“Gemelo siniestro” llega al cine: ¿Por qué nos fascinan y aterran los hermanos duplicados en el cine?

El cine de terror es doblemente terrorífico cuando hay un par de gemelos en la trama. Ejemplos sobran. Quizá las más famosas sean las niñas del Hotel Overlook en “El resplandor” de Stanley Kubrick, de apenas pocos segundos en pantalla, pero trascendencia inolvidable. Cómo olvidar también el impacto producido por las gemelas microcefálicas de “Freaks” (1932) o el perturbador doble papel de Jeremy Irons en “Dead Ringers”.

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Habría que sumar a esa lista a “Gemelo siniestro” (“The Twin”, 2022), película finlandesa que cuenta la historia de una pareja de esposos que debe sobrellevar el trauma por la muerte de uno de sus hijos gemelos. Protagonizada por Teresa Palmer en el papel de la atormentada madre, la cinta aterriza en la cartelera peruana este jueves, y antes de ello conversamos con su director, Taneli Mustonen.

“Creo que la fascinación por los gemelos tiene que ver con el hecho del reflejo, con esa sensación extraña de poder verte a ti mismo en alguien más”, reflexiona el cineasta nórdico sobre ese elemento de la duplicidad que atrae y espanta. “Pero, además, la idea de ‘Gemelo siniestro’ surgió cuando pensamos en qué es lo que ocurre dentro de una familia cuando se pierde a un gemelo. Cómo se lidia con esa tragedia. Por eso abordamos la historia desde el punto de vista de la madre”, agrega.

Con una fuerte carga psicológica, “Gemelo siniestro” bebe de varias referencias que el propio Mustonen revela: algunas más clásicas como “El exorcista” o “La profecía”, y otras menos conocidas o de mayor culto como “Don’t Look Now” de Nicolas Roeg, “The Changeling” de Peter Medak, “The Other” de Robert Mulligan o “Let’s Scare Jessica to Death” de John D. Hancock.

Curiosamente, Mustonen es un cineasta que ha adquirido fama gracias a su trabajo en dos géneros aparentemente disímiles como el terror y la comedia. ¿Hay puntos en común entre uno y otro?, le preguntamos. “Cuando crecí yendo al pequeño cine de mi ciudad, esos eran mis dos géneros favoritos porque siempre podía ver la sala llena de gente gritando o riendo. Esto tuvo mucho impacto en mí”, confiesa.

“Y ahora, trabajando como director, me doy cuenta de que el reto es el mismo: mi tarea es hacer reír o asustar a la gente. El público paga una entrada pidiéndote ‘hazme reír’ o ‘asústame’. Y es por eso que encuentro vínculos entre el terror y la comedia. Quizá la sensación de sorpresa es el elemento común en general”, advierte el cineasta.

Ambientada en un paraje aislado, frío y solitario de Finlandia, “Gemelo siniestro” guarda algunas correspondencias con el reciente auge del ‘folk horror’ nórdico (“La bruja”, “Midsommar”), pero hacia el final de la cinta se decanta por otros rumbos que no revelaremos aquí. Y aunque ese desvío termina por debilitarla, igual estamos ante un estreno de interés por estos lares.