A lo largo del 2023, el equipo de la campaña “Pasa en la Calle” de El Comercio abordó diversas denuncias en las que ciberdelincuentes utilizaron modalidades sofisticadas y llamativas para estafar a sus víctimas. Ante esta situación, el coronel PNP José Cruz, jefe de la División de Estafas, informó a este diario que se han registrado 1.487 denuncias de estafas digitales desde enero hasta la fecha, con pérdidas que ascienden a 53 millones 89 mil 692 soles y 26 millones 977 mil 635 dólares.
De acuerdo con el coronel, el segundo delito más común en el país es el de estafas, siendo el primero el de robo de celulares. Destacó que la modalidad líder consiste en enviar mensajes a las víctimas ofreciendo ingresos a cambio de realizar tareas, pero todo resulta ser un engaño destinado a invertir dinero, incluso en falsas criptomonedas. Esta técnica ha generado 506 casos, con pérdidas que alcanzan los 28 millones 870 mil 71 soles y 21 millones 381 mil 740 dólares.
“Es crucial que la ciudadanía evite acceder a enlaces sospechosos que prometen dinero. Siempre hay que dudar y consultar a través de los órganos reguladores si una empresa tiene autorización. Además, se aconseja cambiar la clave de la tarjeta SIM para prevenir posibles estafas en caso del robo del celular”, recomendó.
El coronel Cruz añadió que la información proporcionada se limita exclusivamente a la perteneciente en la División de Estafas. Por ende, estos datos podrían quintuplicarse para abarcar los casos de las comisarías y de los departamentos de investigación criminal de Lima Metropolitana y todo el territorio peruano. “De esta manera, a nivel nacional, se estima que podría haber alrededor de 6.000 casos”, puntualizó. Además, existen otros tipos de estafas que no son electrónicas y se denuncian en comisarías y fiscalías comunes. Las modalidades que cubrió El Comercio a lo largo de este año fueron las siguientes.
Clonación de voces con Inteligencia Artificial (IA)
La estafa sigue un patrón en el cual un delincuente llama a una persona, simula haber secuestrado a un ser querido y utiliza voces clonadas con IA para extorsionar. El Comercio recogió 55 casos donde las víctimas escucharon voces idénticas a las de familiares solicitando dinero por alguna “urgencia” o amenaza.
Erick Iriarte, abogado especializado en derecho digital y nuevas tecnologías, explicó a este diario que la técnica empleada se conoce como “deepfake”. Se trata de un método utilizado en programas que permiten escribir un texto para convertirlo de forma casi inmediata en la misma voz de la víctima. Esto es posible al obtener previamente audios de sus redes sociales, facilitando que el programa imite de manera convincente su voz.
Además, Iriarte advirtió sobre la importancia de tener precaución al recibir llamadas en las que nadie responde. “Los estafadores aprovechan ese momento cuando dices ‘¿aló?’ para grabar tu voz, clonarla y luego utilizarla en llamadas posteriores para llevar a cabo la estafa”, dijo.
Clonación de rostros para publicidad engañosa
Conductoras de televisión han denunciado la manipulación de sus rostros y voces para promocionar productos sin su consentimiento, mediante el uso de la IA. María de Jesús González, conductora de TVPerú, compartió a El Comercio su experiencia como víctima de esta modalidad. “Está circulando en redes sociales un video falso donde presuntamente yo estoy animando a la gente a que haga inversiones por medio de una plataforma”, dijo.
Rodrigo Ochoa, líder de automatización e inteligencia artificial en Moventi, explicó que en estas situaciones también se recurre al “deepfake”, ya que es efectivo para manipular audio y video. Se emplean algoritmos que, con la ayuda de una base audiovisual, son entrenados para almacenar y generar contenido.
“Se usan de dos a tres videos para que la IA sea capaz de gesticular e imitar la voz de las personas, también es un programa capaz de sincronizar los labios con las palabras que ‘se están diciendo’. Siempre tiene que haber una base de datos, donde se obtiene la información, sea una persona mediática (por medio de su trabajo) o alguien común y corriente (por medio de sus redes sociales)”, dijo.
La estafa de las criptomonedas
Una supuesta red ofrece por medio de WhatsApp la oportunidad de obtener importantes ingresos si los usuarios cumplen una serie de tareas. Su modus operandi es una forma paulatina de buscar generar confianza durante las primeras semanas.
