(Difusión)
(Difusión)
Inés Temple

Muchas personas dudan sobre cómo manejar mejor su marca personal y su reputación profesional en el mundo digital, en las redes sociales e, incluso, en nuestros muchos grupos de WhatsApp. Comparto algunas ideas como repaso, y otras que ojalá nos inspiren hacia una versión más auténtica de nosotros mismos allí y en todos lados.

  1. Las redes no son ni están para tratar de impresionar a los demás. Cuando nos comunicamos con la verdad, son vitrinas que muestran quiénes somos en realidad.
  2. Las redes sirven para agregar valor a los demás. Eso es lo que hace que las personas estén atentas a nuestras publicaciones, las lean y las compartan.
  3. Si nuestro objetivo al usar las redes es lograr notoriedad o la admiración de los otros, lo más probable es que generemos rechazo o, a lo más, indiferencia.
  4. Es importante que las publicaciones que compartimos, ya sean artículos, comentarios o imágenes propias o de terceros, sean coherentes con nuestra reputación y objetivos.
  5. El tono de nuestras comunicaciones debe ser idealmente positivo y constructivo. Existen ya muchos troles y odiadores como para pasar a engrosar sus filas.
  6. El autobombo disfrazado de falsa humildad es percibido como tal con facilidad por los demás. Uno puede compartir éxitos y buenas noticias en redes, pero debe hacerlo con sencillez y sin arrogancia para no perder credibilidad ni caer pesado.
  7. Tratar de mostrar una imagen de nosotros mismos muy ‘construida’ o que no se ajusta a la realidad es contraproducente y genera desconfianza.
  8. La imagen es solamente el reflejo de nuestra verdad. Pretender ser lo que no somos genera disonancia y las redes son muy hábiles en detectarla, así como lo son en diferenciar lo real de lo falso.
  9. Publicar solo con el afán de generar ‘likes’, aparecer en ránkings o ganar más seguidores se hace evidente con facilidad y es un despropósito que muestra superficialidad. Eso mancha la marca personal e impacta en la reputación profesional a largo plazo.
  10. No podemos olvidar que somos uno y el mismo dentro y fuera de las redes, y con esos mismos valores e integridad debemos actuar. Las personas deciden primero qué piensan de nosotros antes de escuchar nuestro mensaje.
  11. La idea es expresarnos en las redes con la misma autenticidad con que lo hacemos en nuestra vida real. Lo verdadero no tiene que ser perfecto ni ideal.
  12. Solo la verdad, la transparencia y la humildad construyen confianza en el tiempo. La soberbia o la arrogancia espantan en redes y en persona.
  13. Por otro lado, la humildad fingida se siente manipuladora. Las redes y en general las personas son muy hábiles para detectar actitudes o personas falsas.
  14. Desaparecer o no estar presentes en las redes es hoy contraproducente. Las personas que quieren saber más de nosotros esperan encontrar esa información para saber quiénes somos en lo profesional y lo personal.
  15. Comunicarnos desde el corazón, con verdad, pasión y genuino entusiasmo, buscando que lo compartido sea beneficioso para los demás de alguna forma, es en esencia la mejor manera de interactuar en las redes y con los demás, dentro y fuera de ellas.
Inés Temple es presidenta de LHH DBM Perú & LHH Chile.

Contenido sugerido

Contenido GEC