es así como tuve mi primera crisis de estrés, el sentimiento de que esta no era la forma en la que quería vivir mi vida me atropelló. Fue una etapa dura, pero gracias a ello, ahora sé que los momentos difíciles vienen con grandes aprendizajes.
¿Y qué pasó? me anoté en un curso de Mindfulness sin saber qué era (me gusta pensar que Mindfulness me encontró a mí). Recuerdo un momento en la primera clase, en el que vi mis manos en uno de los ejercicios y me dije a mí misma ¡wow, tengo manos! jaja sí, da risa, pero así de fuerte fue para mí, así de sumergida estaba en el piloto automático. A partir de ese momento he vivido una transformación de dos años, en la que decidí renunciar a lo conocido e ir a Europa a aprender con los mejores en el tema. Mindfulness me hizo tanto sentido que dejé, poco a poco, el miedo que me representaba dejar de trabajar y recibir un sueldo fijo, dejar atrás lo que había logrado y el qué dirá la gente, para acercarme a lo que me llena el corazón.
Y con esto no quiero decir que trabajar con un horario fijo esté mal, conozco muchas personas que son felices en lo que hacen. Simplemente quiero decirte que eres libre para elegir lo que te haga a ti feliz, para que no malgastes tu vida haciendo lo que se “supone” tienes que hacer ¿Te has puesto a pensar en esto? Quizás sí, pero tu mente tiene mucho ruido mental y el miedo te paraliza. Y justamente esto fue lo que me enganchó al Mindfulness, observar mis pensamientos y comprender que son solo pensamientos y no la realidad, entender que el miedo es mi amigo y él no determina qué es lo que quiero lograr y sobre todo, disfrutar de la vida, aceptando las cosas tal cual son.
No pretendo que conozcas Mindfulness y obtengas todas las respuestas a tus interrogantes existenciales, pero es un buen primer paso para comprender que mientras respiras tienes opciones para elegir lo que te hace sentir más alineado con quien realmente eres, soltando el control que te hace sufrir, dejando atrás condicionamientos, automatismos y pensamientos inútiles. La vida no te va a esperar. Mi deseo más profundo es que no te la pierdas y que cuando comprendas esto, entiendas que tu realidad depende solamente de ti.
Melissa Hilbck es Experta en Mindfulness por la Universidad Complutense de Madrid en convenio con el Nirakara Institute. Licenciada en Ingenieria Indistrial, especializada en Finanzas, con experiencia de 9 años en el sector corporativo. Emprendedora de Bienestar y Salud Emocional.