¡El 2023 llegó! Para muchas personas, este es un momento de cambios y nuevos inicios, por lo que se plantean metas para los siguientes 12 meses. La psicóloga Antonella Galli, de la Clínica Ricardo Palma, explica que trazarse propósitos realistas para el año venidero es una costumbre muy positiva, ya que es una motivación para hacer algo importante por uno mismo y darnos la oportunidad de estar mejor.
Sin embargo, trazarse propósitos para un nuevo año no es algo sencillo. No basta con tener buenas intenciones, pues también se debe trabajar duro. “Se necesita constancia y compromiso para hacer cambios positivos en la vida”, refiere la especialista tras indicar que tampoco debemos desanimarnos si las cosas no salen como lo planeamos o no se alcanzan todas las metas trazadas.
“En la vida vamos afrontando obstáculos y a veces es necesario detenerse para luego retomar aquellos propósitos que nos hemos planteado. Si no lo conseguimos, es totalmente válido ponerse nuevas metas, redefinir estrategias y volver a empezar. Hay que ser persistentes”, señala.
Antes de trazarse objetivos es fundamental tomar en cuenta todos los aspectos relevantes de la vida. De esta manera, tus propósitos tendrán como objetivo mejorar su salud física, mental y emocional. Estos pasos te ayudarán a plantearlos:
- Familia. Piensa en lo que te gustaría mejorar, por ejemplo: la comunicación, incrementar el tiempo que pasan juntos, superar algunas limitaciones, fortalecer la relación con la familia política, etc.
- Trabajo. Analiza lo que puedes hacer o tal vez lo que necesitas para mejorar en el aspecto profesional: ser más organizado, identificar fortalezas, superar limitaciones, definir hasta dónde quiere llegar en su empleo, quiere ascender y asumir más responsabilidades o desea cambiar de rubro, etc.
- Plano personal. Replantea tu desarrollo personal: analiza el estado de tu salud mental, de la forma en la que te relacionas con los demás y con la vida, e identifica qué aspectos necesitas mejorar y modificar. Busca fortalecer tu espiritualidad, autoestima, practicar técnicas de meditación y/o relajación. El desarrollo personal también tiene que ver con el cuidado de la salud, alimentación sana, visitar al psicólogo si lo necesitas, mejorar el aspecto físico, etc.
- Desarrollo de vínculos. Reflexiona sobre la relación con tu pareja, identifica los aspectos que te gustaría que mejoren, tal vez la comunicación, los detalles o más tiempo juntos. Si estás soltera o soltero, puedes replantear los vínculos con tus amistades, optar por tener una mascota o algún otro tipo de compañía.
- Desarrollo de talentos individuales. Piensa en lo que eres buena o bueno, qué habilidades tienes y te apasionan, por ejemplo: escribir, pintar, cantar, bailar, hacer manualidad, entre otros. Retoma esos talentos que has dejado de lado o realiza nuevas actividades que te permitan descubrir nuevas aptitudes. De esta forma, conocerás a personas vinculadas a estos talentos.