Cristina Torres Rodríguez

Hace cuatro años, en el corazón de Barranco, nació La Chingana, una taberna marina con una esencia que combina historia, tradición y el espíritu emprendedor de su dueña y fundadora, Erika Morote. Inspirada en las antiguas chinganas de antaño, espacios ocultos donde los hombres se reunían para beber y compartir, esta propuesta gastronómica busca revivir la esencia de aquellos huariques con un enfoque renovado e inclusivo.