Medicamentos baratos, accesibles y de calidad
Sin duda, un problema universal de los sistemas de salud, es la accesibilidad del público a los medicamentos. Como cualquier producto sujeto a los vaivenes del mercado, la facilidad con que se consiguen los medicamentos depende de su precio y disponibilidad.
El tema de los altos precios, origina ardientes debates y políticas correctivas en muchos países, entre ellos Estados Unidos, país que -por su profunda filosofía de libre mercado- tiene probablemente los medicamentos más caros del mundo. Por otro lado, la disponibilidad del medicamento, depende -en general- de factores geográficos y de su fabricación y distribución.
El gran problema del alto precio de los medicamentos, es que causa el llamado gasto de bolsillo, el cual se define por el pago total (personas sin cobertura de salud) o pago parcial (personas con cobertura) que debe hacer el consumidor si quiere acceder al medicamento. En el Perú por ejemplo, se calcula que 43 a 47% del gasto de bolsillo en el cuidado de la salud, esta destinado a la compra de medicamentos.
Por otro lado, el problema de disponibilidad se manifiesta cuando un medicamento no esta presente en el lugar que se necesita. En el Perú, de cada diez personas que reciben una receta médica en un centro de salud u hospital del estado, solo seis obtienen los medicamentos recetados en la farmacia del local. De las otras cuatro, tres obtienen algunos medicamentos y una, ninguno. Ese 40% de frustrados pacientes debe comprar apresuradamente su medicina en farmacias privadas, estratégicamente ubicadas en los alrededores del centro de salud, farmacias que solo en el 64% de los casos ofrece un medicamento genérico barato, vendiendo mas bien caros medicamentos de marca, que el desesperado paciente, en su necesidad, debe comprar.
Medicamentos genéricos
El descubrimiento de una medicina sigue un proceso muy largo y tedioso. Miles de sustancias son probadas y experimentadas, buscando la que pueda tener el mayor beneficio con los menores riesgos posibles. Para compensar esos gastos -llamados de investigación y desarrollo- las empresas farmacéuticas gozan de la llamada protección de la patente, mediante la cual, solo ellos pueden comercializar el medicamento por un tiempo determinado (alrededor de 15 años).
Una vez cumplido ese plazo, el medicamento puede ser fabricado por cualquier compañía farmacéutica y el medicamento se convierte en un medicamento genérico, el cual cuesta significativamente menos que el medicamento original.
En el Perú por ejemplo, los medicamentos de marca son, en promedio, 5.6 veces mas caros que los genéricos. Esta variabilidad va desde 0.6 veces para el anestésico local lidocaína, hasta 37 veces más para ansiolítico alprazolam. En el caso de los antihipertensivos la diferencia es de 8.8 veces mayor y 4.6 veces mayor en los antidiabéticos, y en los antibióticos de 5.3. Los medicamentos de marca que se usan en salud mental son 11 veces mas caros que los genéricos.
Ciertos países han logrado disminuir el costo de las medicinas apelando al uso masivo de los medicamentos genéricos. En Estados Unidos por ejemplo, el 90% de los medicamentos que se recetan son genéricos.
Decreto de urgencia
Ante los graves problemas que tiene la población -especialmente la de menos recursos- la semana pasada, el gobierno peruano anunció el Decreto de Urgencia N° 007-2019, que declara a los medicamentos, productos biológicos y dispositivos médicos, como parte esencial del derecho a la salud y dispone medidas para garantizar su disponibilidad.
En esencia, el DU desea corregir dos cosas: el enorme gasto de bolsillo que representa la compra de medicamentos y la poca disponibilidad de medicamentos genéricos en las farmacias del sector público y privado.
Para eso, elaborará una lista de 40 medicamentos esenciales (todos los cuales están ya incluidos en el Petitorio Nacional Único de Medicamentos Esenciales (PUNME), los cuales deberán estar obligatoriamente disponibles en las farmacias públicas y privadas de todo el Perú. Esa lista incluye analgésicos, antibióticos, antihipertensivos, antidiabéticos, y otros. Un punto muy importante es que el Minsa se asegure de que esos medicamentos sean tan efectivos como los de marca (bioequivalencia).
Por otro lado -y esta es una idea muy interesante- el Minsa comercializará directamente al público los 40 productos de la lista de medicamentos esenciales. Para eso, ampliará el número de farmacias propias (en la actualidad tiene solo tres) y abrirá una farmacia propia en cada uno de los establecimientos públicos de salud. En una reciente entrevista radial, el Vice Ministro de Salud Pública nos decía que -en la actualidad- 30 tabletas del antidiabético metformina cuestan S/ 50 soles si es de marca, S/ 10 soles si es genérico y S/ 4.50 en sus tres farmacias. De abrirse esos cientos de farmacias, no hay duda de que -a esos precios- el público preferirá comprar esos 40 medicamentos esenciales en las boticas del Minsa.
El DU autoriza también de que el Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (CENARES) sea la única entidad que haga la compra de todas las medicinas que se necesitarán.
El DU incluye también a los medicamentos biosimilares, versiones genéricas y mas baratas de los extraordinariamente caros medicamentos biológicos, muy usados en cáncer y otras enfermedades autoinmunes.
Corolario
El ejecutivo se ha trazado un plan con tiempos muy estrechos. Por ejemplo, el reglamento del DU (con todos los detalles del como se implementará la ley) deberá estar listo el 30 de noviembre. Del mismo modo, la implementación de la ley deberá ser completada en marzo del próximo año. Sin un congreso que enlentezca el proceso, el ejecutivo se ha puesto la soga al cuello. O cumple, y demuestra que puede hacer las cosas, o buscará excusas para explicar su ineficiencia.