Es muy interesante comentar cómo han crecido los balnearios del sur, a lo que ha contribuido la apertura de la avenida Leguía. El Barranco es ya una ciudad. La Avenida del Progreso une rápidamente Lima con el Callao y le ha dado mucha vida a Bellavista, el simpático pueblo que tanto amó el virrey Conde de Superunda. Ancón, gracias al ferrocarril, crece incesantemente y es un balneario muy adecuado a los gustos de los limeños. Por otra parte, ya se están haciendo pruebas para que Chosica se incorpore más a Lima.
H.L.M.