Marco Quilca León

es un futbolista distinto y sus últimos años han sido iguales, como si su vida estuviera encima del tren que va a toda velocidad por la montaña rusa. Fue el héroe que luchaba contra la desnutrición infantil, luego villano por fallar un penal decisivo en la final de la Eurocopa y este martes, en , entró en la historia de Inglaterra al anotar el gol número cien de su selección en los mundiales.

LEE: Los ‘enemigos’ del ‘10′: De Canelo Álvarez a Zlatan, los críticos de Messi

Su doblete le sirvió también para convertirse en el goleador del combinado británico y uno de los máximos anotadores del Mundial. Lleva tres, los mismos que el francés Kylian Mbappé, el ecuatoriano Enner Valencia y el neerlandés Cody Gakpo.

Pero ese es Marcus, de 25 años, que en 2016 se convirtió en el tercer jugador más joven en anotar con la selección, detrás de dos nombres históricos: Wayne Rooney y Michael Owen. Un futbolista tocado que se crió en las entrañas del Manchester United y en su momento era señalado como uno de las futuras estrellas que tomarían el trono de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, pero que luego se fue apagando.

Es el segundo Mundial del extremo. El primero fue en Rusia 2018 en el que disputó seis de los siete partidos con 21 años, pero no logró anotar. Hoy, más cuajado, con más experiencia, se convirtió en el goleador del equipo. Si Harry Kane está con el arco cerrado, pero con la calidad intacta para asistir (lleva dos pases gol), Rashford tranquilamente es capaz de asumir el rol de anotador. Lo está demostrando.

La felicidad está del lado del delantero y de la selección inglesa. Nueve puntos de nueve jugados para convertirse en uno de los potenciales candidatos a llevarse el trofeo más deseado. Pero hace solo un año y medio, Marcus, aquel que luchó hasta con el gobierno de su país para que se alimentara a los niños de la calle en plena pandemia del COVID-19, fue un villano. Y fue maltratado injustamente con muchos mensajes de racismo.

CRÓNICA: Te verán volver, Ecuador

Rashford y el penal que lo condenó

En julio de 2021, la Asociación Inglesa (FA) de fútbol dijo estar “consternada” y “asqueada” por los comentarios racistas difundidos en las redes sociales contra los jugadores Marcus Rashford, Jadon Sancho y Bukayo Saka tras la derrota de la selección de Inglaterra ante Italia en la final de la Eurocopa.

Los tres jugadores fallaron en los penales después de que la tensa final terminara 1-1 tras el tiempo suplementario. De modo que Italia le arrebató a Inglaterra su sueño de obtener la Eurocopa después de 55 años y se alzó con su segundo trofeo.

MIRA: Países Bajos no se despeina para clasificar a octavos y se da el tiempo de experimentar

Ellos eran los señalados, víctimas de infinidad de mensajes y actos racistas. Su color de piel, claro, eran la mejor excusa para intentar ofenderlos. Olvidaron que Marcus luchó por los niños que pasaban hambre, que no dudó en ponerse en contra del gobierno de su país exigiendo por algo que nadie se atreve a hacerlo.

“Puedo criticar mi actuación todo el día, mi penal no fue lo suficientemente bueno, debería haber entrado, pero nunca me disculparé por quién soy y de dónde vengo”, señaló Rashord. “No he sentido nunca mayor orgullo que llevar esos tres leones (los del escudo inglés) en el pecho y ver a mi familia animándome entre miles de personas”, añadió.

“Sentí que había defraudado a mis compañeros de equipo y a todo el mundo. Un penal era todo lo que se me pedía que aportara para el equipo. Puedo marcar penales, hasta dormido pero ¿por qué no ese? Desde que pateé no dejó de pensar en ello, y probablemente no haya una palabra que describa lo que siento. Todo lo que puedo decir es que lo siento y que me gustaría que hubiese sido diferente”, finalizó.

Tras el penal fallado, un mural en homenaje a Rashford fue llenado de insultos racistas. Pero luego lograron restaurarlo con mensajes positivos. (Foto: AFP)
Tras el penal fallado, un mural en homenaje a Rashford fue llenado de insultos racistas. Pero luego lograron restaurarlo con mensajes positivos. (Foto: AFP)
/ LINDSEY PARNABY

Un año y medio después, en Qatar, lejos de su natal y querido Mánchester, Marcus está forjando su camino para tener su revancha. Quiere llevar a lo más alto a su selección y lo está logrando a base de goles, no solo de gambetas a pura velocidad.


----

Contenido sugerido

Contenido GEC