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Primero, el ciudadano recibe un mensaje donde le proponen realizar pequeñas “misiones” a cambio de dinero, por ejemplo, suscribirse a canales de YouTube. Es así que las víctimas comienzan a recibir sus primeras bonificaciones. Las próximas tareas consisten en depositar un monto en una plataforma de criptomonedas (activos digitales que algunas personas usan como activos financieros convencionales). No obstante, la cantidad que se debe abonar para seguir en el negocio crece constantemente y llega un punto en el que las personas ya no pueden pagar. Por ello, no recuperan jamás la supuesta inversión que depositaron.
En este sistema de estafa, cuando una persona recibe recompensas monetarias, en realidad está ganando el dinero de alguien que también cayó en esta modalidad y depositó. Es decir, esta mafia ruletea con el dinero de unos para depositarle a otros y hacerles creer que sí hay rentabilidad. De ese modo, todo parece legítimo.
Las falsas entradas
Karol Janeth Arce Morales, la cabecilla de la estafa de entradas para el partido Perú-Argentina, está prófuga de la justicia. La Dirincri logró capturar a su equipo de revendedores, incluida su hija, Jailín Acuña Arce, de 18 años, apodada “daughter yankee”, responsable de diseñar entradas falsificadas y gestionar publicaciones en redes sociales. La operación de la banda consistía en enviar entradas nominadas falsas a las víctimas, pactar reuniones presenciales para entregar los boletos y enviar audios de WhatsApp para ganar confianza.
La policía desmanteló la red y descubrió la identidad de la llamada “mommy yankee” y su hija. La estafa afectó a cientos de fanáticos que pagaron hasta tres veces el valor oficial de una entrada para el partido, rompiendo sus expectativas de ver a Lionel Messi. La investigación continúa para dar con el paradero de Karol Morales.
Suplantación de identidad para engañar a clientes
Nilton Macetas de Junín fue víctima de una estafa al intentar comprar una moto de ‘Somos Moto’. Engañado por una red de estafadores, realizó dos depósitos creyendo que era la verdadera empresa, pero luego descubrió que todo era una farsa. El modus operandi de los estafadores involucraba atraer a compradores con precios tentadores, utilizando una página de Facebook y un número de WhatsApp falsos.
Los delincuentes, haciéndose pasar por ‘Somos Moto’, pedían pagos adicionales bajo diversos pretextos después del primer depósito. Nilton, quien pagó 3.500 soles en total, se percató de la estafa cuando dejaron de responderle. Tras contactar a la verdadera compañía, descubrió que los estafadores copiaban la información y el logo de ‘Somos Moto’. Tatiana Guichard, gerenta de la compañía, recomendó verificar siempre el RUC y el nombre comercial de una marca en la página de la Sunat antes de realizar cualquier pago.
Andrés Mendoza, integrante del área de marketing de ‘Somos Moto’, explicó que los estafadores copian incluso el saludo automático virtual de la marca y mandan a las víctimas al sitio web oficial para elegir un modelo. Los depósitos, sin embargo, se realizan en cuentas no asociadas a la empresa.
El menú estafador
Un grupo de más de 20 personas se contactó con este diario para denunciar que cayeron en una estafa por parte de ‘Mi menú como en casa’, una empresa que ofrecía packs de menús a través de redes sociales. Entre los afectados se encuentra Ana Paula Castañeda, quien empezó a utilizar el servicio en mayo del 2022 y pagó 440 soles por 40 menús. Sin embargo, la empresa dejó de operar y eliminó sus redes sociales, dejándola con una deuda de 154 soles por 14 menús no consumidos.
Milagros Pariona y Edgar García también resultaron estafados. Milagros pagó 250 soles en noviembre del 2022 por 20 menús y se quedó con una deuda de 100 soles por 8 menús no consumidos. Edgar, quien utilizó el servicio desde agosto del 2022, pagó 400 soles por 40 menús y actualmente le deben 180 soles por 18 menús. El presunto estafador recibía depósitos en una cuenta a nombre de Wilde Rodríguez Espinosa, quien era el dueño de la empresa, pero dejó de responder después de alegar problemas internos.
Los afectados, tras descubrir el fraude, formaron un grupo de WhatsApp para rastrear al responsable. Exigen que Rodríguez devuelva el dinero por los menús no consumidos.
