Un día como hoy en 1953 la selección peruana debió ganar su segunda Copa América ¿Por qué no sucedió?

PARA SUSCRIPTORES: Cuando Perú ganó en mesa por primera vez. La historia de un convulsionado partido de Copa América que duró dos días

Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú y Ecuador dijeron presente en la Copa América de 1953, con el formato de todos contra todos. La sede original era Paraguay, pero debido a su precaria infraestructura, nuestro país, en pleno gobierno de Manuel Odría, decidió tomar su lugar. ¿El gran motivo? Meses antes se había inaugurado el nuevo Estadio Nacional de Lima, que dejaba sus tribunas de madera por una moderna infraestructura de cemento. Era una de las grandes construcciones del ‘Ochenio’.

LA CAMPAÑA

Perú jugó su primer partido en la historia en el remodelado Estadio Nacional ante Bolivia. Aún con el eterno misterio si fue anotación de Víctor Agustín Ugarte o autogol de ‘Joe’ Calderón, la ‘Verde’ arruinó el estreno con una victoria por 1-0, el 22 de febrero de 1953. Seis días después, superó por 1-0 a Ecuador, resultado tan ajustado que puso contra las cuerdas el trabajo del entrenador norirlandés William Cook.

El 4 de marzo, Chile por primera vez no perdió de visitante ante Perú, y empató 0-0. Cuatro días más tarde, la bicolor ganó su primer partido en mesa. Había igualado a dos goles ante Paraguay, pero los ‘guaraníes’ habían hecho cuatro cambios. Los dos puntos (desde 1994 se suman tres por triunfo) fueron propiedad de nuestro seleccionado. Las diferencias con Cook ya eran evidentes y dejó, de la noche a a mañana, el cargo, quedando el argentino Ángel Fernández.

Bajo su mando, Perú derrotó por primera vez a Brasil con un golazo de Luis Navarrete, el 19 de marzo. Tras una serie de contratiempos por un repentino regreso de Cook, Fernández se quedó con el cargo para el partido de la última fecha. La bicolor, con siete puntos, era segundo en la tabla, con una unidad menos que Brasil. Su rival era Uruguay, sin opción al título. Además, Paraguay (tercero con 6 puntos) se vería la cara con la Verdeamarelha.

El partido entre paraguayos y brasileños se programó para el 27 de marzo, 24 hora antes del choque de la selección peruana ante Uruguay. Un triunfo de los futuros pentacampeones del mundo los dejaba con el campeonato. En caso de que al albirroja gane, le daba la primera opción a Perú para ser campeón de la Copa América de superar a los orientales.

LO INCREÍBLE

La primera sorpresa fue posible. Paraguay vencía 2-1 a Brasil, con gol de Pablo León al último minuto. Hasta su ingreso, en lo que fue su debut, el wing izquierdo de Guaraní solo había desempeñado funciones de ‘aguatero’. Ambos elencos sumaban ocho puntos en el primer lugar, dejándole vía libre a Perú, con siete, en su búsqueda de alzar el trofeo en el Nacional.

La expectativa esa misma noche era grande. Miles de hinchas hicieron largas colas en las afueras del Estadio Nacional. Todos querían ser testigos de un eventual segundo título de Perú en la Copa América. Hasta ese momento, la única campaña con éxito había sucedido en 1939, ganando cuatro de cuatro partidos ante Ecuador (5-2), Chile (3-1), Paraguay (3-0) y Uruguay (2-1). De coincidencia, los charrúas otra vez eran su único escollo para alcanzar el trofeo.

La expectativa de nuestros futbolistas también era alta. Alberto ‘El Toto’ Terry, una de las figuras de Perú, declaró que “todos estamos con mucho optimismo y esperamos reeditar nuestra actuación con Brasil”. “Creo que ha pasado la mala suerte que me acompañaba. Ganamos y nada más”, alcanzó a decir Luis Calderón. Por otro lado, Roberto Drago agregó que “esperamos que el público nos aliente en las buenas y las malas. Tenemos fe en el triunfo”.

