Alejandro Sánchez Sánchez, prófugo dueño de la casa de Sarratea, amigo del expresidente Pedro Castillo e investigado por el caso Gabinete en la sombra, fue detenido este viernes en la frontera de México y Estados Unidos (EE.UU.), confirmaron fuentes de El Comercio.
Según conoció este Diario, fue detenido por la Policía migratoria de EE.UU. cuando entraba ingresar a dicho país por la frontera con México.
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Fuentes de El Comercio remarcaron que si bien no había una orden de captura internacional, se espera su expulsión de EE.UU. y su entrega a las autoridades peruanas para que pueda cumplir la orden de 30 meses de prisión preventiva que pesa en su contra.
En un comunicado, la Cancillería precisó que el Consulado General del Perú en Houston fue informado de la detención Sánchez por parte de la Patrulla Fronteriza en Texas luego de intentar cruzar irregularmente la frontera sur con México, en la localidad de Eagle Pass.
Detalló que el investigado empresario se encuentra actualmente en el “Centro de Detención Del Rio” en Texas.
“El Ministerio de Relaciones Exteriores viene realizando gestiones con las autoridades norteamericanas pertinentes a fin de poder lograr su pronta expulsión a nuestro país, para afrontar a la justicia peruana”, añadió.
En marzo pasado, el Poder Judicial había confirmado la medida de prisión preventiva contra el amigo del expresidente Pedro Castillo, quien viene siendo investigado por el delito de tráfico de influencias y otros, en agravio del Estado.
En noviembre del 2022, Sánchez Sánchez había sido incluido en la lista de los más buscados del Perú y se ofrecía S/30 mil por cualquier información de su paradero.
En julio, Sánchez Sánchez había descartado entregarse a la justicia porque consideraba “arbitraria” la prisión preventiva que se dictó en su contra por el presunto delito de tráfico de influencias.
Las fases de operación de la red
1. Financiamiento de la campaña electoral (A partir 11/04/2021)
De acuerdo al colaborador eficaz N°03-2022, entre los empresarios Alejandro Sánchez (S/500 mil) y Abel Cabrera (S/500 mil) y el alcalde de Anguia, Nenil Medina Guerrero (S/1 millón) aportaron, al menos, S/2 millones a la campaña de segunda vuelta de Pedro Castillo.