Alfredo Jiménez Pimentel es publicista, tiene 40 años y desde los 14 años es fan de “Torbellino”. En 2021, en plena pandemia, inició este proyecto al que califica como una “locura de amor”. Consiguió reunir a los protagonistas del fenómeno musical de los años 90 para dar vida al revelador documental “Pasión & Fuego” .
“Yo soy el productor ejecutivo, no tengo socios. Vendí un pequeño terreno, herencia de mi madre, para costear los permisos, licencias, honorarios y estudios de grabación. Utilizamos los estudios de Garrido Lecca, de Juan Carlos Fernández y La Guarida Records. Fue un gasto tremendo, pero no me arrepiento de nada. Estoy demasiado feliz con el resultado”, asegura.
“La idea era hacer algo que no se había hecho antes, algo novedoso. Y como ya había una telenovela, un disco, una gira exitosa, y una serie (2018), aposté por un documental contado por sus protagonistas y dirigido por Álvaro Luque y Oswaldo Villavicencio”, destaca.
“Pasión & Fuego” narra la creación, preparación, éxito y disolución de uno de los grupos musicales más populares de la historia de la música peruana integrado en su primera etapa por Bárbara y Fiorella Cayo, Érika Villalobos, Daniela Sarfati, Marco Zunino, Gabriel Calvo y Pablo Saldarriaga. El documental tiene actualmente en YouTube más de 17 mil vistas.
─Jamás se habían vuelto a reunir los 7 integrantes originales. ¿Cómo lo lograste?
Fue complicado convencer a Érika porque es de las personas que cierran etapas y no las vuelven a abrir. No quería un reencuentro, pero cuando le expliqué que mi proyecto era un documental, me dijo que cuente con ella. Los demás estaban animados, sobre todo las hermanas Cayo.
─¿Cuál fue el reto más grande que enfrentaste?
Ganarme la confianza de cada uno de ellos. No soy conocido y tengo muy poca experiencia en el tema de la publicidad. Apenas llevo tres años. Bárbara fue la primera a quien acudí. Luego ella me contactó con su hermana y con Gabo. Recuerdo que me preguntaban a qué me dedicaba y qué había hecho anteriormente. En algún momento dudé de que podía funcionar, pero al ser un proyecto hecho de un fan para los fans, tenía ganado gran parte del éxito.
─¿Cómo recibió tu familia esta iniciativa?
Al principio me persuadieron a desistir, pero como en el fondo sabía que iba a funcionar, que era un buen proyecto, seguí adelante. Ahora que está terminado, me han felicitado por el buen trabajo.
─Nunca se habló de la salida de Marco del grupo. ¿Qué pasó realmente?
Marco tenía un contrato de exclusividad con la novela, pero no con el grupo. Todos tenían un contrato, menos él. Por eso, cuando recibe la propuesta para actuar en la telenovela “Leonela”, de América TV, se va. Marco no fue el malo de la película, como en algún momento se creyó.
─¿Es verdad que Torbellino usaba playback en sus presentaciones?
Justamente por esos rumores es que empezamos el documental con Érika y Fiorella cantando a capella. El grupo cantaba en vivo con el acompañamiento de pistas. Al principio, los acompañaba una banda.
─¿Ibas a todos los conciertos?
Como parte del club de fans fui a la mayoría de sus presentaciones y siempre trataba de estar adelante. Fui al Jardín de la Cerveza en Arequipa. Aquella vez me metí debajo de las piernas de la gente para avanzar hasta la primera fila (ríe).
─¿Algún integrante era tu favorito?
Me gustaba Fiorella por su energía y coquetería.
─¿Hubo romances en el grupo?
La convivencia hace inevitable que eso pase. Laszlo Kovacs estuvo con Fiorella y Pablo con Claudia Bérninzon. También tuvieron una relación Daniela y Santiago Maguill, quien interpretó al profesor en la telenovela. Cuando Daniela se quiso ir de la agrupación, puso como condición, para quedarse, que Santiago vaya a todas las giras con ellos. Por eso Santiago siempre aparecía en el escenario.
─¿Por qué la producción se negó a grabar la canción que Pedro Suárez Vértiz compuso para Érika?
Porque Pedro pidió mucho dinero por “Lobos de la noche”. Era una canción cara para la época y Torbellino no tenía gran presupuesto para canciones. Lucho no aceptó. Por eso se utilizó la canción que Gustavo Araníbar compuso: “Noche azul”. Y fue un golazo.
─Algún anécdota que recuerdes del grupo.
Lucho contó que cuando el grupo estaba ensayando en el colegio Roosevelt (1997) y dijo que funcionaría, Christian Meier y Manuel Garrido Lecca, quienes estaban presentes, soltaron unas risitas medias burlonas. Pero el tiempo le dio la razón a Lucho. El grupo fue un rotundo éxito.
─¿Es verdad que se viene un concierto de reencuentro?
Ese tema no está confirmado, pero como hemos hechos una buena relación y ellos confían mucho en mi trabajo, veremos qué pasa. Estamos muy emocionados. Se vienen cosas muy bonitas.
El documental puede ser visto de manera gratuita en YouTube.