Lauren Hemming-Torres sufría de epilepsia, pero recuperó el control de su vida gracias al fisicoculturismo. (Foto: Facebook)
Lauren Hemming-Torres sufría de epilepsia, pero recuperó el control de su vida gracias al fisicoculturismo. (Foto: Facebook)
Redacción EC

Una madre que ha sufrido de ataques epilépticos desde que era una adolescente ha desarrollado una nueva pasión por el , un deporte que no solo la hizo recuperar su confianza en sí misma, sino también la ha ayudado a encontrar la libertad, el amor y una carrera nueva.

Lauren Hemming-Torres, de 32 años, no solo es madre de dos pequeños, sino que también lleva toda su vida teniendo que enfrentar un diagnóstico de epilepsia. Este inició cuando ella tenía 14 años, momento en que los cambios hormonales propios de la adolescencia le jugaron una mala pasada.

MIRA: Naiomi Glasses, la joven indígena que practica al skate sobre las piedras de la Nación Navajo

Desde aquel momento, Lauren ha tenido que hacerle frente a los constante ataques epilépticos, que siempre han interrumpido intempestivamente su rutina. Fue a través de las invitaciones de su pareja, que Lauren llegó a una actividad física que le ha dado un nuevo balance a su vida: el fisicoculturismo.

Lauren Hemming-Torres es mamá de dos pequeños y gracias al fisicoculturismo ha recuperado la confianza en sí misma. (Foto: Facebook)
Lauren Hemming-Torres es mamá de dos pequeños y gracias al fisicoculturismo ha recuperado la confianza en sí misma. (Foto: Facebook)

“La gente no tiende a ver o entender que la epilepsia es un problema importante. Me sentí atrapada por mi diagnóstico, especialmente cuando las convulsiones ocurren con tanta frecuencia. Es por eso que quiero difundir más información al respecto. Sólo cuando empecé a practicar el fisicoculturismo empecé a sentirme de nuevo yo mismo”, contó Lauren Hemming-Torres a .

MIRA: Desde hoteles hasta implantes capilares: las inversiones de los deportistas mejor pagados como Cristiano Ronaldo y LeBron James

La sensación de verse atrapada por su diagnóstico le atemorizaba, creía que nunca podría tener una vida normal. Peor aun, luego de tener a sus dos hijos, Lauren temió que pudiera perderse momentos importantes de su vida, o peor aun, tener un ataque en un momento en que ellos la necesitaran.

Gracias al fisicoculturismo, Lauren no solo ha disminuido la cantidad de ataques que tiene, sino que también ha conseguido manejar mejor los que le dan. Asimismo, ha empezado a participar en competencias. Esto le ha devuelto la confianza en sí misma y también le ha ayudado con su diagnóstico.

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC