Dicen que no hay mejor forma de conocer una ciudad que recorriéndola a pie. Montevideo, con su Ciudad Vieja pequeña y amigable para los peatones, invita a explorarla de esta manera. Este casco antiguo alguna vez estuvo rodeado de murallas para prevenir saqueos piratas. Hoy, de esas murallas solo queda un vestigio: la Puerta de la Ciudadela, ubicada en la turística Plaza Independencia. Esta imponente puerta, sin muros a los lados, parece un arco bajo el cual los turistas suelen detenerse para tomar fotografías.
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En la Plaza Independencia se encuentra la sede del Poder Ejecutivo, así como el Teatro Solís, inaugurado en 1856 y que sigue siendo uno de los mejores del continente. Al otro lado de la plaza, se levanta el Palacio Salvo, que alguna vez fue el edificio más alto del país. Esta torre de arquitectura impresionante combina trazos renacentistas y góticos, obra del arquitecto italiano Mario Palanti, quien también erigió en Buenos Aires su edificio gemelo, el Palacio Barolo.
La rambla de la ciudad de Montevideo
Caminar por la Ciudad Vieja es encontrarse con curiosidades como el Museo Andes 1972, dedicado a la tragedia aérea del equipo de rugby uruguayo, donde se exhiben objetos que pertenecieron a los sobrevivientes. A cuatro cuadras de allí se encuentra el Río de la Plata, tan caudaloso que no se puede ver la otra orilla. A lo largo de la amplia costa, conocida como rambla, los uruguayos suelen pasear con un termo bajo el brazo y su infaltable mate.
Siguiendo el aroma del asado, se puede llegar al Mercado del Puerto, fundado en 1865. Desde hace varios años, se ha vuelto muy atractivo para los turistas por la cantidad de establecimientos que ofrecen la mejor carne uruguaya. Aunque el lugar puede ser un poco caro para el bolsillo promedio, la calidad espectacular de la entraña fina, el vacío, los bifes y las achuras hacen que valga la pena la inversión. También se puede optar por el “chivito”, el plato clásico de la cocina local.
Mercado del Puerto, Montevideo. Foto: Shutterstock
Más allá de la Ciudad Vieja, para coronar un día de largos paseos, hay atractivos accesibles mediante la eficiente red de buses de la ciudad. El mirador municipal ofrece una vista privilegiada de la capital uruguaya, y el Estadio Centenario cuenta las historias del primer Mundial de Fútbol, celebrado en este país en 1930. Este recinto histórico es un símbolo del amor uruguayo por el deporte rey y una visita obligada para cualquier aficionado. Será la cereza del pastel de un viaje inolvidable.
Ahora, con la incorporación de tecnología "de primer mundo" se espera que aumente aún más el caudal de visitantes a esta área ubicada debajo de una de añs tribunas del estadio Centenario de Montevideo. (Foto: El País de Uruguay)
Cómo Llegar
Varias aerolíneas ofrecen vuelos directos desde Lima a Montevideo, con una duración aproximada de 5 horas. También puedes optar por vuelos con escala, generalmente en Buenos Aires o Santiago de Chile, que resultan más económicos.
Alojamiento
Montevideo ofrece una amplia gama de hoteles, desde lujosos hasta económicos, especialmente en zonas como Pocitos y el Centro. Para opciones asequibles y una experiencia más local, los hostales y ‘bed and breakfast’ son ideales.
Tipo de Cambio
La moneda oficial es el peso uruguayo. Un sol peruano equivale a poco más de diez pesos uruguayos. Comparada con nuestro país, Montevideo es una ciudad cara.
