Brad Spafford, un hombre de Virginia, tenía en su casa lo que es considerado como uno de los mayores arsenales de explosivos caseros que se haya incautado en Estados Unidos. Sobre el sujeto pesaba una orden de arresto por un cargo relacionado con las armas de fuego, por lo que el 17 de diciembre la policía fue a buscarlo. No era un desconocido para la justicia y los investigadores, pues en el pasado fue señalado de haber usado una foto del presidente Joe Biden para practicar tiro.
De acuerdo con ABC News, cuando los agentes del FBI entraron a la casa de Spafford, encontraron 150 artefactos explosivos improvisados. Tras la incautación, las autoridades denominaron el material como bombas de tubo, y algunas fueron marcadas como “letales”.
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La mayor parte de las bombas estaba en un garaje separado de la casa ubicada en el condado de Isle of Wight, junto con herramientas y materiales para fabricar bombas, incluidas mechas y trozos de tubos de plástico, según documentos judiciales hechos públicos el martes y citados por la agencia AP.
“Se encontraron varias bombas de tubo adicionales en una mochila en el dormitorio de la casa, completamente sin seguridad”, escribieron los fiscales en un acta.
En el domicilio donde se hallaron las bombas Spafford vive con su esposa y dos niños pequeños.
Los agentes también hallaron un frasco con material potencialmente explosivo que estaba guardado en el refrigerador con una etiqueta que decía “no tocar”, según los documentos judiciales citados por ABC News.
Spafford, de 36 años, estaba acusado de posesión de un arma de fuego en violación de la Ley Nacional de Armas de Fuego. De acuerdo con la policía, poseía un rifle de cañón corto no registrado.
Pero tras su detención, los fiscales dijeron que ahora enfrenta “numerosos cargos potenciales adicionales” relacionados con las bombas, indicó AP.
Un amigo lo delató
Spafford llamó la atención de las autoridades por primera vez en el 2023, cuando una fuente confidencial, que resultó ser un amigo suyo, dijo a los investigadores que en el 2021 se había volado partes de la mano mientras supuestamente fabricaba un artefacto explosivo, según ABC News.
Los fiscales dijeron que solo tiene dos dedos en la mano derecha.
El informante también contó a las autoridades que Spafford estaba usando fotos del presidente, una aparente referencia a Joe Biden, para practicar tiro al blanco, y que su amigo “creía que los asesinatos políticos deberían volver a practicarse”.
“El acusado ha utilizado fotografías del presidente para practicar tiro al blanco, ha expresado su apoyo a los asesinatos políticos, y recientemente ha solicitado la obtención de una habilitación para disparar con rifles de francotirador en un campo de tiro local”, escribieron los fiscales en documentos judiciales.
En el allanamiento de la casa de Spafford los agentes también encontraron el rifle de cañón corto.
La mayor parte de las bombas fueron detonadas en la casa de Spafford porque se consideró que no era seguro transportarlas.
Lo que dice su defensa
Los abogados de Spafford dijeron que las autoridades no han presentado pruebas para demostrar que su defendido estaba planeando actos violentos. También señalaron que no tiene antecedentes penales y cuestionaron si los dispositivos explosivos eran utilizables porque “técnicos en explosivos con formación profesional tuvieron que manipularlos para que explotaran”.
“No hay ni una sola prueba en el expediente que diga que el señor Spafford haya amenazado alguna vez a alguien, y la afirmación de que alguien podría estar en peligro debido a sus opiniones y comentarios políticos es absurda”, manifestaron los abogados defensores, indicó AP.
En una audiencia realizada el martes, el magistrado federal Lawrence Leonard determinó que Spafford podría ser puesto en libertad bajo arresto domiciliario en la casa de su madre.
Los fiscales reiteraron que es un hombre peligroso. “Si bien no se sabe que haya participado en ningún tipo de violencia aparente, ciertamente ha expresado interés en ello, a través de la fabricación de bombas de tubo marcadas como ‘letales’, su posesión de equipo antidisturbios y un chaleco cargado con bombas de tubo, su apoyo a asesinatos políticos y el uso de las imágenes del presidente para prácticas de tiro”, anotaron.
“Su liberación supone un peligro extremo para quienes viven con él, para la comunidad en general, y también para los agentes de la prisión preventiva que tendrán la tarea de inspeccionar periódicamente su residencia en busca de armas de fuego, incluidos explosivos peligrosos e inestables”, agregaron.
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