Restringir el horario de funcionamiento de un local, prohibir la venta de un determinado producto o exigir nuevos requisitos municipales al querer renovar el certificado ITSE, los cuales no figuraban para la licencia de funcionamiento. Estos tipos de abusos cometidos por la administración pública son conocidos como barreras burocráticas, que no son otra cosa que normas o regulaciones que restringen injustificadamente el acceso o permanencia a los emprendedores en el mercado.
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Precisamente, esta sobrerregulación o exceso de normas por parte del gobierno nacional, los gobiernos locales y las municipalidades es uno de los principales problemas para emprender en el Perú. A esto se suma el desconocimiento que tienen algunos comerciantes o dueños de locales sobre las herramientas que existen y tienen a la mano para combatir la burocracia.
Teniendo como base este contexto, y el aparente aumento de la cantidad de obstáculos que enfrentan los emprendedores día a día, la congresista Adriana Tudela (Avanza País) ha organizado la denominada “Clínica Jurídica”, dirigida a micro y pequeños empresarios que quieran denunciar y eliminar estas normas que consideran abusivas.
A través de este espacio virtual, los afectados pueden enviar sus denuncias a través de un correo electrónico, detallando el tipo de problema, la entidad que viene imponiendo la barrera burocrática y las pruebas pertinentes. Luego de ello, un asesor de la clínica se comunicará con el agraviado en la brevedad del caso. El objetivo es analizar el problema y acompañar el proceso de denuncia ante el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi).
Además, la recepción de la denuncia es gratis y se realiza de forma totalmente anónima.
Origen y denuncias recibidas
En diálogo con El Comercio, Tudela contó que la idea de crear esta Clínica Jurídica nace en el marco de la conformación de una comisión especial ya hace unos años en el Congreso, que tiene como función principal velar por la calidad regulatoria de las leyes y normas en general. En ese sentido, indicó que surge esta iniciativa, que es básicamente un proyecto de acompañamiento que busca apoyar de manera legal y técnica a los emprendedores que se vean afectados por normas o por requisitos que son impuestos sobre todo por gobiernos locales, como municipalidades, y que terminan siendo en el fondo ilegales o irracionales.
La instancia a la que hace referencia la congresista es la Comisión Especial Multipartidaria encargada del Ordenamiento Legislativo, la misma que preside. En ese sentido, la Clínica Jurídica es parte del trabajo de esta comisión y su despacho.
“Ese es el trabajo que hemos venido haciendo y que surge a raíz de la aprobación de la Ley que mejora el procedimiento de denuncia de barreras burocráticas frente al Indecopi, que es un proyecto de ley que presenté y que se aprobó el año pasado. A raíz de ello, hoy en día el procedimiento es más expeditivo, accesible y amigable para el ciudadano. Entonces, como acompañamiento a eso, hemos creado esta Clínica Jurídica”, señaló.
Tudela precisó que los cambios o modificaciones a la referida Ley Antibarreras han sido los siguientes:
- Las denuncias no pueden ser archivadas por falta de pruebas o argumentos que el mismo Indecopi pueda conseguir.
- Si la barrera cuestionada es ilegal o irracional, se inaplica para todos los agentes económicos.
- Derivan en procedimientos de oficio.
- Poseen plazos fijos para su atención.
- Anónimas y gratuitas.
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Por otro lado, la congresista sostuvo que es importante, primero, crear conciencia en la ciudadanía respecto a las herramientas que tiene a su disposición para poder hacerle frente a actos o normas que muchas veces pueden ser abusivos por parte de de municipios. Precisó que es una forma de empoderar al ciudadano frente a las arbitrariedades que muchas veces ocurren desde la administración pública.
“Creo que es muy importante que los ciudadanos no solamente conozcan las herramientas que tienen a su disposición para enfrentarse a actos abusivos que se pueden materializar en barreras burocráticas, sino que también considero relevante generar un estado una administración pública que se convierta en un aliado del emprendedor y no en un obstáculo”, opinó.
Barrera burocrática: exigencias, prohibiciones, limitaciones, requisitos, cobros que afectan el acceso o la permanencia en el mercado.
