La economía peruana se desaceleró en el 2019 y registró un incremento de 2,16%, lo que implicó su peor nivel de crecimiento en la última década.
En diciembre la producción nacional sorprendió a la baja al anotar un crecimiento de tan solo 1,12%, manteniendo su tendencia de desaceleración, tal como lo había proyectado el Indicador Mensual Económico de El Comercio (Imeco).
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El Imeco y el consenso de analistas esperaban que, en el último mes del año, la actividad aumentara alrededor de 1,5%, con lo que el crecimiento anual llegaría a 2,1%.
No obstante, el INEI actualizó la serie de producción mensual, como lo hace cada trimestre, lo que llevó a obtener un resultado anual mayor al esperado.
Sin esa actualización, con el crecimiento anotado en diciembre (1,12%), la economía solo hubiera podido crecer 2,04%.
FACTORES
De acuerdo con los especialistas, tres factores explicarían el desempeño de la actividad durante el 2019.
El primero estuvo asociado a los problemas que enfrentaron los sectores extractivos. La producción minera y pesquera se contrajo en 0,05% y 25,87%, respectivamente, debido a la baja concentración en los minerales extraídos y a dificultades climáticas, en el caso de la pesca. Esta situación perjudicó también al sector manufacturero primario.
El segundo factor estuvo asociado con la contracción de la inversión pública, que provocó que el sector construcción –de mayor encadenamiento en la economía– creciera apenas 1,51%. En diciembre la construcción disminuyó en 9,86%.
“La tensión política ha sido uno de los principales responsables de la caída de la construcción”, afirmó Guillermo Arbe, gerente de Estudios Económicos de Scotiabank.
Según Arbe, las tensiones políticas y la alta rotación del Gabinete Ministerial afectaron el ambiente de la inversión privada y resintieron el gasto público, convirtiéndose en el tercer factor que afectó la economía.
Desde inicios del año se esperaba un menor dinamismo de la inversión pública por el cambio de las nuevas autoridades municipales y regionales.
Pero el Ministerio de Economía y Finanzas había anunciado que trabajaría para atenuar este impacto.
Para Hugo Perea, economista jefe para el Perú del BBVA Research, los problemas estructurales que enfrenta la economía también estuvieron presentes en el resultado del 2019.
Perea remarcó que se requiere del consenso de una agenda mínima para implementar las reformas estructurales.
“Hay una serie de elementos que están afectando la capacidad de crecimiento de la actividad económica que exigen acciones”, subrayó el economista.