El falso Plin
Sharon Domínguez, encargada de la óptica de sus padres en Jesús María, sufrió una estafa cuando dos personas compraron cuatro lentes de sol por Plin. Los clientes solicitaron un descuento, distrayendo a los vendedores mientras escaneaban el QR de la cuenta Plin en la pared de la óptica. Luego, manipularon su celular y presentaron un pantallazo que aparentaba un pago exitoso. Después de unos minutos, Sharon descubrió que no había recibido el dinero, perdiendo 190 soles.
La ciudadana hizo una denuncia pública y logró identificar a uno de los estafadores, Alejandra Barrera Castillo, gracias a las cámaras de seguridad. Los comerciantes señalan que los responsables usaron una aplicación que genera pantallazos falsos para simular un pago con Plin. Sharon y sus padres piden que los ladrones asuman las consecuencias.
Los falsos limones
Cuando el precio del limón en Perú aumentó debido a las fuertes lluvias relacionadas con el fenómeno El Niño Costero, estafadores se aprovecharon de esta situación para engañar a ciudadanos que buscaban precios más accesibles.
El 31 de agosto, María, a quien llamaremos así pues prefirió mantenerse anónima, decidió comprar limones a un supuesto proveedor independiente por medio de Facebook, quien le ofreció 100 sacos de limones a 6 soles el kilo. Después de realizar un primer pago de 200 soles, esperó más de una semana sin recibir los productos. Al intentar comunicarse con el proveedor, se percató de que había sido bloqueada.
Otras formas de estafa relacionadas con limones han surgido en redes sociales. El ciudadano Manuel Romero denunció que compró limones falsos hechos de tecnopor, mientras que el dueño de la cevichería Los Manglares de San Martín de Porres descubrió que el costal de limones que adquirió también incluía manzanas verdes.
La estafa de las agencias de viajes
Una organización criminal llevó a cabo estafas utilizando el juego del ‘raspa y gana’, aprovechándose de la ilusión de sus víctimas por viajar por el mundo. La modalidad se basa en ofrecer falsos premios a los consumidores, pero estos luego deben realizar acciones y pagos no acordados para supuestamente obtenerlos.
Ricardo Falconí, subgerente de seguridad de la Municipalidad de Miraflores, describió el modus operandi, que implica atraer a ciudadanos en la vía pública, animarlos a participar y ofrecerles premios ficticios, como viajes nacionales o internacionales. Una de las víctimas denunció a los estafadores ante la policía, logrando la captura de los sujetos en el cruce de la Av. Arequipa y la Av. José Pardo. La organización dirigía a sus víctimas a la oficina 1201 del edificio empresarial José Pardo, donde terminaban comprando supuestas membresías por alrededor de 1.400 dólares.
El personal policial y municipal incautó una gran cantidad de tickets de ‘raspa y gana’ de la empresa llamada Espace Trip Grupo Travel, logrando la detención de once integrantes de la red criminal.
Mecanismos de atención
Respecto a estafas digitales, Erick Iriarte exhortó a la población a acudir a la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (Divindat) y la Fiscalía de Ciberdelincuencia. Mientras que, en otros casos, se encuentran los canales del Indecopi, como el portal web, las líneas telefónicas 224 7777 (Lima) y 0 800 4 4040 (regiones), el correo electrónico sacreclamo@indecopi.gob.pe, y el WhatsApp 985 197 624.
Por otra parte, Juan Humberto Flores, Fiscal Superior y Coordinador Nacional de Ciberdelincuencia, indicó a El Comercio que se puede solicitar ayuda a la Fiscalía Corporativa Especializada en Ciberdelincuencia de Lima Centro, la Fiscalía Provincial Transitoria Especializada en Delitos de Ciberdelincuencia de La Libertad y la Fiscalía Provincial Transitoria Especializada en Delitos de Ciberdelincuencia de Arequipa. Mientras que, si ocurrió en otro departamento, se debe ir a la fiscalía penal correspondiente.
“Para evitar ser estafado, se debe identificar al proveedor y sus datos de contacto para saber a dónde acudir en caso exista un incumplimiento. Además, hay que revisar los comentarios de las redes sociales de la empresa con la cual se va a contratar un servicio, ya que, si tiene bajas calificaciones o no tiene habilitada la función de colocar comentarios, es sospechoso (...). Se tiene que exigir una boleta u otro documento que permita sustentar el consumo, servirá de respaldo en caso se requiera presentar una denuncia”, enfatizó Juan Ñahue, abogado experto en protección al consumidor.