En el imponente Balaídos de Vigo, donde la selección peruana sumó un punto ante Italia en el Mundial España 1982, tres peruanos volvieron a flamear la bandera nacional. José Guillermo del Solar fue el primero (1996), en su peregrinaje por distintos equipos de LaLiga; luego, fue el turno de Juan José Jayo (2000), y en los últimos meses arribó el volante central que mejor representa al juego sofisticado de ‘Chemo’ y la marca férrea del ‘Pulpo’. El Celta español tardó veinte años en volver a mirar al mercado peruano, y con las recientes noticias solo confirmó que la contratación de Renato Tapia fue su mejor golpe en la temporada.
Tapia, que se saltó el rigor de debutar en torneo local, inició en el Esther Grande de Bentín y pasó al Twente de Holanda en el 2013. En la Eredivisie terminó su etapa formativa y también cumplió una pasantía por el Feyenoord, donde fue campeón de liga y copa. Sin embargo, no pudo hallar la consolidación que si fue ganando como jugador inamovible de Ricardo Gareca en el Blanquirroja.
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A los 25 años, las obligaciones eran más altas para el jugador al que le tiramos el cartel de ‘capitán futuro’ y lo supo asumir con responsabilidad. Con el pase en su mano, y analizando ofertas de Francia, Inglaterra, Portugal y México, el Celta de Vigo se presentó como el mejor postor y así la escuela de volantes peruanos volvió a tener un representante en la liga de las estrellas.
El 10 de agosto del 2020, cuando estampó la firma, Tapia estaba cotizado en 2,4 millones de euros, según la página especializada Transfermarkt. Hoy, a inicios de febrero del 2021, su valor de mercado se cuadruplicó y ya alcanza los 10 millones de euros. En estos seis meses en la gran élite del fútbol se convirtió en el peruano mejor valorizado por encima de André Carrillo (8,5M) y Raúl Ruidíaz (7M), y en el Celta -cuyo plantel se cotiza en 119,2 M de euros- es la cuarta mejor ficha a nivel de cotización.
“Llegar a un país nuevo, a otra realidad, que hablen de ti y reconozcan tu trabajo, es satisfactorio. Es una de las mejores ligas del mundo. Surgió la posibilidad de poder venir y no lo dudé”, declaró el volante nacional en las últimas horas sobre su desempeño.
Con un poco de más de la temporada en juego en España, es ideal parar a Renato frente al espejo del último peruano que dejó huella en Vigo. Juan Jayo Legario jugó apenas media campaña en el Celta y fue suficiente -de alguna forma- para entrar en la historia del club.
Dos historias, una bandera
“Renato Tapia: Imperial. Soberbio. (Juan) Jayo fue el último peruano que militó en el Celta y le apodaban ‘el pulpo’. Ese mote es todavía más válido para Renato, que no se cansa de robar balones en el centro del campo”, publicó el Diario AS tras el excelente desempeño que tuvo Renato Tapia en el empate (2-2) contra el Atlético de Madrid, líder de LaLiga.
En el Wanda Metropolitano, el peruano fue amonestado apenas a los 5 minutos. Solo su fuerte control emocional impidió que vea la segunda amarilla en el partido (solo fue expulsado 1 vez en 134 partidos en Europa), que terminó con un agónico gol de Ferreyra para la paridad visitante. Otro dato no menos resaltante se vio en las alineaciones. Tapia fue uno de los tres extranjeros del Celta (Murillo de Colombia y Araújo de México, también jugaron), mientras que el Atlético de Oblak, Savic, Kondogbia, Suárez y Correa alternó solo tres españoles en desde el arranque: Saúl, Koke y Llorente.
Otros eran los tiempos cuando Juan Jayo Legario arribó al fútbol ibérico. “Agradezco la confianza que ha depositado el Celta en mí. Espero no defraudar a nadie”, alcanzó a decir en su presentación el volante nacional, que era acompañado por su representante Carlos Delgado, según reporta El Comercio en enero del 2001.
