La NASA le dio el adiós a su Rover de Exploración de Marte (MER) Opportunity tras 15 años de imparable labor y grandes hallazgos en suelo marciano. El vehículo espacial, que originalmente se construyó para durar 90 días y recorrer 600 metros, se quedó tres lustros investigando.
La agencia espacial estadounidense perdió contacto con el rover el pasado 10 de junio, luego de que una intensa y prolongada tormenta de arena inutilizara sus paneles solares. Desde entonces, se ha intentado más de 800 veces reanudar la comunicación, pero todos los esfuerzos han sido en vano.
►La NASA da por "muerto" a Opportunity, el robot que exploró Marte por 15 años | VIDEO
►Marte podría albergar actividad volcánica subterránea, revelan científicos
"No hemos conseguido contactar con Opportunity. Con profundo cariño y gratitud, declaramos que su misión se ha completado", dijo Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la agencia espacial de EE.UU.
Entre todos los hallazgos hechos por este explorador, destaca principalmente el demostrar que Marte fue alguna vez un planeta cubierto de agua y, por lo tanto, pudo haber sido un mundo habitable. En honor a su gran aporte a la investigación espacial, a continuación recordamos los hitos que marcó el robot en su paso por el cuarto planeta del Sistema Solar.
Con 185 kilógramos de masa y valorado en 400 millones de dólares, el Opportunity aterrizó enero de 2004 en suelo marciano, junto a su gemelos Spirit. Al inicio, su tiempo de vida solo estaba estimado en 90 días, pero, contra todo pronóstico, logró quedarse 15 años y recorrer 45,46 kilómetros.
Ambos vehículos salieron de la Tierra equipados cada uno con una memoria de 256 megabits y cámaras de 1 megapíxel, tecnología que era respetable para la época.
Tras su aterrizaje en Marte, el robot tomó una foto panorámica de 360° de la zona llamada Meridiani Planum. En ese momento, se encontraba en un cráter de 20 metros de diámetro y cerca de un afloramiento rocoso. En las imágenes tomadas durante la caída se ve otro cráter cercano (Endurence).
Los sorprendentes resultados científicos de la misión se sucedieron casi sin parar. Así, Opportunity demostró que Marte en realidad no es rojo, sino gris. Gracias a los rotores que tenía incorporado, el rover pudo quitar la capa de polvo rojo que cubría el suelo marciano y descubrió que, debajo, el material tenía un color gris.
El Opportunity fue el primer robot explorador en descubrir un meteorito fuera de la Tierra, ya que en la Luna no se había identificado ninguno. A este cuerpo se le llamó Roca del Escudo Térmico, pues el hallazgo, que se hizo de forma casual, se dio cuando el rover se dirigía a examinar su propio escudo térmico de protección contra el calor.
La piedra poseía un color negro y el tamaño de una pelota de básquet. Los análisis determinaron que era rica en níquel y hierro.
En 2013, el vehículo de la NASA hizo su mayor revelación. Al acercarse a explorar el borde un gran cráter de impacto, el rover descubrió sedimentos de cerca de 4.000 millones de años que contienen arcillas. Las arcillas se forman en entornos acuosos donde el agua no es muy ácida ni muy salada, y por lo tanto representan un ambiente totalmente distinto al de las lagunas ácidas antiguamente encontradas.
En su largo recorrido por diferentes zonas del planeta, el explorador se topó con muchos cráteres; sin embargo, en 2010 encontró uno gigante, del tamaño de un campo de fútbol, con unos 90 metros de diámetro.
Esta aventura no ha estado exenta de complicaciones. El explorador llegó a un nuevo mundo sin conocer bien el terreno y las temperaturas. En 2010, su rueda delantera derecha empezó a dar problemas y desde entonces solo se desplazaba hacia atrás. Además, su brazo robótico también presentaba fallas, al igual que su memoria al largo plazo, la que prácticamente había perdido.
De todos los contratiempos, no cabe duda que las tormentas de arena fueron los más peligrosos. Periódicamente, en Marte se desencadenan tormentas que cubren el planeta entero con pequeñas partículas que oscurecen el cielo, bloqueando la luz solar, fuente de energía indispensable para el funcionamiento de Opportunity.
Una primera gran tormenta sucedió en 2017. En aquella ocasión, tanto Opportunity como Spirit lograron sortearla. Pero el 10 de junio de 2018, día 5111 de Opportunity en Marte, la tormenta de polvo más larga y activa de las últimas décadas estaba alcanzando su máxima amplitud. Ese día, el rover perdió comunicación con la Tierra.
Con el fin de Opportunity, la superficie marciana queda "vigilada" solamente por las misiones Curiosity e Insight. En la primera, un enorme y sofisticado rover de exploración recorre el planeta para rastrear huellas minerales y químicas para estudiar si Marte pudo ser un mundo habitable. La segunda, pretende perforar Marte y estudiar la estructura y temperatura interna del planeta.
La próxima misión con destino a Marte será Mars2020, que tiene como finalidad buscar si este planeta puede ser habitable.
Síguenos en Twiter...