En casa, a tan solo unos días de Navidad, ya están iniciando los preparativos para la esperada cena. Al igual que todos los años, el pavo, el arroz árabe y el panetón serán los protagonistas en Nochebuena. Por ello, es común sentirse sumamente emocionado por consumir estos deliciosos platillos. Sin embargo, también debemos tener en cuenta que los excesos y las malas combinaciones alimenticias pueden generar un caso de dispepsia, más conocida como indigestión.
“Los cuadros de indigestión son altamente prevalentes en Navidad y Año Nuevo. Básicamente es porque las personas llegan a un exceso en su ingesta de comida o realizan una combinación inapropiada de alimentos. Cabe mencionar que no se trata de una enfermedad, sino de un conjunto de síntomas que hacen referencia a cuadros de dolor en la parte superior del abdomen, los cuales pueden ser muy variables según la persona. Entre ellos, se encuentran la disconformidad, la sensación de saciedad, los gases y eructos constantes”, estableció la Dra. Hellen Agurto, Gastroenteróloga de SANNA Clínica San Borja.
Según la especialista de SANNA, la dispepsia generalmente está relacionada a la alteración en la alimentación, los excesos en la comida o el uso de medicamentos. “Normalmente, se revierte cuando el paciente deja de realizar estas acciones. Por ende, si persisten las molestias, la persona tiene que considerar que probablemente ya no sea algo superficial, pues podría tratarse de una enfermedad. Para aclarar la situación, el paciente debe acercarse a un experto para poder ser evaluado”, agregó.
¿Qué alimentos son los principales causantes de la dispepsia?
En primer lugar, es preciso aclarar que no está mal darse gustos en la comida, especialmente durante las festividades de fin de año. “El problema surge cuando ingerimos raciones exageradas sin moderación ni equilibrio”, señaló Hilda Salvador, Nutricionista de Pulso Salud.
En ese sentido, la Dra. Agurto indicó que los principales causantes de la indigestión son los alimentos con alto contenido de grasas, como los siguientes:
- El pavo, pues va servido con muchas salsas y condimentos.
- El panetón (hipercalórico).
- El chocolate caliente, sobre todo cuando lleva chantilly o bombones.
- El pure de papa, camote o manzana.
- El arroz árabe.
“Todo exceso de grasa es lo que genera estos síntomas, los cuales empeoran si los asociamos al exceso de lácteos y, por parte de los adultos, el abuso de alcohol”, añadió Hellen Agurto.
¿Quiénes son más proclives a padecer una indigestión?
La doctora de SANNA San Borja sostuvo que todos debemos evitar los excesos y las combinaciones excesivas al momento de cenar. A pesar de ello, resaltó que algunos pacientes pueden ser más proclives a sufrir de una dispepsia que otros, por lo que deben tener mayor cuidado.
Entre ellos, se encuentran los adultos mayores y los niños más pequeños. “Procuren no llenarlos de cosas muy dulces ni alimentos a muy altas horas de la noche”, enfatizó.
Asimismo, incluyó a los pacientes con trastornos metabólicos, como personas con obseidad o diabetes mellitus. Del mismo modo, mencionó que quienes padecen de hipertensión o pancreatitis también deben tomar mayores precauciones.
¿Cómo prevenir estos efectos?
Para iniciar, la Mag. Shirley Cuya, Coordinadora Especialista de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Privada del Norte (UPN), aconsejó consumir pequeñas porciones de comida, además de reemplazar la mayonesa por aliños más naturales en las ensaladas. También, recomendó consumir carnes bajas en grasas o preparadas al horno o vapor.
En relación a los hábitos previos a la cena, el Dr. Pavel Illich Chávez Cáceres, gastroenterólogo de la clínica Stella Maris, compartió los siguientes consejos:
- Planificar el menú navideño: Será vital dedicar un tiempo a planificar la diversidad de la cena, incorporando elementos como frutas, verduras, frutos secos, pavo y pollo (evitando las carnes de res). La inclusión de fibra, presente en alimentos como legumbres, tomate, palta, así como frutas y verduras, favorecerá el tránsito del sistema digestivo. Procura evitar el consumo de alimentos ultraprocesados como embutidos y enlatados, pues lo mejor es optar por comidas más naturales y porciones moderadas.
- Evitar el estrés: Se sabe que el estrés influye en las enfermedades estomacales. Por ende, es importante evitarlo, sobre todo durante las actividades de la temporada. En tu rutina, incluye un tiempo para relajarte, desconectarte por algunas horas, practica técnicas de relajación y haz ejercicio. Si sientes que está sperdiendo el control, organiza tu tiempo de manera efectiva o busca la ayuda de un especialista.
- Hacer ejercicio o caminata: La práctica de deporte o una caminata diaria de 30 minutos al día promueve la motilidad intestinal, que es un conjunto de movimientos que facilitan la evacuación de los alimentos desde la boca hasta el ano. Esto favorece a la expulsión de gases, previene el estreñimiento y contribuye a quemar las calorías.
En relación a lo mencionado previamente, Hilda Salvador también recalcó la importancia de tomar elecciones conscientes, poner en práctica el control de porciones e hidratarse constantemente. “Puedes utilizar platos más pequeños para ayudar a controlar las porciones y evitar excesos. Saborea cada bocado y presta atención a las señales de saciedad de tu cuerpo”, aseveró.
“En las festividades de fin de año, es posible disfrutar de la comida, priorizando opciones saludables. Comer balanceado no significa comer solo vegetales, por el contrario, se trata de encontrar un equilibrio entre los grupos de alimentos, asegurando una adecuada combinación de carbohidratos, proteínas, vitaminas y otros nutrientes esenciales”, concluyó la nutricionista de Pulso Salud.