Un total de 44 mil 415 hinchas hicieron su ingreso al Estadio Nacional, como describía El Comercio “los pasillos de las distintas tribunas estaban completamente llenos, no permitiendo la circulación entre ellos”. Nuestra edición impresa agregó que “una expectativa nunca vista y que no puede ser comparada con la que hubo en 1939 es la que hay en nuestro público hoy por el partido (...), en la que muy bien puede definirse el título”.

LA DECEPCIÓN

Rafael Asca en el arco; José Allen y Guillermo Delgado en la defensa; Ernesto Villamares, Cornelio Heredia y Luis Calderón como volantes, y la línea de cinco delanteros con Luis Navarrete, Roberto Drago, Alberto Terry, Guillermo Barbadillo y Gilberto Torres fueron los elegidos por Ángel Fernández para buscar el segundo título de Perú en la Copa América. Sus nombres estaban a 90 minutos de quedar en la historia grande de nuestro balompié. Pisaron el césped en medio de cohetes, cohetillos y luces de bengala desde la tribuna.

Al frente estaba Uruguay, vigente campeón del Mundial. Tan solo tres años antes, los celestes habían silenciado a los 200 mil espectadores en el Maracaná de Río de Janeiro, dejando a los locales, Brasil, sin el título que tenían en sus manos. Matías González (Cerro), William Martínez (Rampla Juniors) y Carlos Romero (Danubio) eran los que seguían de ese plantel.

Previo saludo entre los capitanes Guillermo Delgado, abuelo de Erick Delgado, y Matías González, más el sorteo de los arcos (Perú eligió el sur), el brasileño Mário Silveira daba el inicio del partido. Cuando el partido era ida y vuelta, y a dos minutos de una clara opción de gol de Terry tras combinación con Drago, Uruguay abrió el marcador, obra de Donald Peláez (38′). Delgado toca el balón con la mano cerca al área, el disparo del tiro libre choca al palo, Allen rechaza mal el balón y el oriental aprovechó el rebote para anotar. El primer tiempo quedó 1-0 en nuestra contra.

Tan solo a 33 segundos de iniciada la segunda parte, el uruguayo Suoto manda un centro al área, esta vez Villamares despeja el balón a medias, Morel lo recoge y se la da a Peláez, quien fusila el arco peruano. El arquero Asca tan solo quedó parado bajo los tres palos. Con el 2-0 abajo, las tribunas comenzaban a pasar de la fiesta a la preocupación. El nivel de los futbolistas peruanos no daba ni para soñar con una remontada.

La estocada final llegó a los 72 minutos, descrito así por El Comercio: “centra Peláez en buena forma y (Carlos) Romero, que entra en carrera, bate inobjetablemente de cerca a Asca. La consecuencia de ese tanto es que el público en casi todas las tribunas empieza a abandonar sus asientos como protesta muda de lo que está ocurriendo en la cancha”. El 28 de marzo de 1953 debía quedar como una fecha histórica, pero pasó al olvido.

Pitazo final. Perú perdía 3-0 de local ante Uruguay y dejó pasar una oportunidad increíble de ser campeón de la Copa América. Eso sí, esta goleada confirmó lo que sería el ‘milagro paraguayo’: un día antes le ganaron a Brasil y lo igualó en el primer lugar, la derrota de Perú forzaba un partido entre guaraníes y el Scracht por el título, que se jugó cuatro días después. Paraguay ganó 3-2 y consiguió así su primera Copa América.

Como era de esperar, fue la despedida del rápido y casi improvisado paso de Ángel Fernández en la selección peruana. En su últimas declaraciones, explicó el por qué de sus polémicos cambios, criticados hasta por sus futbolistas (”Drago fue amonestado dos veces y con la tercera, lo expulsaban”) y hasta culpó a algunos jugadores (”Barbadillo no hizo caso de marcar al centro half”). No hubo otro entrenador argentino en la bicolor hasta la llegada de Ricardo Gareca en 2015.

Finalmente, Miguel Maticona, presidente de la FPF también mostró su resignación. “Siento mucho la derrota, Parece que el equipo hizo lo que ha podido. No consiguió ningún gol. Así es la suerte cuando está en contra”, alcanzó a decir. Perú ganaría la Copa América por segunda y última vez en 1975, luego de superar en tres finales a Colombia.

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