Hernán Medrano Marin

Vehículos atrapados en el tráfico, ruido estridente de las bocinas e impaciencia de los conductores. Este fue el panorama que reinó ayer, concurridas tan solo unas horas del inicio del cierre de la Vía Expresa Luis Bedoya Reyes, más conocida como Paseo de la República, en el tramo comprendido entre las avenidas República de Panamá, en Barranco, y 28 de Julio, en Miraflores. Esta medida obedece a la remodelación completa de la vía en sus 9,6 km de extensión.