Bruno Ortiz Bisso

“Los humanos tenemos un 7% de éxito en embarazos naturales”. Así de categórico es el doctor Marcelo Velit, ginecólogo especialista en fertilidad de la clínica Inmater, para explica lo complicado que es concebir. Explica que, por otro lado, la inseminación intrauterina tiene una tasa de éxito del 15% y la fecundación in vitro el 35%. Aunque recalca que, por ello, estas técnicas de son importantes “no hay garantía de embarazo”.

El especialista deja en claro la importancia que ha tenido el desarrollo de la tecnología para la aparición de más y diversas técnicas, y para mejorar sus resultados. Es por ello que repasamos en tres pasos cuáles son los cambios más importantes que se han dado en este campo.

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1. Hay un cambio de percepción a lo largo del tiempo.

“Antes se creía que la de una mujer disminuía drásticamente después de los 35 años, y que las mujeres tenían un período reproductivo limitado. Ahora, gracias a los avances en la medicina y la tecnología, las mujeres tienen más opciones para controlar su fertilidad y pueden elegir cuándo y cómo quieren ser madres”, explica el doctor Marcelo Velit.

2. Existen más opciones para los que buscan postergar maternidad

Aunque la maternidad postergada no está libre de riesgos, el doctor Velit recalca que existen muchas más opciones para lograr ese objetivo: criopreservación (congelamiento) de óvulos y de embriones; fecundación in vitro (FIV); donación de óvulos; optar por un banco de semen; adopción de embriones (congelados y donados por otras parejas). Hay que recordar que la calidad de los óvulos disminuye con la edad.

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3. El desarrollo de la tecnología ha revolucionado todo

“Las mujeres ya no se sienten presionadas a ser madres a una edad temprana. La tecnología ha contribuido a este cambio al ofrecer opciones para preservar la fertilidad y posponer la maternidad. La maternidad independiente se ha vuelto más accesible. La tecnología ha proporcionado a las mujeres las herramientas para tomar decisiones informadas sobre su y planificación familiar”, recalca el doctor Velit.