Christian Cruz Valdivia

Cuando apenas era una escolar de 10 años, el traje de gimnasta decorado con las medallas en su cuello parecían la vestimenta perfecta para una niña que solo sabía de deportes, naturaleza y mar. Creció viviendo en una haciendo de Mamacona, lejos del cemento de la ciudad, y siendo una gimnasta destacada -un recorte de DT del 2008 así lo corrobora-, pero dejó la colchonetas para dejarse llevar por los vientos.