El ‘Pulpo’ recibe una calificación no tan exacta en la página especializada “yojuegueenelcelta.com” por su desempeño en la campaña 2000-2001 en el equipo de Vigo. “En su media temporada en el equipo vigués jugó 14 partidos de liga, y disputó también un partido frente al Stuttgart en la Copa de la UEFA”, cita.
Seis meses duró la aventura de Jayo en el Celta, que venía de haber ganado la Copa Intertoto la temporada anterior. El peruano jugó 14 duelos por lo que hoy se conoce como LaLiga, 3 por Copa del Rey y 4 en la Copa de la UEFA (hoy Europa League). Entre sus logros, destaca los 4 goles que anotó en el torneo de Primera División, donde el celta culminó en sexto puesto en la tabla de posiciones.
En un plantel con jugadores extranjeros como Eduardo Berizzo, Pablo Cavallero, Catanha, Giovanella y Aleksandr Mostovói, Jayo se hizo un espacio en el primer equipo que escribió un hito en la historia del club: clasificar a la final de la Copa del Rey.
De los 3 cotejos que disputó por Copa, hubo uno donde Jayo sobresalió. Fue contra el Barcelona por semifinales en Balaídos. “El Barza se dejó remontar un 0-1 y Rivaldo falló un penalti clave. En un partido áspero, un Celta muy leñero”, publicó el Diario Mundo Deportivo. Jayo recibió dos estrellas de tres por su participación en el partido. La calificación responde al valor de soportar la arremetida catalana cuando el Celta se quedó con nueve jugadores.
Ya en la final, el Celta de Jayo no pudo ante el Zaragoza de Miguel Rebosio. En la única definición de dos peruanos en el torneo español, el ‘Conejo’ salió victorioso por 3-1.
Hace una semana, el ruso Alexandr Mostovoi, figura en el Celta en los años 90, se atrevía a definir al Jayo con el que coincidió en vestuarios. “Era pequeñito. Chiquito. Corría por todo el campo. Era un recuperador. Hacía muy bien su trabajo. Yo le decía: ‘Jayo quita y luego me das el balón. Yo lo arreglo’ (risas). Él hacía el trabajo sucio y yo el limpio”, comentó.
Lo relatado parece ponerle la valla muy alta a Renato Tapia, quien es uno de los baluartes de un Celta que marcha a mitad de tabla (26 puntos). Es decir, ni tan lejos del descenso, ni tan cerca de los puestos que clasifican a los torneos internacionales de la próxima temporada. Tampoco juega la Copa del Rey, ya que fue eliminado en octavos de final con el peruano en el campo como uno de los pocos titulares que perdió 5-2 ante el Ibiza.
Lo de Tapia pasa -fundamentalmente- por un rendimiento personal superlativo. Según las estadísticas que entrega el servicio de Opta, en lo que va de la temporada 2020-2021, Renato es el futbolista con más balones recuperados de LaLiga Santander con 147 intervenciones. Supera a volantes como Dani Parejo del Villarreal (139 recuperaciones), Miker Merino de la Real Sociedad (138) y Frenkie de Jong del Barcelona (124). Solo la transferencia de éste último jugador le costó 86 millones de euros al Barza en el 2019. Aquí radica el valor de ser clave en la estructura del juego de tu equipo.
En 21 partidos disputados en LaLiga, Opta registra otras marcas que son muy destacables para el peruano. Promedia 49,5 pases por partido con una efectividad de 81,1%. Y en su octava temporada en el fútbol europeo, consiguió en la liga española lo que no podía en la Eredisivie holandesa: suma 1.781 minutos en cancha contra los 1.310 que alcanzó en el Willem II en la campaña 2018-2019.
Los rumores por una pronta partida de Tapia pronto se convertirán en ofertas concretas. Un jugador de sus características es muy probable que solo pase utilizando a equipos como el Celta como un trampolín hacia la fama de mejores clubes.
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