Elecciones en los tiempos de Lava Jato

En el 2020 tendremos un nuevo Congreso, un presidente saliente en su tercer año de mandato y –hacia la segunda mitad del año– el inicio de la carrera para las elecciones generales del 2021. Y todo esto, en medio del Caso Lava Jato, la investigación por corrupción y otros delitos más grande de nuestra historia.

Aunque no son precisamente actores políticos, los fiscales del equipo especial del Caso Lava Jato tienen un rol en su dinámica. Sus investigaciones alcanzan a buena parte del elenco estable de la política, y han marcado y seguirán marcando la agenda pública.

¿Cómo será el inicio de la campaña para las elecciones del 2021 considerando la presencia de tantos actores?

Es probable que el presidente Vizcarra trate de impulsar alguna reforma política en el nuevo Congreso, pero es difícil que lo logre. Al no haber arrastre por la ausencia de una elección presidencial, es improbable que algún partido tenga una clara mayoría. Además, el hecho de que exista una elección presidencial en el corto plazo puede determinar que los grupos políticos eviten que se perciba la presencia de algún tipo de alianza entre ellos.

Habrá que esperar cuál será la actitud y propuestas del presidente Vizcarra en los próximos meses. La evaluación que viene realizando el Tribunal Constitucional respecto a la constitucionalidad del cierre del Congreso será clave para determinar cómo será recordada su gestión. También puede ser utilizada por el nuevo Parlamento para definir su relación. Lo usual sería que conforme se acerque la elección del 2021, el protagonismo y la popularidad de Vizcarra empiecen a disminuir. Lo inusual, pero no por ello imposible, sería que el mandatario siga tratando de ser el protagonista de la agenda pública.

El inicio de la campaña presidencial será –seguramente– lo más relevante del año. La coincidencia temporal con el desarrollo del Caso Lava Jato determinará que la línea entre buenos y malos la marque el hecho de si tal o cual partido (o político) recibió o no aportes de campaña (o coimas).

Durante el 2020 el equipo especial Lava Jato debería empezar a formalizar acusaciones en varios de los casos que involucran a políticos. Existe la posibilidad de que el inicio de la campaña –y puede que la campaña del 2021 en general– esté marcada por las actuaciones de los fiscales. La judicialización de la política es un hecho.

Lo que esperamos que no ocurra es que la necesaria atención y juzgamiento de nuestro pasado reciente opaque toda posibilidad de discutir sobre el futuro. Más aún cuando el gobierno que elegiremos en el 2021 será el del bicentenario de nuestra independencia.

Ciertamente, en el Perú todo lo pensado o planificado puede cambiar de un momento a otro. Alguna sorpresa desde lo político o judicial puede aparecer en cualquier momento.

1. Elecciones para un nuevo Congreso de la República

El 26 de enero (en solo tres semanas) elegiremos a 130 congresistas. Luego del cierre del Legislativo por el presidente Vizcarra, el nuevo Parlamento debe completar el mandato hasta el 28 de julio del 2021. Es poco probable que algún partido obtenga una clara mayoría. Todas las facultades del Congreso se mantienen intactas. Los nuevos parlamentarios podrán, de estimarlo pertinente, censurar ministros, crear comisiones investigadoras y reformar la Constitución. Aunque aún no se define una fecha exacta para su entrada en funciones, se estima que ello ocurrirá en marzo.

2. Martín Vizcarra y su futuro político

La falta de manejo político en su Gabinete y la inercia en el manejo de las políticas públicas son solo dos de los retos que tendrá que enfrentar el presidente Vizcarra. Su relación con el nuevo Parlamento y con los candidatos que pretendan ocupar su lugar en el 2021 serán determinantes para lo que será considerado su legado. Lo usual es que, conforme se acerque el final de su gestión, se produzca una disminución en su porcentaje de aprobación. Habrá que ver cómo coexiste el mandatario con esa idea.

3. El Caso Lava Jato

Son varios los políticos y partidos que habrían recibido aportes de Odebrecht. También hay algunos acusados directamente de recibir coimas. Lo cierto es que las acciones del equipo especial del Caso Lava Jato impactarán en la escena política. Por ahora, los casos más saltantes son los de Keiko Fujimori y Fuerza Popular, así como los de Ollanta Humala, su esposa Nadine Heredia y el Partido Nacionalista. Sin embargo, hay más partidos y políticos involucrados en las investigaciones. En cualquier momento las investigaciones pueden mostrar a nuevos protagonistas.

4. En busca de la presidencia en el 2021

A finales de diciembre de este año se conocerán las planchas presidenciales para las próximas elecciones generales. La presencia o no de una bancada en el Congreso que elegiremos en unas semanas puede ser relevante –para bien y para mal– para los futuros candidatos. Es posible que la narrativa anticorrupción sea la preponderante. Sin embargo, siempre hay espacios para quien logre posicionarse con un mensaje distinto.