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El conflicto entre poderes del Estado ha mostrado un importante escalamiento en los últimos 5 años, llegando a activar mecanismos como la vacancia presidencial o la disolución del Congreso. En apenas seis meses de gestión, este Parlamento ya aprobó cuatro normas que regulan la balanza de poder frente al Ejecutivo y se tiene en camino al pleno una cuarta norma que busca eliminar el voto de confianza.
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Los intentos reformistas no son recientes. Este Diario identificó que, en los últimos 20 años, se presentaron al menos 80 iniciativas, con un mayor énfasis en regular la vacancia presidencial y la bicameralidad. No obstante, las reformas aprobadas han sido pocas, y su debate se intensificó a partir de la crisis del 2016. Uno de los intentos, en el 2018, modificó el reglamento del Congreso para limitar el uso de la cuestión de confianza, y fue declarada inconstitucional por el Tribunal Constitucional.
Ahora, en apenas seis mese de gestión, este Congreso reguló la capacidad del Ejecutivo para plantear cuestiones de confianza, estableció que la convocatoria a referéndum requiera el visto bueno legislativo, y estipuló requisitos para nombrar a ministros.
| Los cambios impulsados por el Congreso | Situación de la norma |
|---|---|
| Para convocar a un referéndum, este debe ser aprobado por el Congreso | Aprobada y el Ejecutivo ha anunciado su intención de enviarla al TC |
| La cuestión de confianza facultativa solo puede ser utilizada para temas referidos exclusivamente al Ejecutivo | Aprobada y ratificada por el TC |
| Establecer requisitos para ser ministro, viceministro y otros altos funcionarios | Aprobada |
| Eliminar el voto de confianza obligatorio ante cada nuevo gabinete | Dictamen aprobado en comisión de Constitución y Reglamento |
Un atajo
“El Congreso no alcanza a obtener los 87 votos que se requieren para una reforma constitucional, pero está optando por un atajo: las leyes interpretativas. Podría ser el caso que estemos ante reformas constitucionales encubiertas”, advierte Heber Joel Campos, profesor de la PUCP.
La Comisión de Constitución acabar de aprobar un dictamen que elimina la necesidad de realizar un voto de confianza para cada nuevo gabinete de ministros, en línea de lo propuesto por la Comisión de Reforma Política en el 2019. Al tratarse de una reforma constitucional se requieren 87 votos.
Según Milagros Campos, quien formó parte de dicha comisión, es una reforma positiva cuya necesidad se conoce desde al menos el 2002.
“[El voto de confianza al gabinete] no ha significado ninguna señal importante de cara a coaliciones de gobierno o un voto que suponga una agenda legislativa o presupuestal”, asevera.
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Intervención del TC ante otras modificaciones
| Año | Sentencia | Cambios |
|---|---|---|
| 2003 | Tribunal Constitucional argumentó que no era razonable que la vacancia presidencial pueda ser aprobada con mayoría simple. | Se exhortó al Congreso a aumentar los votos necesarios a 2/3 del número legal de congresistas, y se reglamentó en el mismo año. |
| 2018 | El Congreso aprobó límites a la cuestión de confianza modificando su propio reglamento. | El TC declaró el cambio inconstitucional por unanimidad de los magistrados. |
Efectos no deseados
Según Heber Joel Campos, este tipo de cambios necesitan un mayor espacio de deliberación y una reforma integral, pensando más allá de la tensión política coyuntural.
“Se podría decir que es una forma de cuidarse de un Ejecutivo que no es muy leal de la democracia, pero habría que pensar en un escenario opuesto: una mayoría parlamentaria que tiene la capacidad de obstruir el funcionamiento del gobierno, y un Ejecutivo que no tiene manera de contrapesar ese poder”, comenta el especialista.
Por su parte, Milagros Campos explica cómo identificar reformas pensadas más allá de la coyuntura.
“Para toda reforma, la pauta general, es que tiene que partir de un diagnóstico. Ese diagnóstico no debería ser coyuntural. Partir con la propuesta, saber cuáles son los efectos, tener una mirada comparada para presentarse como una alternativa que escape a un arreglo coyuntural”, sostiene.
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