Una muestra para no ver con los ojos

ÓSCAR BERMEO OCAÑA

Aquí, el cubo blanco desafía al espectador. Busca sacarlo de su posición pasiva y llevarlo a los límites de lo habitual.

En la exposición colectiva “No View”, los visitantes distraídos, de actos mecánicos, corren el riesgo de perderse. Detenerse solo en las paredes puede inducir a una búsqueda infructuosa.

“En esta muestra queremos romper la metodología colectiva. Se trata de que la gente pasee por la galería de otra manera. Es una exposición que te obliga a interactuar con el espacio”, refiere la artista Natalia Revilla.

Los muros blancos tienden una trampa. Tras el inicial desconcierto, es necesario replantear los puntos de observación.  Poco a poco irán asomando las piezas, camufladas entre lo aparentemente homogéneo o escondidas en los rincones menos visibles del local. Sus descubrimientos quizás despierten algunas sonrisas.

“Me parece una exposición superdivertida, donde la intención también es romper con la seriedad que ronda al arte. Con el tiempo, siento que el arte ha perdido inteligencia, sentido del humor, poesía. Aquí queremos darle vuelta a eso”, refiere Patricia Camet, otra de las participantes.

“No View” también permite explorar en las convenciones preexistentes alrededor de los formatos artísticos. Ignacio Álvaro se pregunta con sus obras: “¿Qué legitima a una obra de arte?”. Esta y otras preguntas se suscitan tras recorrer la sala.

José Ignacio Iturburu aborda la invisibilidad desde la extendida indiferencia a nuestro patrimonio cultural.

“No escondí mis trabajos, sino que hablé de esa invisibilidad en la que yacen algunos monumentos arquitectónicos en nuestra ciudad. Muchas veces la sociedad nos lleva a valorar otros intereses”, refiere.

Propuesta grupal

En la muestra colectiva también participan Mariella Agois, Ana Teresa Barboza, Andrea Cánepa, Álvaro Icaza, Alejandro Jaime, Macarena Rojas y Sandra Nakamura. Las propuestas de “No View” estarán disponibles hasta el 8 de febrero en la Galería Wu de Barranco.