Este 6 de agosto, nuestra región de Junín se viste de gala para conmemorar el bicentenario de la histórica Batalla de Junín, un episodio trascendental en la lucha por la independencia del Perú y de América Latina. Este día no solo nos invita a recordar con gratitud y admiración a los valientes que ofrendaron sus vidas por la libertad, sino también a reflexionar sobre nuestro presente y futuro como región.
Desde mi gestión, hemos decidido que la celebración de este acontecimiento debe ir más allá de los actos protocolares y las conmemoraciones. Estamos comprometidos con la idea de que honrar verdaderamente el legado de nuestros héroes implica trabajar incansablemente por el desarrollo de Junín.
En el ámbito educativo, estamos impulsando programas que buscan reducir la brecha educativa y garantizar que nuestros niños y jóvenes tengan acceso a una educación de calidad. Sabemos que la educación es la base del desarrollo, por lo que tenemos planificado un Colegio de Alto Rendimiento y otros colegios emblemáticos.
En cuanto a la salud, hemos redoblado esfuerzos para garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a atención de calidad, por lo que tenemos en cartera un hospital de alta complejidad en el Mantaro, el hospital de la provincia de Junín, el hospital de Jauja y el hospital de Concepción. La infraestructura es otro pilar fundamental de nuestra gestión, y estamos invirtiendo en la modernización de nuestras vías de comunicación para facilitar el transporte y el comercio.
Por último, estamos fomentando el desarrollo económico a través de políticas que apoyan a nuestros agricultores. Creemos firmemente que una economía sólida y diversificada es la clave para un progreso sostenible y estamos dedicados a crear un entorno que favorezca la innovación.
En este bicentenario de la Batalla de Junín, invito a todos los ciudadanos a unirse a nosotros en este esfuerzo por construir una región más fuerte y próspera. Recordemos con orgullo nuestro pasado, pero también miremos hacia adelante con determinación y esperanza.