Barrera ilegal: si la autoridad no es competente para regular la materia, no se cumplió con las formalidades legales; o, si la barrera incumple normas de mayor jerarquía.
Barrera irracional: si la barrera no atiende un problema real o no soluciona el problema. Si la barrera genera mayores costos que beneficios. Si la autoridad no evaluó otras medidas menos costosas para atender el mismo fin.
Materialización de la barrera: norma que contiene la barrera. Por ejemplo, ordenanzas municipales, decretos supremos, Tupas, entre otros.
La legisladora comentó que a la fecha, la Clínica Jurídica ha recibido unas 15 denuncias, teniendo entre los hechos más denunciados el tema de restricciones horarias y la exigencia de requisitos que en el fondo no están contemplados en la ley. A razón de ello, dijo que vienen investigando a más de 25 gobiernos locales por cobros que no estarían sustentados en una norma para otorgar una determinada licencia de funcionamiento.
“Hay casos en donde personal de la municipalidad le dice a una bodega o un centro comercial que solamente pueden operar hasta las 7 de la noche, sin embargo, no hay ninguna razón que justifique de manera racional o razonable esa limitación horaria. Ese tipo de restricciones entorpece y hacen más difícil la permanencia de los actores económicos en el mercado. Terminan afectando directamente al emprendedor. Estos actos abusivos son cada vez más recurrentes. Los gobiernos regionales y locales, en el fondo, han llegado a un punto en el que prácticamente están extorsionando muchas veces a los emprendedores”, detalló Tudela.
¿Cómo denunciar una barrera?
La “Clínica Jurídica” también ha puesto a disposición de los emprendedores una guía practica que explica paso a paso cómo presentar una denuncia para eliminar barreras burocráticas. Esta se puede descargar si se ingresa al siguiente enlace: aquí.
Cabe mencionar que para realizar una denuncia informativa referente a este tipo de casos primero se debe tener en claro a qué entidad dirigir el reclamo y segundo qué contenido incluir en la denuncia.
Para lo primero es necesario saber que si la barrera burocrática se encuentra en una norma nacional, de Lima Metropolitana o Callao, se puede dirigir el escrito a la Comisión de Eliminación de Barreras Burocráticas del Indecopi: consultasbarreras@indecopi.gob.pe.
En tanto, para las barreras en normas propias de todas las demás regiones, provincias y distritos, se puede dirigir el escrito a la Secretaría Técnica Regional de Eliminación de Barreras Burocráticas: barrerasregionales@indecopi.gob.pe.
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Para el contenido de la denuncia se debe incluir a la autoridad que emitió la norma que materializa la barrera a denunciar, cuál o cuáles son estos obstáculos, el artículo de la norma que ocasiona la barrera, por qué esta sería ilegal o irracional, y además los medios probatorios adjuntos que ayuden a corroborar los puntos previos (por ejemplo, la publicación de la norma).
Por otro lado, vale decir que la denuncia informativa deberá ser atendida por la Secretaría Técnica de la Comisión en un plazo máximo de 20 días hábiles. Esta instancia tendrá un plazo máximo de 45 días hábiles para iniciar un procedimiento de oficio o archivar la denuncia informativa. Finalmente, las acciones tomadas serán publicadas en el portal institucional del Indecopi.
Testimonios
Desde hace 1 año y medio, Susana Vivanco emprendió en el negocio de los abarrotes. Tiene un local en el cruce de las avenidas Angélica Gamarra y Universitaria, en Los Olivos, dedicado a la venta de estos productos y, además, de licores. Su horario de atención es de 8 de la mañana a 11 de la noche. Sin embargo, el rubro al que se dedica le demanda extenderse un par de horas más debido a la mayor demandas que tiene a altas horas de la noche.
Esta situación le ocasiona inconvenientes con el personal municipal de fiscalización, pues frecuentemente la visitan para exhortarla a cerrar temprano, a la hora establecida, si es que no quiere ser multada.
