Unidad de Investigación
El ex prefecto regional de Puno Gilmer Sardón Litardo señaló que un allegado de Nicanor Boluarte y funcionarios del gobierno de Dina Boluarte utilizaban a las autoridades de su región para los planes proselitistas del hermano de la presidenta de la República. Sostuvo que no denunció este hecho antes por temor a represalias.
En junio pasado, Sardón aceptó ser el representante del Ejecutivo en Puno, cuando en la región seguía la convulsión social por la muerte de 18 personas por las protestas de enero. Sardón fue designado prefecto por la Dirección General de Gobierno Interior (DGIN) del Ministerio del Interior, cargo que ocupó hasta el 5 de octubre.
Según Sardón, renunció, entre otras razones, porque lo conminaron a llenar fichas de afiliación del movimiento político Ciudadanos por el Perú (CPP), necesarias para inscribirlo como partido ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). “Querían que los que teníamos un cargo [prefectos y subprefectos] firmáramos [fichas], con lo cual no estuve de acuerdo”.
En su denuncia, Sardón se refiere principalmente a Martín Carbajal Zegarra, amigo de Dina y Nicanor Boluarte y exfuncionario del gobierno; y a Jorge Luis Ortiz Marreros, director general de Gobierno Interior.Para él, se buscaba que las autoridades de las localidades puneñas apoyaran el movimiento político que impulsaba el hermano de la mandataria. “Me entregaron un bloque [de fichas]. [...] Incluso querían que [prefectos y subprefectos] seamos los coordinadores provinciales para así fortalecer al partido, a lo cual me negué”.
“[Por] la coyuntura [que había], con la convulsión social, no se podía trabajar, y eso [el proselitismo] era incendiar más la pradera”, dijo.
De acuerdo con Sardón, creían que podían usarlos como enlaces con los pobladores para obtener la cantidad de afiliados que CPP requiere para inscribirse como partido. “Pensaron que todo estaba color de rosa, lo cual no era así [...]. No se podía hacer cumplir el capricho del señor Boluarte por muy hermano que era de la presidenta”.
—El “coordinador”—
Sardón señaló que Martín Carbajal coordinaba en Puno la entrega de fichas de afiliación. “Era el coordinador regional de Puno, [de] la zona sur. Con ese cargo me lo presentaron, tuve dos o tres entrevistas donde estoy […]. Él se presentaba como coordinador del partido y como asesor presidencial”.
En este gobierno, Carbajal ha sido consultor del Fondo de Apoyo Gerencial de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).
Algunas reuniones con autoridades, indicó Sardón, se dieron en la vivienda de Carbajal. “No participé en las reuniones virtuales, pero sí en las presenciales que se dieron en su casa [...]. Desde enero ya tenían reuniones con él; ya estaban poniendo subprefectos a nombre del partido [...]. Invitaban a convocar a la gente, con lo cual nunca estuve de acuerdo”.
Precisó que en sus visitas a Puno lo acompañaba un funcionario del Mininter y Modesto Vilca, alguien sin cargo en el gobierno. “Esas personas eran con las que se articulaba y coordinaba con la gente de Puno”.
—El “plan Puno”—
En paralelo a las actividades proselitistas de CPP, Carbajal ofreció a las autoridades políticas obras de infraestructura y medidas sociales, las que denominó “plan Puno”, que fue presentado a los ministerios como una solución.
Sardón recuerda que Carbajal afirmó que este plan sería anunciado por la presidenta en el mensaje a la nación del 28 de julio pasado. “Era todo un proyecto, desarrollo minero, educativo, el cual era un montón de dinero. [La mandataria] no lo anunció y nunca se dio [...], decían una cosa y hacían otra. Eran cosas alcanzables, pero no se concretaron”.
Refiere que algunos subprefectos se dieron cuenta de las “maniobras políticas” y que en una visita de Carbajal a Puno estuvieron a punto de irse a las manos.
“Era puro discurso. Con ese trabajo querían llegar y hacer lo otro, lo político [...]. La idea de Carbajal era copar la región Puno y tener el partido registrado tal como la ley lo pide [ante el JNE]”.
El Comercio buscó comunicarse con Nicanor Boluarte Zegarra y Martín Carbajal, pero no respondieron las llamadas.
—El “topo del partido”—
La designación de personas vinculadas a Ciudadanos por el Perú como prefectos y subprefectos, algo que este Diario reveló en junio pasado, también se habría dado en Puno, según Sardón.
Sostuvo que el director de Gobierno Interior del Mininter, Jorge Luis Ortiz, habría sido parte de una campaña de afiliación encubierta. Acotó que Ortiz era quien trasladaba las instrucciones de Lima cuando lograba que ciertas personas aceptaran jurar en otro cargo que depende de la DGIN: los tenientes gobernadores. “Logramos que aceptaran ser tenientes gobernadores a pesar de estar en contra de la presidenta [Boluarte], [...] [Ortiz] aprovechaba esos viajes para traer las instrucciones para hacer el trabajo político [...]. Yo diría que era como el topo del partido”.
Este Diario se comunicó con Ortiz, pero no quiso declarar porque, sostuvo, no tenía autorización.
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