Seúl [AFP]. Corea del Norte liberó más de 3.600 personas que estaban en cuarentena por el nuevo coronavirus, informó una agencia de prensa surcoreana, en momentos en que la epidemia ya se extendió a 95 países, con más de 100.000 casos en todo el mundo.
Pyongyang impuso restricciones estrictas y cerró sus fronteras para tratar de prevenir un brote, e insiste en que no ha tenido ni un único caso de COVID-19.
La agencia surcoreana Yonhap reportó que la radio estatal de Corea del Norte anunció la salida de cuarentena de 3.650 personas en las provincias de Kangwon y Chagang.
El viernes, la agencia norcoreana KCNA había anunciado que 221 de 380 extranjeros que estaban bajo “estricto control médico” habían sido dados de alta del aislamiento.
El líder norcoreano, Kim Jong Un, advirtió el mes pasado de “graves consecuencias” si el virus llega a su país, y por ello se prohibió el ingreso de turistas y suspendió vuelos y trenes desde el exterior.
Corea del Norte, un país sujeto a múltiples sanciones internacionales por sus programas de misiles nucleares y balísticos, tiene una infraestructura médica deficitaria, y analistas apuntan que la prevención es su única opción.
Kim envió el jueves una carta personal al presidente Moon Jae-in, de Corea del Sur, para reconocer el esfuerzo de los surcoreanos que luchan contra el brote de coronavirus en el país.
Corea del Sur, que reportó 93 nuevos casos el domingo, tiene el mayor número de casos en el mundo fuera de China con 7,134.
Dos personas más murieron, lo que eleva el número de muertos a 50, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.