Pasea al bebé en brazos durante cinco minutos para calmarlo. (Foto: Freepick)
Pasea al bebé en brazos durante cinco minutos para calmarlo. (Foto: Freepick)
/ Goncalo Costa
Redacción EC

El llanto es una forma de comunicación que tiene el para expresarse y dar a conocer lo que siente. Esta reacción suele producir más de una angustia a sus padres, sobre todo cuando experimentan por primera vez la paternidad. Comúnmente el lactante suele reaccionar de esta manera cuando tiene el pañal lleno, cuando tiene hambre o sueño.

Una de las reacciones más conocidas para calmar al niño suele ser mecerlo en coche o en brazos por un determinado periodo de tiempo. En algunos casos, estos métodos suelen fallar y el llanto no cesa. Si esto ocurre durante las noches, el dolor de cabeza para los padres suele ser peor.

Sin embargo, el sufrimiento no tiene que ser eterno. Un estudio publicado por la revista científica Current Biology, publicado en pasado, habría encontrado el método infalible para conseguir que el bebé deje de llorar y pueda calmarse y, en el mejor de los casos, caiga rendido a los brazos de Morfeo.

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Según el centro de investigación japonés RIKEN, encargado de llevar a cabo el proceso científico, la acción correcta para calmar a un pequeño es cargarlo y pasearlo en brazos por cinco minutos. Durante ese periodo, el menor logrará entrar en una fase de relajación. Acto seguido, antes de llevarlo a su cuna, debes permanecer ocho minutos sentada con él. La publicación explica que gracias a dicha acción, el bebé pueda pasar de la fase 1 a la fase 2 del sueño.

En el experimento participaron 21 bebés cuyas edades no pasaban de los siete meses de edad. Los lactantes fueron sometidos a cuatro tipos de métodos. Solo mecerlos en brazos y en una cuna mecedora logró calmarlos. Por el contrario, no se tuvo éxito sosteniéndolos en brazos o colocándolos en una cuna estática.

La investigación se llevó a cabo durante 32 sesiones y los fueron monitoreados a través de cámaras de video y electrocardiogramas, que medían sus frecuencias cardiacas. Cabe mencionar que el estudio también encontró que la reacción no obedece únicamente a una conexión maternofilial, lo que significa que puede dar resultados si lo realiza otro miembro de la familia que sea parte de su entorno.

El equipo de RIKEN se encuentra desarrollando un dispositivo que permita a los padres poder medir el estado fisiológico del menor, de modo que puedan tener una idea de las posibles reacciones del bebé.

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