Ahora sí estamos a puertas de las fiestas de fin de año: se vienen Navidad y Año Nuevo y con eso días cargados de eventos (trabajo, amigos y familia). Es un tiempo en el que todo se acelera, tenemos distintas actividades y responsabilidades: algunas de estas son reales y otras son impuestas por nosotros mismos.
A muchos esta época les es muy agradable y el hecho de que la rutina cambie completamente les cae bien. Hay gente que disfruta de tener muchos eventos, de comprar y empaquetar regalos, hacer actividades de voluntariado y de pasar tiempo con familia y amigos a los que no siempre ven. Sin embargo, hay personas a quienes la responsabilidad añadida, el calendario sobrecargado y el gasto extra les produce mucho estrés y/o ansiedad. Incluso si somos de los que disfrutan de esta época, podemos sentirnos abrumados en más de una oportunidad. Por eso, me parece importante compartir algunas estrategias que pueden ayudar a llevar esta temporada de una forma más tranquila.
- Aprende a reconocer con quiénes disfrutas pasar tiempo y qué actividades son las que te producen más bienestar. Intenta aprovecharlas al máximo y a verle el lado positivo a pasar tiempo con familia y amigos que en otros momentos no ves.
- No te fuerces a hacer cosas que no quieres. Es común que nos sintamos obligados a asistir a eventos, especialmente los familiares. Sin embargo, si sientes que te hace sentir mal o que te produce alguna sensación negativa, no pasa nada si es que no asistes. Aprende a cuidar de ti, pregúntate cosas como “¿voy a sacar algo positivo de ir a esta reunión?”, “¿me voy a sentir más cargado después?”. Aprende a decir que no y a saber que hacerlo no te hace una mala persona, solo significa que te estás cuidando.
- Tómate un tiempo para disfrutar algo de esta época. Es fácil dejarnos cargar por el ajetreo de las fiestas, pero date un rato para encontrarle algo positivo a la temporada: disfruta de un poco de panetón, escucha música navideña, o decora algo que te haga sentir bien.
- No te fuerces a la hora de comprar regalos. A veces sentimos que ‘tenemos’ que gastar mucho dinero en comprar “los mejores regalos”; sin embargo, el estrés que esto puede producir es muy alto. Ten en cuenta que la intención es lo importante, hacer saber al otro que pensaste en el o ella es suficiente.
- Cuídate e intenta mantener tu rutina lo más estable que sea posible: descansa, come sano – sin dejar de disfrutar todo lo típico de esta época – y haz actividad física. Mantener una rutina estable nos ayuda a tener una sensación de control sobre lo que sucede a nuestro alrededor que nos ayuda a disminuir los niveles de ansiedad y a mantener la tranquilidad que tanto buscamos.
- Busca ayuda si la necesitas. Si te sientes solo durante esta época, busca a alguien que te pueda entender y acompañar; puede ser un amigo o familiar en quien confíes. Buscar ayuda es una buena forma de levantar los ánimos y de no sentirse solo.
Las fiestas de fin de año pueden ser una época muy ocupada y acelerada, que puede producir sensaciones que no nos hacen sentir bien. Es importante reconocer que esto puede pasar y tener en cuenta que es una temporada pasajera y que hay cosas que podemos hacer para sentirnos mejor.
Muchos disfrutamos de esta época y de ver a los amigos y familia, pero tener en cuenta que no es así para todos así que estemos alerta de lo que pasa a nuestro alrededor con las personas que queremos. Seamos considerados con cómo se sienten los demás y con cómo nos sentimos nosotros mismos; aprendamos a cuidarnos y a las personas a las que queremos también.