“Mi negocio es una bodega que se llama San Judas Tadeo, venta productos de abarrotes y licor. El problemas es principalmente los fines de semana, cuando el flujo de clientes es mayor hasta la 1 o 2 de la madrugada. Serenazgo ya me ha llamado la atención, pero les he explicado que este negocio tienes más ventas en la noche y que en el día es un poco bajo”, contó a El Comercio.
Susana refiere que al frente de donde vende y a los lados existen otras tiendas a las que sí se les permite quedarse más tiempo; incluso, señala que hay licorerías que atienden las 24 horas del día. Cabe decir que algunos de estos locales pertenecen al distrito de San Martín de Porres y se regirían por otras normas y horarios.
“Para mí realmente esta restricción es un inconveniente. Quisiera ver de qué manera me pueden ampliarme el horario, he invertido casi como 400 soles en sacar la licencia de funcionamiento y el permiso de Defensa Civil. Si yo quisiera pasarme a otro rubro tendría que hace runa nueva otra inversión, entonces no me convendría. Tengo muchos clientes que me indican que ellos salen del trabajo tarde y viene a comprar 1 o 1:30 de la mañana”, manifestó.
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Similar situación vive Maribel Silvera. Ella tiene un minimarket en la avenida Perú, en el distrito de San Martín de Porres. Según precisó, por tratarse de una vía principal existe aun una mayor restricción en cuanto el horario de atención. El municipio establece que sea hasta las 11 de la noche, pero Maribel comenta que recién a esa hora empieza a llegar un mayor flujo de personas a su negocio, sobre todo los días viernes y sábado.
“Ya nos ha multado una vez por el tema del horario. Ya he ido antes a la Municipalidad a pedir una ampliación y me dijeron que no, pero los que tenemos tienda sabemos que mayormente los fines de semana la gente sale de noche, el movimiento empieza a las 11 de la noche, literal. Son los sábados los días que nos salvan la semana porque los demás días el negocio está bajo”, explicó.
Maribel señala que las pocas ventas se deben también al incremento de tiendas y negocios en la zona. En cuadras donde antes habían como máximo dos tiendas, ahora se pueden hallar 4 o 5. “Hay mucha competencia y las ventas han bajado. Es por eso que los sábados es cuando uno aprovecha”, agregó.
La emprendedora espera que la autoridad municipal pueda disminuir sus restricciones ligadas al horario y permitirle tanto a ella como a los demás locales de la zona seguir vendiendo por unas horas más, al menos los días de alta demanda.
La labor de los municipios
Johnny Zas Friz, experto en derecho municipal, detalló a este Diario que en estos casos la autoridad local lo que tiene que hacer es compatibilizar el interés general de la comunidad, del vecindario, con los intereses fijados y concretos de las actividades económicas o de prestación de servicios. De igual forma, en ningún caso puede admitirse que las limitaciones o estricciones que se hagan por el interés general se conviertan en arbitrarias.
“Claramente esa es la idea. No puede darse el hecho de que estas medidas no tengan proporcionalidad, racionabilidad. Ahí, lo que hay que evaluar es cada caso en concreto, si en realidad estas prohibiciones o requisitos se dan conforme al objetivo de preservar el interés general de la colectividad”, explicó.
Zas Friz también dijo que ante cualquier norma arbitraria que limita la iniciativa privada y que incluso pueda significar que sea eliminada de su ingreso al mercado, esta puede tomar acciones. Resaltó que la acción principal es ir al Indecopi; precisamente hay una comisión de eliminación de barreras burocráticas que ve estos temas.
El experto agregó que algo que suele darse son requisitos que establecen mecanismos onerosos, pagos significativos, lo que está totalmente prohibido, pues las tasas deben corresponder al costo del trámite. Por lo general, los principales requisitos que carecen de sentido está relacionados a montos elevados en las tasas, los horarios y las licencias de funcionamiento.
“La idea es favorecer las actividades económicas, tanto así que existe una normativa nacional sobre licencias de funcionamiento, de ellas tampoco es que puedan alejarse mucho los municipios. La idea es que para la licencia solamente exijan lo necesario. Igual cada caso debe ser evaluado. La idea centra es que tienen que tratarse de medidas razonables y adecuadas”, puntualizó.