Hubo un tiempo en el que Chemo del Solar era el referente de los futbolistas peruanos en el exterior. En la década del 90, el entonces volante llevó su fútbol a Chile y luego brilló en España, y fue espejo de muchos jóvenes. Mientras jugaba en Tenerife, Salamanca, Celta y Valencia, desde Argentina Javier Mascherano crecía también admirando al peruano.