Para Olga Martiniere, fundadora de Mish, organización que se dedica al rescate de gatos en situaciones vulnerables, son muchos los beneficios de que un gato crezca junto a miembros de su propia especie. Por eso, ella afirma que los dueños deberían considerar adoptar, como mínimo, a dos gatos.
“Los gatos también aprenden por imitación, y pueden ir aprendiendo junto a otro gato, cómo rascarse, acicalarse, dónde treparse, cómo explorar la casa, qué lugares son seguros, etc.”, explica.
Por ello, lo recomendable, siempre que se vaya a considerar la adopción de un gato cachorro, es adoptar un segundo gato.
“Siempre aconsejamos adoptar dos gatos, ya que los cachorros tienen mucha más energía, y tener un compañero les permite modular su comportamiento social: medir si están siendo muy intensos, y si su mordida es muy fuerte. Esto los ayuda a interactuar mejor con sus humanos”, señala Martiniere.
“Nos ha pasado que, algunos adoptantes de gatos cachorros, nos han escrito preocupados porque sus gatos juegan muy bruscamente o se activan durante las noches. El problema es que algunas personas no consideran que los gatos necesitan cubrir sus necesidades de juego… El contar con un compañero puede facilitar esto”, añade.
En el caso de adoptar un segundo gato si ya hay un gato adulto en casa, la situación es la misma. Sin embargo, hay que realizar una introducción segura, para que el gato pueda acostumbrarse al nuevo integrante de la casa.
“Si bien hay que hacer una presentación cat friendly, es probable que ambos gatos formen un grupo social que les permita ser mucho más felices al sentirse acompañados, ya que tendrán con quien jugar, explorar y acicalarse”, puntualiza Martiniere.
Para adoptar un gato de Mish, escribir al: 977 357 271. Para leer más artículos de tenencia responsable de mascotas, ingresar a Consultorio WUF.